-¿Pero qué rayos...? -masculla Angewomon, totalmente pillada por sorpresa por tu repentino arranque emocional-. ¿Crees que me importa la historia de tu vida? Porque...
-Yo... quiero...
La poderosa voz de Devidramon engulle las insignificantes quejas de Angewomon.
-Yo... quiero... -repite, su hocico humedecido por las incesantes lágrimas que surgen de sus cuatro ojos rojos-. ¡Quiero estar con Alice! ¡Es mi amiga! ¡¡MI MEJOR AMIGA!!
Los segundos siguientes son muy confusos. Escuchas la risa de Angewomon a tus espaldas y cómo sus dedos aprietan tu cabeza con más fuerza todavía. Las alas de Devidramon al alzar el vuelo para lanzarse contra tu captora te hacen daño en los oídos. La sangre apenas te llega al cerebro. Nyaromon chilla algo, pero no lo entiendes. Angewomon se acerca a tu oído.
-Tan tozudo como tú, ¿eh? Sólo tenía que admitir que no te soporta, y todo hubiera salido bien. Pero ambas sabemos que decir la verdad le cuesta demasiado, ¡ja! -Angewomon te escupe-. Espero que estés orgullosa... de tu asesino.
-¡¡DETENTE!!
La voz de Válor es lo último que escuchas antes de que los huesos de tu cráneo cedan ante la asombrosa fuerza de la Digimon de nivel Perfecto y te rompan la cabeza por completo, la sangre nublando tu vista al insante. Todo a tu alrededor se desvanece... al mismo tiempo que tu vida.
@Jeremy (75%) @Asch (150%) @Luke (75%) @Alan (100%) @Tris (0%)
Norizuna se relaja un poco al notar el tacto de tus dedos en su piel y suspira.
-Sí, he visto a Penguinmon con un niño pelirrojo más o menos igual de alto que tú, y también a Shaomon, que es lo que solía ser Labramon antes de evolucionar, con una chica casi tan grande como Asch. Había un Sunflowmon con un chico rubio... ¿Tal vez Floramon? La única otra opción sería Gazimon, y no lo veo plausible...
Nori hace como que se pierde en sus propios pensamientos mientras sigues hablando, pero al cabo de un rato no puede evitar bufar pesadamente y separarse de ti. Flota unos segundos frente a ti, intentando establecer contacto visual.
-Esto, Remy... -empieza, algo cortado-. Siento... Siento lo de antes. Fue inmaduro por mi parte. Sólo estaba pensando en mí y en los míos, cuando estoy seguro de que vosotros los humanos traídos aquí en contra de vuestra voluntad lo estáis pasando igual de mal que nosotros. Hemos sido un gran equipo todo este tiempo, y... ¡quiero que siga siendo así! -exclama, algo más animado-. Así que... ¿Me perdonas?
Yuri se recuesta a tu lado cuando te sientas, Asch. Te escucha atentamente y se pone rojo cuando mencionas su incremento de poder.
-Eh... Eh... -balbucea por lo bajo-. G-gracias. Pero si quiero llegar a ser tan f-fuerte como tú, Asch, tengo que trabajar todavía más d-duro Y esta f-forma requiere mucho sustento... Tengo hambre otra v-vez... -Se queda pensando un rato, su expresión pasando a una más seria-. Si esta a-alianza te pone en peligro, te p-protegeré. Hay m-muy pocas posibilidades de que absolutamente toda Internalia esté m-metida en el ajo y no haya ni un solo espía de Persiamon. P-pero mientras nuestros objetivos sean los mismos, no hay nada de m-malo en colaborar, ¿no? Puede que mostraros a los humanos c-como los héroes sea algo político o s-social. No sé, Kudamon s-seguramente sepa más de esto que yo... Lo que i-importa es que cuando cacemos a P-Persiamon nosotros obtendremos las respuestas que buscamos y ellos habrán destronado a la dictadora que ha aterrorizado t-toda nuestra zona del mundo digital.
Al cabo de un rato llega Dianamon con los otros tres niños y sus compañeros. Norizuna y Yuri pierden algo de tiempo lanzándose a los otros digimon, abrazándolos y poniéndose a charlar sobre sus aventuras desde el día en que se separaron. Dianamon suspira.
-Siento no poder organizar una procesión de bienvenida para vosotros también. Sin duda continuaría subiendo la moral de nuestros soldados el ver a más humanos uniéndose públicamente a nuestra empresa contra Persiamon. Pero el tiempo apremia. Tendréis tiempo para charlar después. Avancemos hacia la base si no hay más preguntas. Mañana será un día duro.
