@Felanan [PM: 3/8] [PF: 2/3]
@Edurna [PM: 3/9] [PF: 2/2]
Recuperáis la plena movilidad de vuestro cuerpo (estado alterado
trabado curado).
Cuando miráis hacia atrás para ver al gato os dais cuenta de que no está ahí.
-¿Plan? -dijo.
La voz del gato os sobresaltó. Hablaba desde delante de vosotros, entre Edurna y la puerta con la llave encajada. ¿Sería que se movía tan rápido que no alcanzabais a ver sus movimientos?
-¿Quién necesita plan teniendo la fuerza bruta, verdad?
El gato os miro con sus grandes ojos y, al ver vuestras poco halagüeñas caras, hizo una mueca de desgana.
-Una telaraña no se tiene en pie si se corta su hilo maestro -comentó-. Podéis atacar al cuerpo de la Madre, pero... ¿pensáis que es la hebra de la que pende el resto de la red?
Comenzó a caminar a vuestro lado, recorriendo el estrecho túnel en dirección contraria a vosotros, dirigiéndose a salir de allí.
-Su corazón es mucho más frágil de lo que parece. Ella sólo quiere amar -dijo, antes de que su cola desapareciese tras el resquicio de la puerta.
@Boku [PM: 5/5] [PF: 0/2]
@Sara [PM: 5/5] [PF: 1/1]
Boku comienza a trastear con las teclas con el símbolo de la flecha hacia arriba grabado. Sorprendentemente, una bonita melodía comienza a emanar del titán, aunque Boku esté tocando teclas al azar. De repente, el cañón del arma de Vegnagun comienza a retraerse hasta llegar a un punto en el que se introduce dentro de la estructura robótica. Sus brazos se repliegan, así como las patas, y la totalidad del coloso comienza a vibrar...
Mientras tanto, Sara, Yojimbo y Daigoro siguen intentando hacer palanca para levantar aquella mole. No parece que dé demasiado resultado... hasta que la melodía de Boku comienza y el robot cambia de forma. Os veis obligados a apartaros de él, ya que desde su parte inferior comienza a brotar una cantidad ingente de fuego a propulsión, y la estructura comienza a elevarse en el aire... ¿se ha convertido toda ella en un cohete?
Antes de que el arma de Vegnagun se eleve demasiado, Yojimbo le echa una mirada de circunstancias a Sara y comienza a trepar por ella para llegar arriba del todo, a donde está Boku, con Daigoro siguiéndole. Deduces que lo hace para salvar a Boku, pero algo te llama la atención, pero no tienes mucho más tiempo para pensarlo...
Cuando el improvisado cohete se ha alzado ya un poco, ves que en su base, debajo de él, hay un agujero con forma de cerradura. Tu Llave Katana reacciona sola y, apuntando hacia el agujero, sella la cerradura con un brillante rayo de luz blanca. Tu Fragmento Estelar escapa de ti, saliendo disparado hacia el cielo.
Boku ve cómo Yojimbo alcanza la plataforma del órgano para ir a su rescate, y nota también cómo su Fragmento Estelar comienza a vibrar en sus manos, de las que salta para dirigirse al cielo... pero el arma de Vegnagun sigue subiendo. Y subiendo. Y subiendo. Se ve envuelta en un haz de luz y, justo antes de cruzar la barrera del mundo, desaparece.
(PM MÁX)
Sara ve atónita cómo el colosal artilugio bélico desaparece en pleno vuelo, mientras en el estadio ocurre algo inusitado: la enorme bestia que surgía de él comienza a reducir paulatinamente su tamaño en cuanto la barrera del mundo se restaura. La inmensa fuerza gravitatorio ya no surte efecto, y en poco tiempo el monstruo acaba desapareciendo dentro del coliseo.
Una suave brisa alborota el pelo de Sara, que nota cómo la calidez de un círculo de luz que aparece a su lado repone sus fuerzas.
(PM MÁX)
Boku ha obtenido el poder del Espacio.
¡Ha aprendido el hechizo Estocada!
Ataque múltiple (x3). Se desliza hacia el enemigo por el suelo, arma por delante. Medio alcance.
Sara ha obtenido el poder del Espacio.
¡El hecizo Estocada asciende a Estocada+!
