Agridulce.
Era la sensación que aquella victoria me provocaba. Durante la última fase de la batalla, me había quedado mirando a los Digimon con la boca abierta y una mano extendida hacia ellos, como tratando de decir unas palabras que finalmente no se habían materializado. Dejé que Mat lidiara con los bebés (tanto los enemigos como el suyo, quien probablemente le daría más trabajo que los otros tres juntos).
Caminé en silencio hacia Kudamon y me senté, recostándome sobre la misma roca en la que él estaba, de forma que quedábamos mirando en la misma dirección. Medité unos momentos, eligiendo las palabras.
-No sabía que el fuego te afectaría estando dentro de la bala -fue lo primero que se me ocurrió decir-. Tendría que haberlo pensado, porque el metal es conductor y tiene sentido... Supongo que me imaginé que mientras estabas ahí dentro eras incorpóreo y no sentías nada o algo así. Para mí todo esto es muy extraño -reí forzadamente y negué con la cabeza-. No volveré a pedirte que hagas algo como eso. De todos modos, estoy seguro de que ese idiota no habría llegado tan lejos sin tu protección -levanté la cabeza al máximo para mirarle-. No le digas que lo he dicho. Él quiere quedarse con todo el mérito, pero yo sé la verdad: hemos ganado gracias a ti. Gracias por protegernos, Kudamon.
Digimon: Data Disruption [Rol]
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
Tras derrotar al Kudamon, me fijé en que ese maldito gusano había atacado en el último suspiro a Penguinmon. Sin embargo, dijo que él estaba bien, pero que Alan necesitaba más mi ayuda.
—Aaaah, ¡maldita sea! A ver, Penguinmon, tápate la herida como mejor puedas, ahora vengo, voy a ver a Alan.
Pero él no estaba mucho mejor que Penguinmon. ¿Pero a éste qué le ha pasado? ¿Qué clase de inconsciente va a atacar a un digimon y... ups. Miré un poco sus heridas. Y me fijé que Floramon no estaba, ahora había un Ninjamon. ¿Había digievolucionado? ¡Cómo mola!
—¿Eres Floramon? Guau, cómo mola tu digievolución. ¡Ah, sí! Mira a ver si en sus bolsillos tiene alguna tirita. Si no tiene, lo mejor que podemos hacer es mirar de desinfectar sus heridas y tapárselas como mejor podamos. Así quizá no se infecten y tal. Por aqui agua oxigenada o yodo no tenéis, ¿no? Mi mamá suele ponerme agua oxigenada en las heridas, quizá agua del río sirva.
Miré alrededor a ver si había alguna cosa con la que poder taparle las heridas a modo de tirita si no tenía él en sus bolsillos. Por dios, qué imprudente, lanzarse contra el digimon rival, así sin más.
—Aaaah, ¡maldita sea! A ver, Penguinmon, tápate la herida como mejor puedas, ahora vengo, voy a ver a Alan.
Pero él no estaba mucho mejor que Penguinmon. ¿Pero a éste qué le ha pasado? ¿Qué clase de inconsciente va a atacar a un digimon y... ups. Miré un poco sus heridas. Y me fijé que Floramon no estaba, ahora había un Ninjamon. ¿Había digievolucionado? ¡Cómo mola!
—¿Eres Floramon? Guau, cómo mola tu digievolución. ¡Ah, sí! Mira a ver si en sus bolsillos tiene alguna tirita. Si no tiene, lo mejor que podemos hacer es mirar de desinfectar sus heridas y tapárselas como mejor podamos. Así quizá no se infecten y tal. Por aqui agua oxigenada o yodo no tenéis, ¿no? Mi mamá suele ponerme agua oxigenada en las heridas, quizá agua del río sirva.
Miré alrededor a ver si había alguna cosa con la que poder taparle las heridas a modo de tirita si no tenía él en sus bolsillos. Por dios, qué imprudente, lanzarse contra el digimon rival, así sin más.
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Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
—He estado mejor, pero no creo que tenga problemas, sobre las vendas tienes razón.
Intentando no causarme más daño del necesario, me quité la cazadora y la camiseta para extender esta última delante de Kiwimon.
—¿Puedes cortar las mangas? Con tu pico deberías tener más facilidad que yo y me vendrán bien como vendas —le pedí amablemente y cuando lo hubiese hecho usaría las mangas para vendarme el hombro y volver a ponerme la ropa con cuidado, tampoco es que hubiese ningún tío por los alrededores —. Bah, si hubiese sido buena no habría acabado con un cuerpo en el hombro, tendría que haberme pensado mejor las cosas. Y valor no es el lanzarte contra un enemigo que te supera en todo, eso es ser un inconsciente, valor es luchar contra él para defender lo que te importa —le dediqué a Kiwimon una sonrisa de oreja a oreja y un golpecito en la cabeza —. Gracias por salvarme, Kiwimon.
