Digimon Chapter 00

[Loud]

- Ahora mismo solo quiero dormir...

No dije nada mas, me quede esperando, por si el resto tambien iba a dormir, mañana ya me preocuparia.

[Malfuin]

@Senetyl[ I ], Lira[III]:

-Estoy bien -dijo Mafy, que temblaba y parecía dudar entre agarrarse el hombro o no tocárselo-. Ha sido como tocar un horno encendido, ¡duele!

-¡Allá vamos! -Trydan dio un enorme salto y llegó hasta la altura del techo, desde donde atacó, atrayendo la atención-. ¡Trueno eléctrico!

-¡Disparo lacrimoso! -Lunamon aprovechó la distracción para rodar por el suelo y disparar un ataque que parecía luz líquida desde su antena, y que golpeó a los Digimon que ya estaban atacando a Trydan. El problema era que las llamas de plástico no desaparecían enseguida, rebotaban en el techo dejando quemaduras negras y caían sobre Ilargi, quien no tuvo más remedio que retroceder.

Trydan, que trataba de esquivar los ataques y avanzar saltando de pared a pared, recibió un ataque en el costado que le quemó el pelaje y le derribó. Cayó sobre el montón apilado de llamas de plástico que humeaban y se fundían entre ellas.

-¡Está bien! ¡Ahora me habéis cabreado! -gritó Trydan mientras su pelo se chamuscaba-. ¡ESTOY HARTO DE VOSOTROS!

-¡Elecmon digievoluciona en...!

-¡FlareRizamon!

De repente la temperatura aumentó varios grados en el pasillo. Trydan había cambiado completamente. Se apoyó con sus garras en las paredes para incorporarse y la pintura comenzó a derretirse a su alrededor. Una vez de pie, cogió un puñado de llamas de juguete y las miró pensativo durante un segundo. Ahora tocarlas no le ocasionaba ningún daño.

-¡NO OS DEJÉIS VUESTROS JUGUETES TIRADOS POR AHÍ! -gritó, y lanzó el puñado hacia los ToyAgumon. Los trozos de plástico llovieron sobre ellos y les quemaron. Algunos Digimon se arrodillaron en señal de rendición y otros trataron de huir. Trydan rió-. ¡Ah, ¿a dónde creéis que vais!? ¡Golpe ígneo! ¡Golpe ígneo! ¡Golpe ígneo!

Disparó bolas de fuego a las puertas, incendiándolas o destruyendo los marcos para que los Digimon de juguete no pudieran tocarlas. Algunas llamas de juguete volvieron a caer sobre él, pero resultaban inofensivas.

-Vuestros ataques de antes me han dolido mucho -comentó FlareRizamon-. Debería haceros sufrir al menos lo mismo que he sufrido yo -los ToyAgumon temblaron y Trydan soltó una carcajada burlona-. Pero se supone que debemos capturaros y llevaros arriba. Me contendré... por esta vez.

Como si le costara trabajo hacerlo, dio la espalda a los ToyAgumon y volvió con el resto. Ilargi se recuperó del sobresalto de ver al otro Digimon transformado y avanzó hacia los ToyAgumon; algunos tenían partes chamuscadas y otros parecían un poco derretidos.

-¡Muy bien! -exclamó-. ¡Si de verdad os rendís tenéis que hacer todo lo que nosotros digamos, ¿de acuerdo?!

-¡Siiiiií! -los ToyAgumon se mostraron dóciles como corderos.

[Aritriel]

Trydan se lanzó a por los otros digimon, tratando de esquivar los ataques y contraatacando también; pero no fue suficiente y algunas llamas le golpearon. Yo solté un grito ahogado, preocupada; pero él les gritó y de repente...

