Vamos a jugar a... -Foro-

@Alice (50%) @Tris (25%)

Las orejas de Gazimon se quedan completamente tiesas cuando le riñes, Alice. Ahora se muestra un poco reticente, y cuando le tiendes el chupa chups con una sonrisa, se queda mirándolo unos segundos, como si fuera una broma cruel. Lentamente, lo coge y, sin dejar de mirarte, le pega un lametón.

-¡¡Qué bueno está!! -exclama de pronto, contemplando el caramelo como si fuera un regalo caído del cielo. Al cabo de un rato chupándolo efusivamente, te mira, y sus orejas se doblan hacia abajo. Parece avergonzado-. G-g-gracias... Alice...

Tris, al trastear con tu dispositivo digital, sólo descubres una lista en la que figuran los movimientos de tu digimon, así como este aviso "Descargando Datos - 25% restante". Alice, el tuyo se pone a vibrar y también te indica que está descargando datos, sólo que en tu caso continua con "50% restante".

-... No te preocupes, Tris. Encontraremos algo de comer por el camino, tal vez algún pez o fruta -bosteza Labramon al cabo de un rato.

Todos comenzáis a andar río arriba.

-Llevamos tres meses buscándoos, desde apenas nacer -os explica Labramon mientras Gazimon sigue lamiendo su preciado chupa chups-. Sabíamos que teníamos que encontraros desde ese mismo momento. No nos lo contó nadie, simplemente sabíamos que nuestros compañeros aparecerían en algún lugar del Mundo Digital.

-En la Ciudad de los Tanemon es donde reside la mayor parte de ejército de Persiamon -continua Gazimon-. Ella y sus tropas han asediado esta parte de nuestro mundo. Esta zona es relativamente tranquila, pero esperad a que...

-¡Nana de Burbujas!

De pronto, Labramon pega un salto y desvía con sus patas una burbuja que cae al suelo tan pesadamente como una roca. En la orilla del río podéis ver a una especie de renacuajo enorme que os mira con una sonrisa maliciosa.

-¡Eh, Gabumon! ¡Tenemos a un par de cándidas a las que abordar!-exclama Otamamon.

Entonces os dais cuenta de que detrás de vosotros también hay un Digimon, una especie de reptil cubierto por una capa de piel de otro animal. Gabumon os enseña los dientes al mismo tiempo que muestra sus afiladas garras. Labramon les gruñe a ambos, mientras que Gazimon se esconde tras tu pierna, Alice.

-¿Hay que luchar? No me apete... No... ¡No sé pelear! -exclama el digimon conejo-. ¡Alice! ¡Tú eres más fuerte que ellos, sin duda! ¡Pelea tú en mi lugar!

-No seas estúpido. A mí también me da palo combatir ahora, pero un digimon siempre será más poderoso que cualquier humano. Debemos proteger a nuestras compañeras -interviene Labramon-. Utilizad los dispositivos digitales para darnos órdenes, chicas.

@Jeremy (75%) @Matías (25%)

Kudamon asiente con energía ante tu plan, Jeremy, y flota en dirección a vuestros enemigos. Su pendiente comienza a brillar, cegándoos a todos.

-¡¡Mini Trueno!! -exclama Tentomon, a pesar de no poder ver nada.

Según la luz se va disipando, una quemadura en el suelo indica que el ataque de Tentomon ha fallado. Kudamon se lanza a por Goblimon con su bala dorada, mientras que Tentomon utiliza Doble Garra contra Monmon. Aunque no conseguís desarmarles, sí que les pilláis desprevenidos tras el haz de luz y ambos retroceden, doloridos.

-¡Mazo Goblin!
-¡Disparo Explosivo!

Goblimon le acierta a Kudamon en la cara, y éste es lanzado en el aire unos cuantos metros dando vueltas. Monmon, por su parte, saca su enorme tirachinas y dispara una bomba explosiva a Tentomon que le acierta en una de las alas y hace que el insecto tenga que aterrizar.

-Uff... ¡Voy a desgarrarte esa endiablada cara de mono! -grita Tentomon, muy enfadado.

@Luke (75%) @Alan (50%)

Alan, Palmon te echa una mirada asesina y de sus manos comienzan a brotar largos látigos.

-¿Te atreves a amenazarme? ¿Algo tan FEO y HORRIBLE como tú osa amenazar a la flor más BELLA de todo el Bosque Frondoso? ¡¡Hiedra Venenosa!!

El ataque del digimon planta atrapa a Floramon, que también parecía estar esperando una rendición por parte de sus dos adversarios. Floramon comienza a chillar debido a la presión que está ejerciendo Palmon. Kunemon se lanza del árbol para atacar a Penguinmon en picado con su cola, pero Penguinmon lo esquiva y le pega una bofetada en la cabeza a la oruga. Eso ha debido ser su "Golpe Sorpresa".