Viendo que Tris también había terminado con su objetivo, fui a donde ella para ver si se encontraba bien o tenía alguna herida como las mías, a saber si esa chica podía aguantar siquiera cortarse con una hoja de papel.
—Para haberos enfrentado sin una mejora de poder lo habéis hecho bastante bien —les felicité antes de retomar el camino por el río, ahora que Gazimon había pasado a una forma mucho más poderosa podríamos enfrentarnos a muchos más rivales sin problemas —. Una cosa, Kiwimon —me detuve un momento para hablarle a mi compañero —. No quiero tener a mi servicio a alguien como Bunnymon. Mi compañero debe ser firme y fuerte, capaz de enfrentarse a los que amenazan a sus seres queridos. Alguien con orgullo… y Válor.
Intenté remarcar todo lo posible aquella última palabra para que Kiwimon se diese cuenta del nombre que quería darle, Válor. Se lo había escuchado decir a algunos chicos de mi clase que estaban enganchados a un juego de ordenador raro y me había parecido bastante guay para una mascota fuerte… o un compañero en el que confiar en este caso.
—Ya puedes murmurar lo que quieras sobre que es estúpido, pero te vas a quedar con ese nombre, Válor. A no ser que quieras volver al vergonzoso Bunnymon.
Intentando no causarme más daño del necesario, me quité la cazadora y la camiseta para extender esta última delante de Kiwimon.
—¿Puedes cortar las mangas? Con tu pico deberías tener más facilidad que yo y me vendrán bien como vendas —le pedí amablemente y cuando lo hubiese hecho usaría las mangas para vendarme el hombro y volver a ponerme la ropa con cuidado, tampoco es que hubiese ningún tío por los alrededores —. Bah, si hubiese sido buena no habría acabado con un cuerpo en el hombro, tendría que haberme pensado mejor las cosas. Y valor no es el lanzarte contra un enemigo que te supera en todo, eso es ser un inconsciente, valor es luchar contra él para defender lo que te importa —le dediqué a Kiwimon una sonrisa de oreja a oreja y un golpecito en la cabeza —. Gracias por salvarme, Kiwimon.
Viendo que Tris también había terminado con su objetivo, fui a donde ella para ver si se encontraba bien o tenía alguna herida como las mías, a saber si esa chica podía aguantar siquiera cortarse con una hoja de papel.
—Para haberos enfrentado sin una mejora de poder lo habéis hecho bastante bien —les felicité antes de retomar el camino por el río, ahora que Gazimon había pasado a una forma mucho más poderosa podríamos enfrentarnos a muchos más rivales sin problemas —. Una cosa, Kiwimon —me detuve un momento para hablarle a mi compañero —. No quiero tener a mi servicio a alguien como Bunnymon. Mi compañero debe ser firme y fuerte, capaz de enfrentarse a los que amenazan a sus seres queridos. Alguien con orgullo… y Válor.
Intenté remarcar todo lo posible aquella última palabra para que Kiwimon se diese cuenta del nombre que quería darle, Válor. Se lo había escuchado decir a algunos chicos de mi clase que estaban enganchados a un juego de ordenador raro y me había parecido bastante guay para una mascota fuerte… o un compañero en el que confiar en este caso.
—Ya puedes murmurar lo que quieras sobre que es estúpido, pero te vas a quedar con ese nombre, Válor. A no ser que quieras volver al vergonzoso Bunnymon.
Recompensa: Firma rotatoria
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
-No importa, Lucemon. Lo importante es que estén bien... ¿Estás bien?-le pregunté. No había creído que tuviera que preocuparme demasiado por él porque él mismo no parecía haberle dado importancia al fuego, y porque había actuado rápido para apagarlo; pero la verdad era que había estado en más peligro del que había dado por supuesto.
Ignoré al Koromon que huía, derrotado, y me fijé en el dispositivo digital. Decía que algún tipo de descarga se había completado, y por la frase siguiente supuse que ahora Lucemon podría digievolucionar. Pero el combate había terminado y prefería reservar la oportunidad para cuando realmente la necesitásemos. Cosa que igual ocurría pronto, si el Koromon cumplía su amenaza.
Ignoré al Koromon que huía, derrotado, y me fijé en el dispositivo digital. Decía que algún tipo de descarga se había completado, y por la frase siguiente supuse que ahora Lucemon podría digievolucionar. Pero el combate había terminado y prefería reservar la oportunidad para cuando realmente la necesitásemos. Cosa que igual ocurría pronto, si el Koromon cumplía su amenaza.
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
—Gracias, Alice, pero ha sido todo gracias a Labramon —respondí dedicándole una sonrisa a mi pequeño compañero y acariciando su cabeza con cariño—. Lo has hecho genial. Y veo que tú tampoco has perdido el tiempo —volví a dirigirme a la musculosa chica—. "Bunnymon" está algo cambiado.
