El Turno de la Bruja Dorada
Capítulo 26: Banquete
Fishy aroma
Rosa por fin había llegado a la capilla. Apuntó el rifle a su alrededor, gritando el nombre de la bruja, pero era imposible que recibiese una respuesta.
Al menos… sólo este… Este por sí solo debería valer más de diez millones…
Rosa cogió el oro sin abandonar su rifle… Sus hombros estaban gritando, pero a Rosa no le importó.
Kihihihihihihihihihihihihihihi. Ocurrirá muy pronto… Muy pronto, la puerta a la Tierra Dorada… se abrirá.
¡¡Deja de reírte con esa voz inquietante!! ¡¿Dónde está Beatrice?! ¡Sí, lo sé, está por aquí en algún sitio, ¿verdad?! ¡Sabes dónde, verdad?! ¡¿Dónde está?!
Kihihihihihihihihi. No lo sé. Aunque no la busques, serás capaz de verla en la TIerra Dorada… Kihihihihihihihihihihihihihihihihi, ay.
¡¡Deja de reírte así!! ¡¡Aaah, me entran ganas de reírme!! ¡¡Eso eso, era definitivamente una bruja, definitivamente una bruja!! ¡¡No lo entendía, creía que era una humana llamándose bruja a sí misma, pero estaba equivocada!!
Scorpion entrails
Al menos llámame reina. Oh, qué movimiento tan brillante. Así que a tu sangre… no, a la sangre de la familia Ushiromiya se le da mal rendirse.
¡Qué placentero! Una noche realmente elegante. ¡¡Je, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja…!!
Señor, señora Beatrice. La hora del banquete llegará pronto.
¿Ya? Qué rápido. Cada noche que paso contigo trascurre con rapidez, la luna cae como una manzana y el sol sale del río como un pequeño pez.
Es hora, así que vayamos… Álzate, Battler. El banquete para celebrar mi resurección empezará ahora. Te introduciré como mi nuevo mueble… no, mi nuevo juguete. A los dignatarios de entre las brujas.
Señora Beatrice, su vestido de seda.
Eres la invitada de honor, pero yo soy el anfitrión. Saldré primero. Habría sido mejor si Shannon hubiera estado aquí para ayudarte a vestirte, pero, desafortunadamente, parece que ya no vive. Nunca está cuando quiero usarla. Una persona completamente inútil… Sin embargo, tú hiciste bien en quedar aquí… Estoy contento, amigo mío.
Le agradezco sus palabras.
Bien. Bajad, los dos. Genji, buen trabajo, deja el vestido ahí.
Por supuesto… Bien, pues, señor.
Saldremos primero… Beatrice, te veré luego.
Bien.
Kinzo y Genji salieron del estudio. Tras eso quedaron la bruja y el vestido y el mueble.
¿Sabes por qué no me da vergüenza mostrarme desnuda ante ti?
…
Porque eres un mueble. Mueeeble. ¿Entiendes? ¡Mueble, sólo un mueeeeble! ¿Quién sentiría vergüenza por exponer su cuerpo a un mueble? Así que no tengo razones para sentir vergüenza delante de ti. *carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*
La bruja se levantó y su chaqueta se deslizó desde sus hombros… Tras eso, la chaqueta cayó al suelo con un sonido sordo. Cuando el mueble se acercó respetuosamente para recoger esa ropa, la bruja le dio una pequeña patada, y cayó al suelo… El mueble temía qué mal comportamiento podría haber mostrado…
¿Tú, como mueble, planeas obligarme a desabrocharme sola? Levántate y deshaz los botones… Uno a uno, con cuidado. Rápido. De forma elegante. Sin errores. Los invitados están esperando, así que cámbiame rápido de ropa.
Sí…
*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas* Ja, ja, ja, ja, ja, ¡¡ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja!! Desabróchalos con cuidado. Cada uno de esos botones cuesta más que uno de tus ojos… Si cometes un error y los rompes, coseré uno de tus ojos en su lugar… *carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*
Pero todos tenían una cosa en común, y esa cosa era extremadamente extraña… Porque todos ellos… tenían cabezas de cabra. ¿Era una mascarada con máscaras de cabra… o de verdad tenían cabezas de cabra? Probablemente no podría ser lo segundo, pero en este mundo extraño, no sabía qué era cierto.