@Asch (50%) @Adair (50%)

FanBeemon asiente ante tus órdenes dócilmente, Asch, y alza el vuelo por encima de las cabezas de vuestros enemigos. Lanza unos pocos aguijones, pero Coronamon envuelve su cuerpo en llamas y los intercepta todos con sus puños. Entonces, pega un salto, agarra a FanBeemon de la cabeza y lo estampa contra el suelo. Asch, tus piedras no parecen estar teniendo ningún efecto en Coronamon o Agumon, que las ignoran como si fueran moscas.

Lucemon, por su parte, extiende ambos brazos y una pequeña réplica del sistema solar aparece frente a sus palmas. Con un par de gestos, el sistema planetario toma forma de cruz y es lanzado en dirección a vuestros enemigos. Aunque la explosión no es tan grande como esperabas, Adair, sí que hiere tanto a Coronamon como Agumon. Éste último sale mejor parado que el primero y sale corriendo hacia Lucemon, furioso, con sus garras imbuidas en fuego. Parece que va a atacar de un momento a otro.

- ¡Luego no llores por lo que ocurra!

Voy a correr y darle una patada en toda la cara, tendra que elegir entre agarrar a Floramon o agarrarme a mi y no podra con los dos.

- Has dejado de ser bella en cuanto nos has atacado, lo siento pero ahora mismo, ¡Floramon es la mas bella de las dos! ¡A por ella Floramon!

Las amenazas que Alan había hecho no habían surtido efecto. Normal, son bichos feos pensando que son guapos, no le iban a hacer caso de todas maneras. Suerte que había echado un vistazo a los ataques y... ¡Penguinmon ataca con Golpe sorpresa! Guay, gran sincronización, somos los mejores.

Pero claro, Alan también se lanzaba contra el Palmon. Madre mia, dos frentes abiertos, pero no pasa nada, nosotros podemos. Primero acabamos con el Kudamon y luego vamos a ayudar a Alan. Y si tiene problemas, tendré que ir yo, supongo.

—¡Penguinmon! ¡Usa el Bofetón eterno ahora que hemos dado el primer golpe! ¡El factor sorpresa es clave para poder seguir con un buen golpe en cadena! Cuando acabemos con esto, ¡más galletas aseguradas!

—¡Ponle un poco de ganas al menos! No te dejes golpear tan facilmente, ¿acaso no eres un insecto? Deberías ser más escurridizo al menos que esto.

Entonces recordé las gafas que guardaba en la chaqueta, quizás podrían proteger la vista de Tentomon de la luz que provocaba Kudamon y darnos ventaja.

—Oye, pruébate esto —dije lanzándole las gafas —. Con esto la luz no debería hacerte fallar más, ¿verdad? Aléjate para que no vuelvan a acertarte y continúa atacando con Mini Trueno.

Si ninguno de los enemigos tenía la capacidad para protegerse del ataque cegador, serían un blanco fácil para los ataques de Tentomon. Esta vez lo mantendría a una distancia moderada, con el ala dañada su movimiento estaría reducido y los enemigos podrían golpearle con más facilidad si se acercara.

-¡KUDAMON!

Lo habíamos hecho mal. Casi me dio un ataque cuando vi el porrazo que se llevaba el Digimon y la forma en que salía volando. Y ahora que sabían que pretendíamos desarmarlos, ya no podríamos hacerlo. Todo había salido mal por mi culpa... habría sido mejor que no usáramos el destello...

Entonces vi que el otro chico se sacaba unas gafas del bolsillo y se las daba a Tentomon.

-¡Gran idea, Mat! -dije, sorprendido, y retrocedí junto a Kudamon-. Bien, ahora ciégalos y deja que Tentomon ataque al mono. Cuando le haya dado, dale tú también... ¡mejor acabar con ellos de uno en uno! Mantente alejado del trasgo, eres más rápido que él. ¡No dejes que vuelvan a golpearte!

-¡Fanbeemon! ¡Mierda, lo siento!No... no les hago absolutamente nada! Para lo pequeños que son, son durísimos, maldita sea! Espera... -Agumon le dio la espalda a Fanbeemon para atacar a Lucemon- ¡Gear Sting al naranja, rápido!

El ataque de Lucemon alcanzó a ambos digimon, pero uno de ellos se lanzó a por nosotros. Pulsé los botones del dispositivo con rapidez mientras le ordenaba a lucemon que atacara con los Pies Divinos. A ver qué se suponía que hacía eso.