De repente ya no era un elecmon, sino otro digimon que parecía casi completamente hecho de fuego. Recordé que ya había ocurrido eso antes; que Trydan había evolucionado. Mientras tanto, él volvió a atacar a los Toyagumon, aunque sus ataques sólo alcanzaron las paredes y las puertas. Quise creer que lo hacía sólo para asustarles y que no se rebelasen contra nosotros. Parecía fuerte de sobra para acabar con ellos y que se comportase de esa manera tan tiránica no me hizo ninguna gracia.

-Ya vale, Trydan- nos acercamos al digimon en llamas y al principio tuve que protegerme un poco la cara por el calor-. Has ganado y nos has salvado, y está muy bien pero... no les trates así. Quiero que te defiendas y protejas, no que... te vengues. ¿Por favor?-le pedí, acercándome más, aunque no estaba segura de si tocarle un brazo o no por si me quemaba-. Ya hemos encontrado a los digimon, así que volvamos a ver al Empresario, ¿vale?-le dirigí pequeña sonrisa. Realmente estaba más preocupada que enfadada por su comportamiento.

[Drail]

Me costó entender lo que el señor Kenji no estaba explicando.

-¿Los digimon tienen moneda?

De repente me imagine una ciudad llena de tiendas con digimon como los que habíamos visto yendo de arriba para abajo. Me preguntaba qué clase de digimon nos querría comprar algo a nosotros, pero la cuestión más grande era que más había por descubrir de ese sitio.

-¿Es seguro que los demás pasen la noche fuera o creéis que tardaran poco en llegar?

[LightHelco]

—No sabéis cuanto me alegro de que Trydan este de nuestro lado —les comenté a Sen y Mafy por lo bajo tras ver como actuaba el nuevo Trydan hacia los ToyAgumon, estaba consiguiendo que me sintiera mal por devolverles el ataque.

Tras conseguir que todos los Digimon juguete se rindieran, Sen se encargó de calmar a su compañero, mientras que yo me acerqué a Ilargi para ver si se encontraba bien.

—No te han hecho daño, ¿no? —le pregunté mirándola para ver si tenía alguna herida —. Porque si es así, voy a necesitar que me ayudes a llevar a los ToyAgumon —me giré hacia los dinosaurios de juguete y les hablé lo mas tranquilamente que pude —. Muy bien, ToyAgumon, necesitamos que nos acompañéis hasta el Empresario, aunque sería bueno saber si hay otro camino para subir…la barandilla no es que sea muy estable.

[Malfuin]

@Rudy[ I ], Suzu[II ]:

-Sí, algunos Digimon usan los Bits como moneda... En realidad son sólo eso, bits -sonrió Kenji mirando a Suzu-. En cuanto a los demás, supongo que si les entra sueño mientras están fuera buscarán un sitio donde dormir... Aunque tampoco les hemos enviado muy lejos.

-Buenas noches -dijo DoKunemon, acurrucándose en un asiento junto a Rudy. Nezu ya se había dormido con Gizamon encima, que parecía calmado y sus heridas mejoraban casi a simple vista.

No había nada más que hacer, así que Suzu también durmió mientras Kenji seguía enfrascado en su trabajo.


@Senetyl[ I ], Lira[III]:

-¿Qué ocurre? -preguntó Trydan, molesto-. ¡No les he atacado directamente! ¡Sólo les he devuelto sus propios ataques! Yo...

De repente las llamas de su cuerpo fueron apagándose y su tamaño disminuyó hasta que sólo quedó el casco, que brilló y se convirtió en Elecmon. Al menos las quemaduras de su pelo habían desaparecido.

-Esto es... Es porque he usado mucha energía -Trydan saltó sobre la barandilla y comenzó a subir-. ¡Voy a adelantarme!

-No penséis en hacer ninguna tontería -advirtió Ilargi a los ToyAgumon-. Yo también puedo digievolucionar. Espero -murmuró para sí misma.

-¿La traigo? -preguntó uno de los ToyAgumon, indeciso, a sus compañeros.

-Tráela, no tenemos opción.