Labramon me pidió comida de nuevo, pero seguía sin tener nada. así que miré alrededor en busca de algún árbol frutal. Si no lo encontraba, miraría si en el río había algún pez. Seguro que Labramon sería capaz de pescar alguno. Si lo del río también fallaba, preguntaría a Alice si tenía algo más de comer, y si esto tampoco daba resultado pediría perdón a Labramon y propondría continuar río arriba. Tarde o temprano encontraríamos a los demás chicos, y seguro que alguno de ellos tendría algo de comida.
Labramon me pidió comida de nuevo, pero seguía sin tener nada. así que miré alrededor en busca de algún árbol frutal. Si no lo encontraba, miraría si en el río había algún pez. Seguro que Labramon sería capaz de pescar alguno. Si lo del río también fallaba, preguntaría a Alice si tenía algo más de comer, y si esto tampoco daba resultado pediría perdón a Labramon y propondría continuar río arriba. Tarde o temprano encontraríamos a los demás chicos, y seguro que alguno de ellos tendría algo de comida.
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
- Lo has hecho bien, no te preocupes... Me pondre bien, solo hay que... desinfectarlo y.. taparlo con una venda... o algo.
No conozco nada de esto, no tengo ni idea de que hacer, pero si pierdo la calma, Ninjamon tambien la perdera.
- No somos muy distintos.. los humanos y los digimon... si sabeis curar vuestras heridas... podreis curar las mias... Yo voy a descansar un rato, gracias Ninjamon, me alegro mucho de tenerte a mi lado...
No conozco nada de esto, no tengo ni idea de que hacer, pero si pierdo la calma, Ninjamon tambien la perdera.
- No somos muy distintos.. los humanos y los digimon... si sabeis curar vuestras heridas... podreis curar las mias... Yo voy a descansar un rato, gracias Ninjamon, me alegro mucho de tenerte a mi lado...
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
-G-gracias chicos, estoy bien, no me he quemado. -dije mientras me levantaba y me sacudía la tierra de encima, abrumado por toda la atención- Jo, yo quería que FanBeemon derrotara al ultimo. Gracias por cubrirnos de esa, Lucy... ¡Lucemon! Perdón, me ha salido solo.
Recogí a mi insecto sobrealimentado y le rasque la cabeza mientras miraba al koromon largarse botando. Levanté el dedo corazón de una mano en su dirección.
-Me dan ganas de darle una patada cual pelota de fútbol. ¿Le seguimos o que? Total, teníamos que ir a por Meramon igualmente, ¿no?
Recogí a mi insecto sobrealimentado y le rasque la cabeza mientras miraba al koromon largarse botando. Levanté el dedo corazón de una mano en su dirección.
-Me dan ganas de darle una patada cual pelota de fútbol. ¿Le seguimos o que? Total, teníamos que ir a por Meramon igualmente, ¿no?
Ora Ora Ora Ora Ora
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
@Jeremy (100%) @Matías (-25%)
-¡Síiii! –exclama Minomon cuando le coges en brazos-. ¡He sido súper molón! ¡Bieeeen!
Los dos Tanemon te miran, Matías, con sus grandes ojos llenos de lágrimas. Parecen más asustados que enfadados con vosotros.
-¡Lo sentimos! –chilla el primer Tanemon botando.
-¡Lo sentimos! –repite el segundo Tanemon, también pegando brincos.
-¡Nosotros no tenemos la culpa!
-¡No tenemos la culpa!
-¡Sólo somos Tanemon de la Ciudad de los Tanemon! ¡El Doctor nos hizo evolucionar!
-¡Nos hizo evolucionar!
-¡No podíamos controlar lo que hacíamos!
-¡No podíamos, no podíamos!
-¡Podemos llevaros hasta el jefe Halsemon si queréis!
-¡Halsemon! ¡Si queréis!
-¡Saldrá a buscarnos cuando note que no volvemos! ¡Sería mejor ir ahora y pillarle desprevenido! ¡Halsemon no nos gusta! ¡Halsemon es malo!
-¡Malo, malo! ¡Siervo de Persiamon! ¡Persiamon conquistó nuestra ciudad a la fuerza! ¡Mala, mala!
Minomon les tira una piña a cada Tanemon en la cabeza y se ríe. Los Tanemon se ponen a berrear como bebés.
Jeremy, Kudamon te mira un tanto avergonzado cuanto te sientas junto a él, y suspira cuando empiezas a hablar.