Visto que Labramon no estaba interesado en el chupa chups y tampoco sabía muy bien como podía afectarle, le quité el envoltorio al según caramelo y lo empecé a comer yo misma. Reí al ver como Gazimon se volvía mucho más manso tras que probar el dulce e incluso doblaba las orejas dejando ver que estaba bastante avergonzado por los murmullos de antes.

—No tienes que agradecérmelo, después de todo eres como mi Tamagochi, ¿no? Te tengo que ir alimentando… aunque espero no tener que limpiarte la caca —hice una pequeña mueca de asco al imaginarme aquello, una cosa era darle a un botón en un consolita, otra era tener que hacerlo en la realidad —. Hablando de Tamagochis, esto parece que ha reaccionado.

Tras que el dispositivo vibrase, pude ver como en la pantalla había aparecido la frase “Descargando Datos – 50% restante”, lo mismo parecía haber pasado con Tris, aunque a ella le faltaba un porcentaje mayor ¿qué narices necesitaba ese cacharro para estar descargando cosas? ¿Y cómo las descargaba en medio de la nada?

No tuve mucho tiempo para ver qué demonios era la descarga, ya que tan pronto como quisimos darnos cuenta estábamos siendo atacados por dos Digimon con forma de renacuajo y… ¿lagarto-lobo-unicornio? El aspecto era lo de menos, lo que importaba es que querían abordarnos ¡y eso que no teníamos barco!

—Se nota que no habéis visto muchos humanos, Labramon —le solté colocándome en posición defensiva pocos segundos después de que Gazimon se agarrara a mis piernas —. Ya pueden lanzar armas nucleares, que pienso mandarlos volando de un puñetazo a Dublin —sonriendo me encaré al Digimon con la piel de mamífero y dandole un toque a mi compañero con la pierna intenté llamar su atención —. Eh, Bunnymon, si vas a ser mi compañero de primeras vas a tener que aprender a no dejar ver que tienes miedo. No me importa si eres un cobarde o demasiado débil para levantar un palmo del suelo, lo que no quiero es que le digas al enemigo que no puedes con él. Si ven que eres débil te aplastarán y lo último que me apetece es ver cómo te convierten en tortilla de conejo.

Preparándome para luchar, observé un poco el aspecto del Digimon de la piel e intenté fijarme en cuáles serían sus puntos fuertes. Este contaba con buenas garras, colmillos y un puntiagudo cuerno en la cabeza que no quería tener que cruzarme, por lo que lo mejor que podía hacer era intentar correr hacia su espalda y agarrarle les brazos para que no pudiese hacer nada.

—Bunnymon, si no quieres luchar no lo hagas. Ya te protejo yo en esta ronda.

@Jeremy (75%) @Matías (25%)

Kudamon agita un poco la cabeza, aturdido, pero parece que no ha sufrido grandes daños. Te mira y parece entender tus órdenes. Su pendiente comienza a brillar con un tenue resplandor, y...

-¡Yo no soy escurridizo! ¡Soy una máquina de matar! ¡Voy de frente, como toca! -te grita en la oreja Tentomon mientras se pone las gafas, Matías-. ¡Mini Trueno! ¡Mini Trueno! ¡MINI TRUENO!

Tentomon comienza a atacar a diestro y siniestro antes de que Kudamon pueda utilizar Zekkoushou. El zorro fantasmal se le queda mirando unos segundos, confundido, sin saber muy bien si debería hacer lo mismo que le habían instruido antes de que Tentomon se volviera loco. Al final, utiliza su brillante ataque, pero el resplandor es mucho menor, tal vez debido a su reticencia. Como resultado, cuando la visibilidad vuelve a ser normal, Monmon sigue en pie, aunque gravemente dañado.

-¡Me las pagarás...!

Monmon prepara una bola de energía en su tirachinas y se prepara para lanzársela a Tentomon. Pero entonces, Kudamon se lanza a por el digimon primate y le golpea con su bala, desarmándole. El tirachinas tan lejos que ninguno de los presentes puede verlo.

-He... ¡He hecho lo que me has dicho, Jeremy! -exclama Kudamon-. ¡Incluso lo que me dijiste que hiciera en el plan anterior!

Con lo distraído que está, a Kudamon no le da tiempo de salir volando. Monmon le coge de la cabeza y lo lanza en dirección a Goblimon, que "batea" a Kudamon como si fuera una pelota. El compañero de Jeremy se estrella contra Tentomon, tirándolos a los dos al suelo.

-¡Bomba Goblin!

Una bola de fuego se forma en la mano libre de Goblimon, que la lanza en dirección a vuestros digimon...