Los ToyAgumon echaron abajo una de las puertas quemadas, que ya se había apagado. Sacaron entre varios una larga escalera de mano, y la colocaron en uno de los escasos trozos estables de los peldaños. La apoyaron en el suelo de la planta superior. Todavía había que subir un trozo por la barandilla para llegar a la escalera de mano, pero ahora resultaba mucho más sencillo. Os preparasteis para subir.

-¡Dracomon! -exclamó Mafy, corriendo de repente por el pasillo roto que iba hacia el ascensor. Se detuvo antes de llegar al borde, se acercó con cuidado y miró hacia abajo-. No está. Estoy seguro de haberle visto. No tendría que haberle dejado atrás... Pensé que no querría separarse de mí y lograría reunir valor para seguirnos; y supongo que es lo que está haciendo, pero... seguro que está muy enfadado conmigo.

Suspiró y se dirigió a la escalera de mano.

En el ascensor tuvisteis que subir en tres tandas, cada uno de vosotros acompañando a unos cuantos ToyAgumon. Una vez arriba, los ToyAgumon eran recibidos por los KoKuwamon, que los rodeaban y los acompañaban hacia la puerta que iba al tejado. Cuando estuvisteis todos, Thunderballmon se dirigió a vosotros.

-Habéis llevado a cabo vuestra tarea de forma admirable -dijo el Empresario-. Los Kokuwamon siempre decían que habían registrado esas plantas, pero evidentemente no lo hacían muy a fondo. En fin, dadme unos momentos y cumpliré vuestras peticiones... Ahora tengo que dirigir el final de mi proyecto. Mirad.

Se encendió una pantalla y visteis imágenes del tejado. Los ToyAgumon estaban entrando en una caja de cristal. Al lado había una cosa enorme tapada por una lona. Cuando estuvieron todos dentro, los Kokuwamon cerraron la caja de cristal. De repente hubo un destello en el interior de la caja y todos los ToyAgumon se desmontaron. Sus piezas cayeron al suelo, rodando y mezclándose.

-Tranquilos, no están muertos -comentó el Empresario con tranquilidad-. Creemos que ni siquiera les duele. Conseguimos desarrollar este proceso gracias a los datos contenidos en el código del piso 18. Y ahora observad mi gran obra.

Los Kokuwamon retiraron la lona y encendieron focos para mostrar una versión gigantesca de ToyAgumon, hecha con miles de piezas de ToyAgumon. Le faltaba el brazo, pero por lo demás parecía terminado. Su columna vertebral era una gran pieza metálica con púas, y como las piezas eran tamaño ToyAgumon su cuerpo era bastante más complejo.

-¡ToyGreymon! -exclamó el Empresario-. ¡Enseguida estarás despierto! ¡Espera un poco más!

Los Kokuwamon estaban montando el brazo que faltaba con las piezas de los ToyAgumon que habíais traído.

-Esto... Esto no puede... -Mafy apuntó a la pantalla con su RH-. ToyGreymon no existe... Sólo me salen los datos de ToyAgumon. ¡Sólo son un montón de ToyAgumon pegados unos a otros!

-Así es -confirmó Thunderballmon-. Pero será mucho más poderoso. Y estará gobernado por una sola mente. Enseguida estará listo.

[Aritriel]

Trydan parecía enfadado por mi reacción y yo... estaba confusa.

-Lo siento Trydan-me disculpé-. Es que... Sé que intentaste no hacerles daño y te lo agradezco pero lo que hiciste después... Yo no estoy acostumbrada a luchar, no sé hasta qué punto las cosas están bien o mal. Creo que tienes razón, pero también creo que te has pasado un poco. No sé muy bien qué decirte, la verdad...-reconocí-. Perdóname-me disculpé otra vez.