En ese momento, la voz de Genji resonó por toda la entrada. Era una voz que pedía silencio. Esa voz detuvo las charlas y toso el mundo se giró para ver a Genji.
Hoy celebramos la aparición de nuestra Bruja Dorada, quien ha alcanzado su resurrección, Lady Beatrice. Por favor, que todo el mundo le de la bienvenida con un aplauso.
Cuando Genji empezó a aplaudir, la acción se extendió rápidamente por todos los invitados y se convirtió en una ovación ensordecedora.
Los nobles cabra ofrecieron palabras unánimes de celebración en una lengua olvidada desde hacía eras. Y aquellos que abrazados íntimamente, se llenaron de alegría a su reunión. Mientras la bruja les ofrecía saludos de reunión… su mueble la seguía detrás todo el tiempo… Había una cadena alrededor de su cuello. El final de la cadena lo agarraba la mano de la bruja, como si fuera un perro entrenado.
No estaba ahí para controlarlo… Esas cadenas eran un aparato de control cuya única función era herir la dignidad del mueble… No tenía permitido llevar nada más en su cuerpo…
(Oh, Bern. No te veíamos desde el final del episodio 1)
Es una buena afición.
Tras decir sólo eso, la bruja llamada Bernkastel volvió a ponerse su máscara de cabra… y fue tragada por las sombras de las otras cabras altas…
Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja… Qué mala perdedora. Está enfadada, ¿verdad?
Estás en lo cierto. *carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*carcajadas*
Las jóvenes mujeres cabra rieron, y la bruja volvió a dejar salir una risa aguda.
¡¡Venid, comeremos toda la noche, beberemos toda la noche, sorberemos toda la noche y masticaremos toda la noche mientras disfrutamos!! Mirad el reloj mientras marca cuando la hora final y la hora inicial se derritan en una sola… ¡¡venid!! ¡¡¡Qué empiece el banquete de la bruja!!!
Cuando la bruja anunció el inicio del banquete, el gran reloj marcaba las 24:00, y el sonido de la campana empezó a resonar…
¡¡Vamos… es la hora!! ¡¡¡Que se abra la puerta dorada…!!!
Rodeado por las voces encantadas de las cabras, la mansión del mundo humano y la mansión de aquellos que no eran humanos se solaparon… y los miembros de la casa que alabaron la resurrección de la Bruja Dorada se dispersaron en mariposas doradas… y salieron en tropel de las profundidades del infierno… Era un… tornado… dorado… Un rondó de demonios dorados.
Ven, hoy el rango no importa. ¡¡Abre de par en par la bodega, deja caer la cabeza de la serpiente en la olla de licor, lanza vacas y pollos vivos en el horno, bebe y come y canta y baila, ríe y mata y profana y degrada!!
Las cabras nobles de repente se amontonaron alrededor de Kinzo… Casi como si fueran niños que exigían la firma de una estrella de cine famosa. Sólo había dos diferencias. Primero, eran brujas, no niños. Y segundo, lo que esas brujas exigían no era una firma. El mar de cabras nobles empezó a ahogar a Kinzo. Sólo se podía oír la risa de Kinzo por la zona.
Toda la escena… fue observada por el mueble. Era completamente fantástica… Era completamente demoníaca.
¿Era el temblor de su supuestamente paralizado corazón… prueba de que todavía podía sentir miedo? En ese momento, sus rodillas se doblaron y el cuerpo del mueble cayó en medio de la alfombra. Después de todo, la bruja le había pegado una patada a esas rodillas desde atrás.
Arrodíllate y muestra tu respeto. Frota tu frente contra la alfombra y muestra lo vulgar que eres. Pon las manos detrás de la espalda y jura que me ofrecerás toda tu carne y sangre.
Nng…. ah…
El mueble dejó salir una voz dolorosa… El miedo es la emoción más básica que tienen los humanos… ¿Estaba esa emoción reviviendo su conciencia de si mismo, la cual ya debería haber sido destruida?
Bah. Así que todavía estás lejos de de ser adecuado para ser mi mueble. ¡Muy bien! Te daré los toques finales cuidadosamente, convirtiéndote en la clase de mueble que me gusta, la clase de mueble que es adecuado sólo para mi… ¡Tal y como estás ahora, dudo que puedas ser algo más que un entretenimiento para nuestros invitados!