-Puedo absorber los ataques hasta cierto punto… Todavía no soy lo bastante poderoso –Kudamon aparta la mirada-. Si fuera lo bastante fuerte, podría haber llevado a cabo tu bello plan como es debido. Siento haber arruinado una estrategia tan majestuosa con mi ineptitud… -Por un instante, te parece que Kudamon se ruboriza, pero enseguida vuelve a la normalidad-. Y-yo… Bueno, creo que podría haber aguantado un poco más, pero… Es que guardo… -Se calla durante unos segundos-… c-cosas en el interior de mi Artefacto Sagrado. Y preferiría que no se quemasen… ¡Lo siento, ha sido culpa mía! ¡Soy un egoísta!
Kudamon alza el vuelo y comienza a alejarse apresuradamente de ti, dejándose llevar por la vergüenza, pero tus últimas palabras hacen se detenga en seco y se de la vuelta para mirarte a la cara.
-¿De verdad piensas eso…? Crees que lo hemos conseguido… ¿gracias a mí? –Kudamon baja la mirada unos instantes. Entonces, esboza una sonrisa grande y sincera y se enrolla delicadamente alrededor de tu cuello, como si te abrazara-. ¡Gracias, Remy! ¡Eres el mejor! ¿P-puedo llamarte Remy? Suena a nombre de artista, y eso me gusta…
@Alice (140%) @Tris (75%)
Alice, Kiwimon te ayuda a quitarte la ropa para que no te hagas daño y corta las mangas tal y como le instruyes.
-Bueno… s-sí que ha sido un poco inconsciente –dice apartando un poco la mirada, como si le costara pronunciar esas palabras-. Ten más cuidado a partir de ahora. –Se ruboriza un poco cuando le pegas el golpecito amistoso y le das las gracias-. N-no ha sido nada… -Pero entonces murmura por lo bajo-. Je, je, sí que he sido valiente… Soy el mejor.
Tris, Labramon esboza una sonrisa perezosa por primera vez desde que le has conocido cuando le acaricias. No dice nada, pero parece que te agradece el que le des todo el mérito por el combate contra Otamamon. Le pides a Alice que espere un poco antes de retomar el camino y vas a buscar algo de comer para tu digimon. Le traes un buen montón de frutas y bayas que no sabes si son comestibles, pero Labramon se encarga de escoger las que no son venenosas (o las que más le gustan, no lo sabes) y comérselas.
-Aaah, qué buena siestecita me echaría ahora… -suspira, satisfecho-. Muchas gracias, Tris. Me siento mucho más fuerte ahora.
Tras alimentar a Labramon, continuáis caminando río arriba, y al cabo de un rato, veis un bosque en la lejanía. Kiwimon y Labramon se detienen.
-Aquí es más o menos donde nos separamos –musita Labramon-. Pero no parece que haya nadie… Es posible que se hayan adentrado en el bosque. Podríamos ir a buscarlos…
-¡O podríamos cruzar el río y ver qué hay más allá! –exclama Kiwimon-. Sería mucho más emocionante que buscar a otros cuatro pelmazos a los que aguantar –añade por lo bajo.
Labramon y Kiwimon se ponen a discutir sobre qué dirección tomar. Es entonces cuando le interrumpes, Alice. Kiwimon se pone rojo enseguida: parece que es propenso a ruborizarse, sin importar en qué forma se encuentre.
-Válor… -murmura-. Válor. ¡Válor! Me gusta. ¡Me encanta! ¡Y esta vez no es mentira! ¡Puedes confiar en mí siempre, Alice! ¡Seré firme, fuerte y todo lo demás! –exclama, muy contento-. Desde luego, es mucho más halagador que Bunnymon –murmura por lo bajo de todos modos.
Es entonces cuando vuestros dispositivos digitales comienzan a emitir un timbre muy particular. Parece el tono de un teléfono móvil, incluso. Cuando echáis un vistazo, no encontráis ninguna manera de “contestar” a la llamada, pero en la pantalla figuran dos puntos rojos. Deducís que, sean lo que sean esas marcas, se encuentran en dirección al bosque.
@Luke (100%) @Alan (0%)
-¡Alan! ¡Alan! ¡No mueras, por favor! –Ninjamon está empezando a ponerse nervioso a pesar de la ayuda de Luke y las palabras tranquilizadoras de Alan-. ¡Acabamos de conocernos! ¡No puedo haberte fallado tan pronto…! Tengo… ¡Tengo que hacer algo!
De pronto, Ninjamon se sube a un árbol de un sobrenatural salto. Desde allí, salta al siguiente árbol, y al siguiente… Así sucesivamente hasta que le perdéis de vista. Luke, te pones a buscar en los bolsillos de Alan y en los tuyos propios a ver si encuentras tiritas, vendas, o cualquier cosa con la que le puedas ayudar, pero no encuentras nada. Es entonces cuando escuchas pasos a tu espalda.
-Luke, he traído esto.
Es la voz de Penguinmon. Aunque se le nota cansado, parece estar bastante mejor, y trae consigo unas cuantas hojas de gran tamaño y unas lianas.