@Alice (75%) @Tris (25%)

-¡Yo no tengo ningún miedo! -se queja tu compañero, separándose de tu pierna-. De hecho, puedo acabar con este digimon de tres al cuarto en menos que canta un ga... Un ga...

A Gazimon se le traba la lengua tras dar un par de pasos en dirección a Gabumon, ya que éste tiene preparadas sus garras, y está enseñando los dientes de una manera muy macabra. Gazimon se queda unos segundos en silencio hasta que murmura:

-O-oye, ¿y si te unes a tu amigo Otamamon y la tomas con la humana y su perro? No nos caen bien, de todos modos... -y añade, en voz tan baja que no puedes escucharlo, Alice-. O al menos déjame ir a mi y quédate con la chica esta... Tampoco es que me guste dema...

Los imperceptibles susurros de Gazimon son interrumpidos cuando cargas directa contra Gabumon, Alice. Gazimon se queda sin habla, pero cuando pronuncias esas palabras, su expresión cambia. Tratas de sorprender a Gabumon, rodearle hasta su espalda y sujetarle por los brazos, pero el digimon se da cuenta de lo que planeas y trata de clavarte el cuerno, aunque falla.

-¡Alice, por favor, no lo hagas! -grita entonces Gazimon-. ¡Es... es peligroso! Déjame... Déjame... -sus palabras van bajando en volumen hasta que ya no puedes oirlas-... ¿a mí...?

Gazimon no se mueve, y Gabumon aprovecha para atacarte con sus garras. El primer ataque te araña un costado y te hace sangrar. Entonces, te lanza un segundo zarpazo, y este te dará directamente en la cara si no haces nada...

@Luke (75%) @Alan (75%)

Luke, Penguinmon empieza a darle golpe tras golpe a Kudamon ahora que lo tiene acorralado tras aturdirlo. El pobre digimon insecto apenas puede reaccionar, y ha sufrido muchos daños cuando por fin consigue zafarse y lanzar una telaraña hecha de hilo eléctrico a Penguinmon. Tu compañero comienza a tener espasmos, y puedes ver el dolor que está sufriendo por la expresión de su cara.

Alan, te lanzas a por Palmon sin precaución alguna, y le propinas una patada una cabeza que no se esperaba para nada. Palmon suelta a Floramon y se cae, pero tú caes justo encima de él.

-Mi... pelo... -murmura Palmon, tocándose la flor en una cabeza con una mano. Parece que, con el golpe, has provocado que se le caiga un pétalo. La expresión triste de Palmon cambia rápidamente a una de ira-. ¡MIRA LO QUE LE HAS HECHO A MI PELO ¡TE MATARÉ!

Alan, sientes un dolor punzante en el estómago. Un dolor como nunca antes habías sentido. Palmon te ha clavado sus hiedras, y por lo poco que puedes notar aparte del increíble sufrimiento, está robándote tu energía vital. O, como eres humano, tu sangre. Floramon reacciona casi enseguida, tirándose a por Palmon, pero vuestro enemigo aparta a tu compañero con un tornado de hojas.

-¿A-Alan...? -Floramon parece desesperado-. ¡A-Alan, ¿qué hago?!

@Asch (50%) @Adair (50%)

-¡N-no pasa nada, Asch! L-lo has intentado, y eso es lo que cuenta -te asegura FanBeemon, tratando de recuperarse lo más rápido posible-. Al menos, eso es lo que me d-digo a mi mismo siempre... Je, je...

Tras esas palabras, FanBeemon ataca a Agumon tal y como le has ordenado, Asch. En esta ocasión, dos de los tres aguijones que dispara acierta en la espalda del digimon reptil, haciéndole tropezar. Cuando se levanta, se da la vuelta y le lanza una Llama Bebé a FanBeemon.

Adair, Lucemon te mira, confuso.

-A-Adair, ¿qué estás haciendo?

Coronamon aprovecha que Lucemon no está atacando para formar una bola de fuego en su frente y lanzarla a por tu compañero. El ataque acierta en el hombro del distraído Lucemon, que retrocede con un grito de dolor.

—¡Deja de hacer el tonto y compórtate, no me hagas ir a pegarte una paliza! ¡Alza el vuelo para esquivar el ataque y usa Giro Dinamo contra Goblimon! ¡No la pifies esta vez!

Tentomon no parecía dispuesto a controlarse y eso estaba dificultando nuestra batalla. Con Giro Dinamo evitaría que Monmon pudiera actuar gracias a la electricidad, pero aún no éramos capaces de echarlo de la batalla.

—Podríamos intentar quitarle el tirachinas antes de que pueda recuperarlo, de esa manera podríamos hasta usarlo nosotros. Pero uno de nosotros dos tendremos que ir a por él —sugerí.