Las cabras nobles estaban rodeando el mueble agachado… Parecía que sus ojos rojos y ardientes no podían esconder su éxtasis hacia esta nueva y joven comida que se les estaba entregando. Y de los feos dientes que sobresalían de incontables bocas, se escurrió saliva… o quizá trazas de la carne y el vino que acababan de comer...
¡¡Ii…iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!
Mientras el mueble dejó salir un grito salvaje, retrocedió, todavía tumbado sobre su espalda… Pero el círculo de cabras nobles se acercaba… Entonces el mueble miró a la cara de la bruja… se había rendido a la bruja así que, creyendo que la bruja podría mostrar algo de compasión, la miró fijamente a la cara.
Pero no había más que desprecio en la cara de la bruja, y ya ni siquiera estaba mirando al mueble. La bruja fue a saludar a otros invitados de honor con quienes había cruzado la mirada…
Las cabras nobles miraron al mueble. De hecho, habían estado esperando. Del mismo modo que uno debe remover el corcho para beber champán, ellos tenían que esperar por una cosa antes de tomar parte en la ofrenda servida en este banquete. Por supuesto, el mueble no sabía nada al respecto… pero salió de su boca igualmente. Al igual que el inevitable ruido de un corcho que se quita, eso salió forzosamente de su boca.
(Sí, he partido este capítulo en dos vídeos por si uno os parecía demasiado largo)
Worldend_dominator
¡¡Maria, rápido!! ¡¡Corre!! ¡¡Rápido, rápido, rrápido, rápido, rápido!!
Rosa agarró su rifle y la sábana envuelta alrededor del lingote… y corrió a una velocidad que Maria no podía seguir, parando a veces para decirle a Maria que corriese más rápido.
Cada vez lo veía… ¡Veía los perseguidores dorados que las seguían desde la mansión! ¡¡La masa de mariposas doradas que las estaba persiguiendo como una mano que se extendía!! ¡¡Y sombras extrañas con cabezas de cabra las estaban persiguiendo…!! No tenían que forzar la vista. Porque esas pupilas ardientes le decían lo que ocurriría si era capturada.
¡¡Mamá, espera, mamá, espera… uu, uu, ay!!
María cayó. Durante un instante, Rosa se avergonzó de pensar en abandonar a su hija y huir, y en le istante en el que sus pies tocaron el suelo, corrió de vuelta.
¡¡Mamaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, nooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!
Intenta ponerle un dedo a Maria encima delante de mi. Te mostraré lo cálido que es el infierno del que vienes.
¡¡Mamá!! ¡¡Mamáaaaaa!!
Maria, quien había sido liberada, abrazó a Rosa. ¡Pero los perseguidores seguían acercándose! Podían ver las cabezas gigantes de cabra, quienes habían dejado de fingir que eran Humanos, corriendo hacia ellos a través de los arbustos de rosas. Rosa dejó caer varias balas extra, que tenía en el bolsillo de su abrigo, por todas partes, y le dijo a Maria que las recogiera.
¡S-sí…! ¡¡Recoger, recoger…!!
Maria, si mamá cae, corre. Ve al puerto. ¡Y nada y nada y nada! ¡¡No hay ningún lugar en el que podamos sobrevivir en esta isla!!
¡¡N-no!! ¡¡Me quedaré con mamá!! ¡¡Uuuu!!
¡¡Mete la bala!! ¡¡Rápido!!
¡¡U-uu!!
¡¡Rosa agarró la sábana del lingote con ambas manos, y ella misma corrió, llevándola consigo!! ¡¡Sin una pizca de miedo de esos gigantes de aspecto extraño!!
¡¡Si es para proteger a mi hija, superaré hasta el mismo infierno!!
Rosa rugió. Las cabras rugieron. Ese lingote terriblemente pesado, tras coger una aterradora fuerza y velocidad centrífugas, se estrelló contra la cabeza de la cabra. Rosa encontró una pluma estilográfica en su bolsillo. Pero la agarró doblada. La puso en la palma de su mano, en el espacio entre el dedo corazón y el anular para que sobresaliese cuando cerrara el puño, casi como su le creciera un aguijón.
¡¡Mamá, la bala ha entrado!!
¡¡Buen trabajo!!
Cuando Rosa recogió el rifle que Maria le había lanzado, el gigante por fin había caído al suelo con un ruido ensordecedor.