-Has hecho bien yendo a cuidar de Alan, Luke. Estoy muy orgulloso –te felicita Penguinmon con una sonrisa-. Ten, enróllale el torso con estas hojas y átalas con las lianas. No es mucho… Pero debería detener la hemorragia.
Es entonces cuando Ninjamon cae del mismo árbol al que saltó en primer lugar. Consigo trae una cantimplora llena de agua del río.
-La he hecho con la piel de un Tsunomon que me he encontrado por ahí –explica Ninjamon mientras trata de desinfectar delicadamente las heridas con el agua y vendáis a Alan. Tras darle un poco de beber a su compañero… ¡Ninjamon se pone a brillar de nuevo! En esta ocasión, retorna a su forma de Floramon-. Vaya… Debo haber gastado todas mis energías yendo tan rápido –se lamenta Floramon.
Es entonces cuando vuestros dispositivos digitales comienzan a emitir algo parecido a un tono de llamada de un teléfono móvil. Luke, cuando le echas un vistazo, ves que hay dos puntos rojos en la pantalla, no demasiado lejos de dónde os encontráis ahora mismo.
-¡Podrían ser los digimon de los que nos separamos! –salta Penguinmon-. ¡Debemos ir, rápido! ¡Antes de que cambien de ruta y se alejen de nosotros!
-No –le corta rápidamente Floramon-. Alan necesita descansar. Nos quedamos aquí.
-P-pero… Podría ser nuestra única oportunidad en mucho tiempo… -musita Penguinmon-. No creo que vayan a volver más al lugar en el que nos separamos si ahora ven que no hay nadie…
Luke, en la pantalla de tu dispositivo figura algo más que dos puntos rojos en la lejanía. Las palabras “Descarga completada. Nueva forma disponible” aparecen en el aparato nada más sacarlo.
@Asch (75%) @Adair (100%)
-P-perdón, Asch… Sé que querías que yo le derrotara... -murmura FanBeemon en bajito-. ¡P-pero no podía dejar que te quemaras…! Espero que no te enfades… m-mucho…
A pesar de sus palabras, se ríe un poco cuando le rascas la cabecita, contento. Lucemon, por su parte, se queda mirando al Koromon que va desapareciendo en la lejanía.
-Tal vez sí que debamos seguirlo, Adair –le concede a Asch-. Es probable que se dirija al Asentamiento de DemiMeramon. Y allí puede que encontremos a vuestros amigos humanos. Es lo más parecido que hay a una población por aquí cerca, así que si han caído por la zona, sus digimon les llevarán hasta allí. Oh –sonríe-, y puedes llamarme como quieras, Asch. No me disgusta.
-¡Síiii! –exclama Minomon cuando le coges en brazos-. ¡He sido súper molón! ¡Bieeeen!
Los dos Tanemon te miran, Matías, con sus grandes ojos llenos de lágrimas. Parecen más asustados que enfadados con vosotros.
-¡Lo sentimos! –chilla el primer Tanemon botando.
-¡Lo sentimos! –repite el segundo Tanemon, también pegando brincos.
-¡Nosotros no tenemos la culpa!
-¡No tenemos la culpa!
-¡Sólo somos Tanemon de la Ciudad de los Tanemon! ¡El Doctor nos hizo evolucionar!
-¡Nos hizo evolucionar!
-¡No podíamos controlar lo que hacíamos!
-¡No podíamos, no podíamos!
-¡Podemos llevaros hasta el jefe Halsemon si queréis!
-¡Halsemon! ¡Si queréis!
-¡Saldrá a buscarnos cuando note que no volvemos! ¡Sería mejor ir ahora y pillarle desprevenido! ¡Halsemon no nos gusta! ¡Halsemon es malo!
-¡Malo, malo! ¡Siervo de Persiamon! ¡Persiamon conquistó nuestra ciudad a la fuerza! ¡Mala, mala!
Minomon les tira una piña a cada Tanemon en la cabeza y se ríe. Los Tanemon se ponen a berrear como bebés.
Jeremy, Kudamon te mira un tanto avergonzado cuanto te sientas junto a él, y suspira cuando empiezas a hablar.
-Puedo absorber los ataques hasta cierto punto… Todavía no soy lo bastante poderoso –Kudamon aparta la mirada-. Si fuera lo bastante fuerte, podría haber llevado a cabo tu bello plan como es debido. Siento haber arruinado una estrategia tan majestuosa con mi ineptitud… -Por un instante, te parece que Kudamon se ruboriza, pero enseguida vuelve a la normalidad-. Y-yo… Bueno, creo que podría haber aguantado un poco más, pero… Es que guardo… -Se calla durante unos segundos-… c-cosas en el interior de mi Artefacto Sagrado. Y preferiría que no se quemasen… ¡Lo siento, ha sido culpa mía! ¡Soy un egoísta!