Trydan recuperó su forma previa (por lo visto había gastado mucha energía) y suspiré para mi ante el comentario de Lira. Lo único que quería era que Trydan no perdiera el control si volvíamos a luchar. Sería muy peligroso. Los digimon de juguete trajeron una escalera y, para mi horror, volvimos a subir hasta el piso del Empresario en ascensor. En fin, tampoco iba a poder quedarme allí para siempre.

Al llegar allí este nos felicitó y contemplamos el experimento con los Toyagumon. A mi... me horrorizó. No me extrañaba que esos pobres digimon hubieran intentado huir y nos hubieran atacado. Me sentía mal por ellos, y empecé a plantearme si de verdad estábamos tan desesperados por conseguir electricidad como para permitir algo así. No sabía cómo reaccionar y me quedé callada, mirando esa cosa hecha con distintos Toyagumon.

[LightHelco]

—Eso es, de uno en uno y con cuidado de no caeros.

Tras que todos subiesemos gracias a la escalera que trajeron los ToyAgumon, volvimos a donde el Empresario para entregarle los pequeños dinosaurios. Unos cuantos Kokawumon se encargaron de llevarlos a lo que parecía ser una caja de cristal en donde los metieron para después activar una extraña maquina.

Por un momento me quedé en shock al ver como los Digimon juguete se desmontaban en piezas, pero me tranquilicé un poco cuando el Empresario dijo que no les dolía, pero pronto volví a asustarme cuando las piezas se unieron para formar una versión más grande y terrorífica de los ToyAgumon. Ahora entendía porque los juguetes habían estado escondiéndose, cuanto más miraba a ese monstruo y más hablaba el Empresario, más horrible me parecía.

—No es justo… —murmuré segundos antes de girarme hacia el Digimon eléctrico —. No es justo para los ToyAgumon esto. Pensaba que se escondían por que no les gustaba trabajar o porque querían jugar, porque…bueno, son juguetes —sonaba algo tonto eso, pero a mí me había parecido lógico —, pero esto es otra cosa, si no quieren hacerlo no podéis obligarles. Como ha dicho mi compañero ese montón de piezas no es un Digimon real y eso que dices que solo uno piensa podría volverse una locura, porque seguramente las ideas de los ToyAgumon sean diferentes y le podría volver loco.

Me coloqué al lado de Ilargi, no iba a dejar que les hicieran eso a los ToyAgumon.

—Sé que os dijimos que os ayudaríamos, pero esto no me parece que este bien. Si ellos no quieren hacer esto no podéis obligarles, imagínate que nosotros te hubiésemos obligado a darnos el código y venir con nosotros para ser nuestra batería personal —estaba empezando a notar que me temblaba un poco el cuerpo, estaba desafiando a un Digimon que seguramente podría freírme en un visto y no visto — ¿No te habría gustado verdad? Pues a ellos tampoco les gusta, así que para tu proyecto ahora mismo.

“Ilargi por favor, dime que es verdad que puedes evolucionar”

[Crow]

-¡Confiaba en que Falcomon creería que saldría mal y pensaría en otra cosa! ¡Así que sí te he engañado!

Fue un shock bastante grande ver a Guilmon convertirse en un dinosaurio enorme, pero eso nos daba la ventaja y podía usarlo para terminar el conflicto de una vez. Pero antes corrí a socorrer a Falcomon y ayudarle a levantarse.
-Rindete, Ogremon. Para mi puedes odiarte a ti mismo todo lo que quieras. Puedes pensar que es el final y estas en tu derecho. ¡Pero Goblimon es el unico amigo que te queda y esta dispuesto a seguir a tu lado pese al peligro que representa rondar por aqui! ¡Y TU TE ATREVES A ATACARLE! ¿¡ASÍ PRETENDES TERMINAR TU VIDA!? ¿¡SOLO!? ¿¡TRISTE!? Es evidente que alguien es el responsable de lo que esta ocurriendo aquí y en otros sitios! ¿¡NO QUIERES VENGARTE DE EL QUE TE HA ARRUINADO LA VIDA!?