@Matías (125%) @Adair (100%)
Tras las palabras de Matías, Witchmon recoge a Tanemon del suelo antes de obligarte a subirte a su escoba, Adair.
-Decidido por mayoría absoluta, pues. -Seraphiel fija la mirada al frente-. Todo esto no habría ocurrido si no fuera por Sorcermon...
-¡A mí no me mires! -exclama Sorcermon, apuntando con su báculo hacia el techo-. Yo sólo quería... ¿Qué es lo que quería? Ah, bah, no me acuerdo. ¡Al menos hemos hecho algo de ruido! ¡Estos perdedores nos recordarán una buena temporadita!
Una bola de hielo emerge del arma del digimon mago y colisiona con la parte más alta del pasillo de piedra, provocando un derrumbe que bloquea el paso a vuestros posible perseguidores. No llegáis a ver a ninguno de ellos escapando ileso de la tormenta de nieve envenenada que habéis creado antes de que la avalancha impidiera vuestra visión.
-¡No hay más sitio en mi escoba, así que os toca correr, así que os toca correr a ti y a tu compañero! ¡Lo siento, Matías! -os informa Seraphiel.
Acto seguido echa a volar a toda velocidad por el largo corredor principal del castillo.
-¡Una carrera! -Sorcermon te coge de la muñeca y echa a correr, arrastrándote con él, Matías-. ¡Rápido, rápido! ¡No podemos dejar que nos ganen!
Aunque no tan rápido como la escoba de Witchmon, lo pasas un poco mal para seguirle el ritmo a Sorcermon. Parece tener mucha mejor capacidad física que tú. Los segundos se os hacen eternos cuando llegáis al vestíbulo principal y empezáis a ver en la lejanía la salida de la fortaleza. Está a vuestro alcance.
-Quetzalmon... Cuando dejó de resistirse y permitió que le lanzarais todos esos ataques... -De repente escuchas la voz de Tanemon, Adair-. Estaba susurrando algo... Estaba susurrando... “Ya está aquí. Ha vuelto.”
-¿Qué estás di...?
La voz de Witchmon es interrumpida por un sonido parecido al de la avalancha provocada anteriormente por Sorcermon. Ocurre demasiado rápido. Una gigantesca figura atraviesa el techo del castillo, lanzando rocas por todas partes, y aterriza en pleno centro de la sala. La diferencia de velocidad que llevabais separa a Adair, Seraphiel y Tanemon a un lado, más cerca de la salida de la fortaleza, y a Matías y Sorcermon al otro lado, junto al corredor que lleva a donde estabais luchando contra Quetzalmon, IceDevimon y Devimon.
- Spoiler: Mostrar
-¡¿QUIÉN OSA MANCILLAR EL NOMBRE DE MI IMPENETRABLE FORTALEZA?! -resuena el vozarrón de la criatura. Entonces se fija en aquellos que tiene frente a él: Matías y Sorcermon-. ¡¿HUH...?! ¿UN HUMANO...?
Sorcermon te empuja para colocarte a su espalda y frunce el ceño, adelantando su báculo. Majiramon todavía no se ha dado cuenta de la presencia de Adair y Seraphiel.
@Alice (200%)
-¡¡DETENTE!!
El grito de Válor te despierta. Sientes el cuerpo débil al principio, y te llevas la mano al hombro, donde hace un rato se te había abierto la herida causada por un Gabumon siervo de Hookmon días atrás. Ahí sigue la herida, cicatrizada mucho antes de lo que debería. Ya no te duele. Sudorosa y jadeante, empiezas a recordar tus últimos momentos y te tocas la cabeza apresuradamente.
Sí, todo sigue igual de roto. Tu cráneo despedazado te devuelve a la realidad, y apenas puedes soportar las ganas de gritar. Aunque llamar a esto realidad se podría llamar exageración. Te encuentras en un espacio totalmente negro a excepción de cubos verdosos, datos y números flotantes que cambian continuamente y que eres incapaz de comprender. Aunque no parece haber ninguna clase de suelo o superficie discernible, puedes mantenerte de pie sin ningún problema.
Perderte en el paisaje hace que te des cuenta de algo. A pesar de que acabas de descubrir que tu cabeza de frente para arriba está destrozada, la sangre corriendo por tus mejillas, no te duele para nada, al igual que la herida del hombro. ¿Has muerto y esto es lo que hay “más allá”? Sea como sea y tardes lo que tardes en asimilar la situación, acabas decidiendo que no puedes quedarte quieta. Tras caminar un rato, ves un par de figuras en la lejanía de esa extraña dimensión. Por una parte ves a un Devidramon, Válor, tendido cuan largo es en el suelo. Parece inconsciente. No muy alejado de él ves otro digimon.
- Spoiler: Mostrar