Kudamon alza el vuelo y comienza a alejarse apresuradamente de ti, dejándose llevar por la vergüenza, pero tus últimas palabras hacen se detenga en seco y se de la vuelta para mirarte a la cara.
-¿De verdad piensas eso…? Crees que lo hemos conseguido… ¿gracias a mí? –Kudamon baja la mirada unos instantes. Entonces, esboza una sonrisa grande y sincera y se enrolla delicadamente alrededor de tu cuello, como si te abrazara-. ¡Gracias, Remy! ¡Eres el mejor! ¿P-puedo llamarte Remy? Suena a nombre de artista, y eso me gusta…
@Alice (140%) @Tris (75%)
Alice, Kiwimon te ayuda a quitarte la ropa para que no te hagas daño y corta las mangas tal y como le instruyes.
-Bueno… s-sí que ha sido un poco inconsciente –dice apartando un poco la mirada, como si le costara pronunciar esas palabras-. Ten más cuidado a partir de ahora. –Se ruboriza un poco cuando le pegas el golpecito amistoso y le das las gracias-. N-no ha sido nada… -Pero entonces murmura por lo bajo-. Je, je, sí que he sido valiente… Soy el mejor.
Tris, Labramon esboza una sonrisa perezosa por primera vez desde que le has conocido cuando le acaricias. No dice nada, pero parece que te agradece el que le des todo el mérito por el combate contra Otamamon. Le pides a Alice que espere un poco antes de retomar el camino y vas a buscar algo de comer para tu digimon. Le traes un buen montón de frutas y bayas que no sabes si son comestibles, pero Labramon se encarga de escoger las que no son venenosas (o las que más le gustan, no lo sabes) y comérselas.
-Aaah, qué buena siestecita me echaría ahora… -suspira, satisfecho-. Muchas gracias, Tris. Me siento mucho más fuerte ahora.
Tras alimentar a Labramon, continuáis caminando río arriba, y al cabo de un rato, veis un bosque en la lejanía. Kiwimon y Labramon se detienen.
-Aquí es más o menos donde nos separamos –musita Labramon-. Pero no parece que haya nadie… Es posible que se hayan adentrado en el bosque. Podríamos ir a buscarlos…
-¡O podríamos cruzar el río y ver qué hay más allá! –exclama Kiwimon-. Sería mucho más emocionante que buscar a otros cuatro pelmazos a los que aguantar –añade por lo bajo.
Labramon y Kiwimon se ponen a discutir sobre qué dirección tomar. Es entonces cuando le interrumpes, Alice. Kiwimon se pone rojo enseguida: parece que es propenso a ruborizarse, sin importar en qué forma se encuentre.
-Válor… -murmura-. Válor. ¡Válor! Me gusta. ¡Me encanta! ¡Y esta vez no es mentira! ¡Puedes confiar en mí siempre, Alice! ¡Seré firme, fuerte y todo lo demás! –exclama, muy contento-. Desde luego, es mucho más halagador que Bunnymon –murmura por lo bajo de todos modos.
Es entonces cuando vuestros dispositivos digitales comienzan a emitir un timbre muy particular. Parece el tono de un teléfono móvil, incluso. Cuando echáis un vistazo, no encontráis ninguna manera de “contestar” a la llamada, pero en la pantalla figuran dos puntos rojos. Deducís que, sean lo que sean esas marcas, se encuentran en dirección al bosque.
@Luke (100%) @Alan (0%)
-¡Alan! ¡Alan! ¡No mueras, por favor! –Ninjamon está empezando a ponerse nervioso a pesar de la ayuda de Luke y las palabras tranquilizadoras de Alan-. ¡Acabamos de conocernos! ¡No puedo haberte fallado tan pronto…! Tengo… ¡Tengo que hacer algo!
De pronto, Ninjamon se sube a un árbol de un sobrenatural salto. Desde allí, salta al siguiente árbol, y al siguiente… Así sucesivamente hasta que le perdéis de vista. Luke, te pones a buscar en los bolsillos de Alan y en los tuyos propios a ver si encuentras tiritas, vendas, o cualquier cosa con la que le puedas ayudar, pero no encuentras nada. Es entonces cuando escuchas pasos a tu espalda.
-Luke, he traído esto.
Es la voz de Penguinmon. Aunque se le nota cansado, parece estar bastante mejor, y trae consigo unas cuantas hojas de gran tamaño y unas lianas.
-Has hecho bien yendo a cuidar de Alan, Luke. Estoy muy orgulloso –te felicita Penguinmon con una sonrisa-. Ten, enróllale el torso con estas hojas y átalas con las lianas. No es mucho… Pero debería detener la hemorragia.
Es entonces cuando Ninjamon cae del mismo árbol al que saltó en primer lugar. Consigo trae una cantimplora llena de agua del río.