Sin embargo, al mismo tiempo, vi que la las cabras perseguidoras del otro lado del arbusto de rosas aumentaban en número. ¡He ganado suficiente distancia por ahora! Agarré la sábana envuelta alrededor del lingote y el rifle… y volví a correr con Maria. ¿Por qué estoy corriendo con un rifle en mi mano derecha y el oro en mi izquierda? ¡¡¿Por qué no dejo uno de los dos y agarro la mano de Maria?!!
No puedo abandonar el rifle que protege mi cuerpo.
No puedo abandonar el oro que protege mi futuro.
Pero aún así, ¡¿he abandonado la mano de mi hija, la cual es mi futuro…?!
Había jugado aquí con frecuencia desde sus años de niñez. ¡Así que lo conocía! A la playa. A la playa. Al mar, al mar, al mar. ¿Tras alcanzar el mar? Nada que hacer salvo nadar, nadar, nadar, y si Maria no puede nadar, ¡¡la llevaré mientras nado!! ¡No hay nada salvo muerte en esta isla!
(Me gustaría saber cuántas milésimas de segundo tardarías en hundirte cargando con un lingote de diez kilos y una niña que probablemente ronde los veinte)
Mientras corría escaleras abajo, pisó mal. Un dolor violento subió por su tobillo derecho, y su mente quedó completamente en blanco. Rosa cayó varias escaleras, conmocionada por su tobillo, el cual estaba doblado en un ángulo extraño… Y la sábana con el lingote ya no estaba ahí. Lo había dejado caer en el instante en el que había caído, y había desaparecido en la oscuridad. Sólo quedaba el rifle.
Los temblores de tierra cada vez estaban más cerca. Era cuestión de tiempo que las cabezas de las cabras lo llenasen todo. No quería imaginar cuántas habría, o lo extrañas que parecerían.
Aaaaaaaaaaah, qué estoy haciendo… Tenía el oro, el cual habría valido varios millones de yenes. ¡¡Habría sido capaz de volver a empezar con eso!! ¡Y aún así caí, lo perdí, y ahora mi propia vida está en peligro, ¿y la de Maria también?!
¡¡¡¿Qué vida he tenido?!!! ¡He nacido en una familia incomprensible! ¡¡Con hermanos mayores irritantes desde el día en que nací!! ¡¿Qué he hecho?! ¡¡Daba igual lo que hiciera o dejara de hacer, siempre estaba en problemas y se metían conmigo y se reían de mi!! ¡¿¡¿Qué vida he tenido?!?!
Maria, mamá ha recordado que tiene algo que hacer. Por favor, sigue adelante.
¡¡No, no no no no!! ¡¡Quiero quedarme con mamá!! ¡¡No quiero que mamá muera!!
Maria… aunque he sido una mamá tan mala… ¿todavía dices que quieres quedarte conmigo?
¡Sí…! ¡Quiero quedarme contigo… quiero quedarme con mamá…!
Eh, mamá… ¿Sabes qué? Eres mi única mamá en este mundo. No hay una mamá buena o mala… Sólo hay una mamá. Así que no necesito ninguna otra mamá en este mundo. Y quiero ser tu única Maria… la Maria que consientes cuando estás de buen humor… y la Maria que es una molestia y que no quieres tener alrededor… no son personas diferentes. Sólo hay una Maria… Así que la mamá que da miedo y la mamá buena son la misma… Para mi… son mi única… mamá…
Las sombras de las cabras cubrieron el cielo aún más que los árboles del bosque… sus rígidos llenaron el mundo con miedo. Rosa, todavía abrazando a Maria, preparó su rifle con una mano.
Maria, vamos juntas. Nunca te abandonaré… ¡Permanezcamos juntas para que mamá nunca vuelva a perderse…!
¡¡Sí…!! Podremos volver a vernos pronto. ¡¡Estaremos juntas para siempre…!! ¡¡Seremos capaces de vernos… en la Tierra Dorada…!! ¡Y jugaremos juntas! ¡¡Jugaremos al "puzle de los lobos y la ovejas"!! Mamá no ha resuelto más que uno de los puzles, pero yo los he resuelto todos. ¡¡Así que yo daré los acertijos!!
Se lo había comprado como regalo de cumpleaños… y no había vuelto a jugar con Maria después de esa primera noche.
Esos ojos, brillando como lava ardiente, parecían un grupo de luciérnagas. Bailaron, se acercaron y atacaron.
FIN DE LA PARTIDA
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