[SleepyKoumi]

Todo pasó algo... rápido para mi gusto. A pesar de que normalmente me gustaban ese tipo de situaciones (meterse en líos y salir ileso de ellos no es algo que pueda hacer cualquiera ¿Cómo no tener entonces ese sentimiento de orgullo hacia ti mismo cuando pasa algo así?), en ese momento no me hizo gracia captar toda la situación como es debido.

Primero, Guil me hizo caso y junto con el de segundo lograron apartar a tiempo al tontaina de goblimon ¿A quién se le ocurría provocar a un borracho? Luego Falcomon hizo no sé qué cosa e hirió a ogremon aunque no pareció importarle mucho. Entonces llegó mi momento "protagonista", logré alcanzar el otro lado de la sala, le lancé la botella y... bueno, le grité, creo que hasta ahí no nos hemos perdido ¿no?

¡Pues ahora viene la "fabulosa" continuación!

Adoraba mi puntería, le había dado en la cabeza y se había mojado. Ese grito de "Cállate" me trajo muuuy malos recuerdos y me dejó en el sitio, con miedo, pero no por él... Por favor ¡Si era un ogro amorfo de color verde radiactivo! Estaba asustada por los recuerdos, recuerdos que creo que ya comenté: un padre alcóholico, una niña indefensa (yo), golpes... Lo típico que se ve en las películas siempre que un niño es maltratado, a veces creo que lo sacan de la realidad para que la gente le de menos importancia porque "eso solo pasa en las películas".

Volviendo al tema, me asusté tanto que, al retroceder, tropecé y me caí, quedando sentada en el suelo mientras intentaba cubrirme y escuchaba que alguien me llamaba. Creo que incluso llamé a mi hermano mayor, que no veía desde hacía años. Me tapé la cabeza con las manos cuando, un poco después, descubrí que nada me había golpeado. Con la esperanza de que hubiese aparecido mi hermano, alcé la cabeza y me encontré a un dinosaurio gigante que me decía que no volviese a hacer eso. Bufé. En circunstancias normales habría alabado la transformación y eso pero, en ese momento, no estaba de humor para sermones.

Recuperé mi temple habitual (o al menos, logré esconder mejor mi alteración) y me levanté mientras me sacudía un poco y escuchaba el emotivo discursito del mayor. Puse los ojos en blanco y crucé los brazos, mirándole con desdén. Demasiadas películas había visto ese chaval... Cogí mi bate y lo puse en mi hombro mientras caminaba al lado de Guil a quien le di un par de palmadas en la pata a modo de agradecimiento. Me había salvado, creo que se empieza a merecer algo de mi respeto y además, de alguna forma me ha recordado a mi hermano. Sonreí imperceptiblemente al recordarle, quizás el dinosaurio no debería ser tan merecedor de mi desconfianza.

-Si yo quisiese vengarme de quien me ha arruinado la vida me quedaría sin familia -comenté en voz muy baja, sólo para mí, mientras miraba a mi atacante- Tú, el desgraciado borracho, me da igual lo que hagas o dejes de hacer pero si sigues siendo un idiota derrotista te golpearé -le dije seria, molesto por esa actitud suya- Dices que no puedes irte, pero hemos venido a por ti, dices que tu vida no tiene sentido y sigues aquí... -bufé de nuevo, aún inquieta- dime, ¿Qué diablos haces aquí, vivo, si no tienes nada que hacer? -le pregunté seria- Si de verdad no vales para nada, muere, pero si sigues vivo es que de alguna manera vales para algo ¿no? -Pregunté mientras me escondía un poco tras mi compañero digimon por si se enfadaba- Hazme el favor de hacer de tu vida algo útil y deja de quejarte - Miré entonces al bajito como si estuviese amenazándole - Y tú... ¿Cómo te llamas? -pregunté después, realmente me daba igual, pero me estaba empezando a cansar el llamarle bajito o cosas así.