Ataque múltiple (x4). Se desliza hacia el enemigo por el suelo, arma por delante. Tiene alcance medio, y el primer golpe tiene unas altas posibilidades de realizar daños críticos.
@Boku [PM: 5/5] [PF: 1/3]
¿Dónde estás? Quién sabe. Tan sólo hay negrura a tu alrededor. No parece haber ni suelo... estás flotando en mitad de la nada. Pero... ¿qué es eso que ves? ¿Son estrellas? ¿Estás en el espacio? ¿En el intersticio entre los mundos?
Al fin recuperas la consciencia del todo y te das cuenta de que en tu pulsera de invocación ha aparecido un nuevo amuleto. Parece tener representado la imagen de Yojimbo...
¡Has obtenido Amuleto Samurái!
Permite invocar a Yojimbo, el domador espadachín, y a Daigoro, su fiel compañero.
Mientras te maldices a ti mismo por no haber encontrado un Círculo de Luz para volver al Corazón de Todos y te preguntas si es normal poder respirar fuera de los mundos, notas cómo un estruendoso sonido comienza a acercarse a ti desde la lejanía. Cuando intentas enfocar el origen del ruido, logras distinguir una nave a lo lejos, aunque es difícil adivinar su tamaño...
@Zodiark [PM: 10/10] [PF: 1/2]
@Loki [PM: 7/7] [PF: 1/1]
Decidís seguir a la figura encapuchada, con Artemición siguiéndoos.
-Ay... ¡no había visto a nadie vestido así por aquí, ku... ejem! -se preocupa- ¿Estáis seguros de que es una buena idea?
De poco sirven las palabras del moguri, pues Loki y Zodiark ya han decidido descubrir la identidad de aquella persona. Cuando llegan los tres a lo alto de la colina (con Artemición suspirando), ven cómo se halla de pie al lado de un banco que se aposta en lo alto de la ladera más lejana. Cuando os fijáis más detenidamente en ella... veis que es bastante más baja de lo que imaginabais. Para vuestra sorpresa, la silueta se da la vuelta y lleva sus manos a su capucha, retirándola de su cara y dejándola al descubierto.
Es una niña. Incluso parece más joven que Edurna, la portadora con menos edad del grupo. Debe tener unos 10 años, como mucho. Podríais haber hablado del color de su pelo o de sus ojos. O quizás de la expresión de su rostro. Pero es imposible concretar estos caracteres. El cuerpo bajo la gabardina parece estar distorsionado, como si estuviese lleno del ruido típico que se da en los aparatos electrónicos cuando sufren distorsiones. Cuando os habla, su angelical voz suena amortiguada, como a través de un teléfono.
-Todo es culpa mía.
Y entonces sucedió. Alrededor de la niña comenzaron a surgir de la nada unos extraños cubos de color negro, surcados por líneas carmesí. Aparecieron más y más, hasta que llegó un punto en el que la ocultaron de la vista, encerrándola en una masa negra y roja.
-¡Ahhh! -exclamó Artemición, asustado, aunque intentó disimular- ¡Eh... q-quién te crees que eres para llenar de cubos raros los jardines de nuestra casa!
Como veía que su actitud no era del todo convincente, invocó una gran bolsa de monedas para atacar a aquellos extraños objetos. Una vez la hubo lanzado, impactó contra los bloques extraños. Tres acabaron siendo destruidos... parece que pueden romperse con facilidad.
@Aurek [PM: 8/8] [PF: 0/2]
Comienzas a correr con el fin de alcanzar al chico pelirrojo. Sin embargo, la gente de la ciudad no parece estar por la labor de dejarte perseguirlo fácilmente. Aún así, consigues escapar al fin de la multitud y llegar a una zona que parece mucho menos transitada. Sin embargo, parece que aún así has perdido a tu objetivo...
Unas explosiones te hacen ponerte en guardia, pero al mirar atrás te das cuenta de que son fuegos artificiales que salen de un gran estadio que se ve en la lejanía, cerca de un gran castillo situado justo enfrente de una cascada, y que se alza imponente sobre la zona residencial de la ciudad, donde pareces encontrarte ahora...
- Spoiler: Mostrar
CIUDAD LEONA

No obstante, parece que te ha acertado un golpe de suerte. Cuando vuelves tu vista al camino, ves que unas huellas de zapatos que se introducen entre dos pequeñas casas.