-La he hecho con la piel de un Tsunomon que me he encontrado por ahí –explica Ninjamon mientras trata de desinfectar delicadamente las heridas con el agua y vendáis a Alan. Tras darle un poco de beber a su compañero… ¡Ninjamon se pone a brillar de nuevo! En esta ocasión, retorna a su forma de Floramon-. Vaya… Debo haber gastado todas mis energías yendo tan rápido –se lamenta Floramon.
Es entonces cuando vuestros dispositivos digitales comienzan a emitir algo parecido a un tono de llamada de un teléfono móvil. Luke, cuando le echas un vistazo, ves que hay dos puntos rojos en la pantalla, no demasiado lejos de dónde os encontráis ahora mismo.
-¡Podrían ser los digimon de los que nos separamos! –salta Penguinmon-. ¡Debemos ir, rápido! ¡Antes de que cambien de ruta y se alejen de nosotros!
-No –le corta rápidamente Floramon-. Alan necesita descansar. Nos quedamos aquí.
-P-pero… Podría ser nuestra única oportunidad en mucho tiempo… -musita Penguinmon-. No creo que vayan a volver más al lugar en el que nos separamos si ahora ven que no hay nadie…
Luke, en la pantalla de tu dispositivo figura algo más que dos puntos rojos en la lejanía. Las palabras “Descarga completada. Nueva forma disponible” aparecen en el aparato nada más sacarlo.
@Asch (75%) @Adair (100%)
-P-perdón, Asch… Sé que querías que yo le derrotara... -murmura FanBeemon en bajito-. ¡P-pero no podía dejar que te quemaras…! Espero que no te enfades… m-mucho…
A pesar de sus palabras, se ríe un poco cuando le rascas la cabecita, contento. Lucemon, por su parte, se queda mirando al Koromon que va desapareciendo en la lejanía.
-Tal vez sí que debamos seguirlo, Adair –le concede a Asch-. Es probable que se dirija al Asentamiento de DemiMeramon. Y allí puede que encontremos a vuestros amigos humanos. Es lo más parecido que hay a una población por aquí cerca, así que si han caído por la zona, sus digimon les llevarán hasta allí. Oh –sonríe-, y puedes llamarme como quieras, Asch. No me disgusta.
~ Search for your own Paradise ~
Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
¿Artista?
-¡Estás exagerando! -me apresuré a decir-. Mi estrategia no era para tanto, es lo único que se me ha ocurrido y... ¡No creo que hayas sido egoísta! Sea lo que sea que guardes, se nota que es importante para ti, y no merecía la pena que se perdiera de forma tan tonta. ¡Todos tenemos derecho a guardar posesiones personales, faltaría más!
No podía evitar preguntarme qué clase de cosas guardaría un Digimon, pero era evidente que si quisiera contármelo ya lo habría hecho. Fingí meditar un momento el asunto del nombre mientras me ponía en pie.
-Remy... Sí, claro que puedes llamarme así -asentí-. ¿Qué tipos de arte tenéis en este mundo? -pregunté con curiosidad, ya que me había sorprendido su comentario-. Yo también quiero llamarte de algún modo... ¿Qué tal Norizuna? Es por una serie que... bueno, no importa. Normalmente lo dejaré en Nori, así no será confuso incluso si digievolucionas, ¿qué te parece? Y hablando de digievolucionar...
Caminé hacia el resto del grupo tocando distraídamente la piel de Kudamon en torno a mi cuello. Prefería que estuviera allí, cubriéndome la herida de la maldita Persiamon. Había oído la mayor parte de lo que habían dicho los Tanemon. Habría sido difícil no hacerlo.
-Me gusta la idea de atacar a Halsemon desprevenido -admití-. Creo que deberíamos hacerlo, aunque sin duda será muy fuerte si ha podido someter la aldea -(aunque quizá no tanto, pensé, si todos los ciudadanos eran cebollitas)-. Kudamon puede digievolucionar y plantarle cara, aunque es una pena que tenga que luchar en solitario... Necesitaremos saber todo lo posible sobre la aldea. ¿Dónde vive él? ¿Cómo podemos acercarnos en secreto? ¿Hay algún lugar en el que acorralarle? -giré levemente la cabeza y hablé en tono más bajo a Kudamon-. Aunque quizá me estoy adelantando a los acontecimientos -comenté, inseguro-. ¿Sabes cómo digievolucionar? En el dispositivo habla de una nueva forma, pero... -sostuve el aparato en mi mano izquierda- ...la verdad es que no entiendo del todo esta cosa. ¿Crees que podrás hacerlo?
-¡Estás exagerando! -me apresuré a decir-. Mi estrategia no era para tanto, es lo único que se me ha ocurrido y... ¡No creo que hayas sido egoísta! Sea lo que sea que guardes, se nota que es importante para ti, y no merecía la pena que se perdiera de forma tan tonta. ¡Todos tenemos derecho a guardar posesiones personales, faltaría más!
No podía evitar preguntarme qué clase de cosas guardaría un Digimon, pero era evidente que si quisiera contármelo ya lo habría hecho. Fingí meditar un momento el asunto del nombre mientras me ponía en pie.
-Remy... Sí, claro que puedes llamarme así -asentí-. ¿Qué tipos de arte tenéis en este mundo? -pregunté con curiosidad, ya que me había sorprendido su comentario-. Yo también quiero llamarte de algún modo... ¿Qué tal Norizuna? Es por una serie que... bueno, no importa. Normalmente lo dejaré en Nori, así no será confuso incluso si digievolucionas, ¿qué te parece? Y hablando de digievolucionar...
Caminé hacia el resto del grupo tocando distraídamente la piel de Kudamon en torno a mi cuello. Prefería que estuviera allí, cubriéndome la herida de la maldita Persiamon. Había oído la mayor parte de lo que habían dicho los Tanemon. Habría sido difícil no hacerlo.
-Me gusta la idea de atacar a Halsemon desprevenido -admití-. Creo que deberíamos hacerlo, aunque sin duda será muy fuerte si ha podido someter la aldea -(aunque quizá no tanto, pensé, si todos los ciudadanos eran cebollitas)-. Kudamon puede digievolucionar y plantarle cara, aunque es una pena que tenga que luchar en solitario... Necesitaremos saber todo lo posible sobre la aldea. ¿Dónde vive él? ¿Cómo podemos acercarnos en secreto? ¿Hay algún lugar en el que acorralarle? -giré levemente la cabeza y hablé en tono más bajo a Kudamon-. Aunque quizá me estoy adelantando a los acontecimientos -comenté, inseguro-. ¿Sabes cómo digievolucionar? En el dispositivo habla de una nueva forma, pero... -sostuve el aparato en mi mano izquierda- ...la verdad es que no entiendo del todo esta cosa. ¿Crees que podrás hacerlo?
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Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
Ninjamon se fue a por agua y Penguinmon trajo hojas y lianas. Estaba cansado, pero parecía mejor, qué alivio. Al poco Ninjamon trajo agua y nos pusimos a curarle las heridas y darle un poco de beber, y entonces tapárselas.
Entonces, los dispositivos empezaron a vibrar y vi unas lucecitas. Y también se había descargado algo de una nueva forma. ¿Sería una digievolución? Ahora que estamos tranquilos podría mirar a ver qué pasa, pero algo me decía que me esperase. De todas maneras, teníamos en frente el problema de las luces, que podrían ser los demás, que se perdieron.
—Vale, si nos tenemos que quedar aqui por Alan que está mal, podríamos separarnos. Pero claro, si os viene a atacar alguien mientras no estamos podemos liarla... Uhm... Supongo que no hay manera de solucionar la falta de comunicación a través de los dispositivos digitales, así que quiero probar algo. ¡Ah, casi me olvido! —del bolsillo saco el otro paquete de galletas—. Ten Penguinmon, te lo prometí. Rellenad el estómago, que tenéis hambre.
Entonces me separé de Alan un poco hasta que viese en mi dispositivo una luz que indicase que era yo, y entonces empezaría a correr en círculos alrededor de Alan. Cualquiera con dos dedos de frente que estuviese mirando el dispositivo, si es que les había reaccionado también, sabría que es una señal para que viniesen. Creo.
Entonces, los dispositivos empezaron a vibrar y vi unas lucecitas. Y también se había descargado algo de una nueva forma. ¿Sería una digievolución? Ahora que estamos tranquilos podría mirar a ver qué pasa, pero algo me decía que me esperase. De todas maneras, teníamos en frente el problema de las luces, que podrían ser los demás, que se perdieron.
—Vale, si nos tenemos que quedar aqui por Alan que está mal, podríamos separarnos. Pero claro, si os viene a atacar alguien mientras no estamos podemos liarla... Uhm... Supongo que no hay manera de solucionar la falta de comunicación a través de los dispositivos digitales, así que quiero probar algo. ¡Ah, casi me olvido! —del bolsillo saco el otro paquete de galletas—. Ten Penguinmon, te lo prometí. Rellenad el estómago, que tenéis hambre.
Entonces me separé de Alan un poco hasta que viese en mi dispositivo una luz que indicase que era yo, y entonces empezaría a correr en círculos alrededor de Alan. Cualquiera con dos dedos de frente que estuviese mirando el dispositivo, si es que les había reaccionado también, sabría que es una señal para que viniesen. Creo.
25 Loudpuntos ______________________ 10.000.000 Hollow Points
Pin de la superación personal de Flan
300 Sodipuntos
Infinitos Flanpoints (con captura)