Vamos a jugar a... -Foro-

No vi ningun arma que me llamase la atencion y tampoco me atraia la armadura, ya que eso solo me ralentizaria y con las armas que llevaba no lo veia conveniente. Me fije en el talisman que vendian y lo pedi. Quizas nos traia un poco de buena suerte.

- Creo que voy a quedarme con losa revólveres, pero ojala pudiese elegir más de una cosa, jeje. ¿Podríamos coger algo para Zodiark y Ami?

@Dy, De, Flan y Light

Una vez compradas todas las cosas, volvéis con Hoekyte.

-Ami parece que sigue un poco mal, pero si se encuentra mejor ya nos alcanzará. Y no, no podemos comprarle nada a Zodiark, ya que no sabemos sus gustos ni lo que querrá. En fin, vayamos a por él.

@Zodiark

-¡Pues no tengo ni idea, ja, ja!-responde Gaia-. Oye, ¿es eso lo que creo que es?

Veis acercarse un gran dirigible sobre vosotros...

@All

Hoekyte baja del dirigible junto al resto a por Zodiark, que se encontraba junto a Gaia y Gea.

-¡Hola! ¡Ya tenemos a todos con sus templos! Creo que es hora de que subamos al cielo, ¿no creéis? Zodiark, si quisieras unirte a nosotros...

"¡Chicos! Yo también estuve en un templo, el del agua. En fin, ya hemos estado demasiado tiempo separados, así que iré con vosotros..." Aunque no me hace gracia la idea de ser liderado por Hoekyte, voy junto a mis compañeros. "Gaia, ¿qué vas a hacer tú? Podrías venir, ¿no? Bueno, en todo caso, gracias por ayudarme todo este tiempo."

- Zodiark! Que alegria ver que estas bien y tambien tienes tu elemento. - le di una palmada en la espalda señalando a Hoekyte - Tranquilo, creo que lo hemos domado un poco. Gaia, Gea encantada de volver a veros bien, alguna noticia sobre Zy y Lly? Me gustaria decirle algunas cosas ahora a la segunda.

@All

Os subís al dirigible y sobrevoláis la isla, el mar... hasta llegar a una islita que no parece figurar en ningún mapa.
En ella podéis ver una especie de mensaje escrito bastante mal "Os apoyamos desde la tierra".
Seguís sobrevolando el mar y Hoekyte os dice que tardaréis poco en llegar a vuestro destino, que una vez llegáis, veis que es una isla artificial de hierro con una especie de cañon.

-Bien pues, entraremos aqui y nos lanzarán al cielo. Una vez ahí, solo tendremos que buscar a los dioses. ¿Preparados? ¡Pues si no es así me da igual! ¡Vamooooooooooooooooooos!

El joven impetuoso os mete dentro de una especie de cápsula que está colocada en el cañon, se mete con vosotros y os disparan al cielo...

Cuando llegáis, podéis observar que las nubes son sólidas.
Andáis durante cinco minutos para cada uno caer por las nubes salvo Flan...

@De

Estás en una sala oscura y ves una figura conocida.

-Oh, parece que mi invitado ha llegado ya, encantado de verte de nuevo, joven. Soy Laagia Daaria, y esta vez lucharé contra ti. Manejamos la vida a placer, podemos deteriorar cosas o hacerlas nacer de nuevo. Pero... ¿no es mejor hacerlas deteriorar únicamente?

Un árbol emerge del suelo y sale disparado hacia ti, pero segundos antes de imactar contra ti, éste se descompone y una fuerte peste te empieza a rodear...

@Dy

Llegas a una sala iluminada por dos velas. Parece una sala cuadrada con los dos candelabros en esquinas opuestas.
Tú estás pegado a la pared y en el centro ves un chico bastante joven, con la lengua sacada y un piercing en ella.

-¡¡¡BUENAAAAAAAAAAASSSSSSSSSSSSSSS, SOY KALEB, Y ESTARÉ ENCANTADO DE FULMINARTEEEEEE!!!

Un relámpago emerge del techo y golpe el suelo a pocos centimetros de ti...

@Zodiark

Estás de nuevo en el páramo que viste cuando llegaste a la tierra de nuevo. Ves todo destruido: edificios derruidos, gente con miembros cortados por el suelo... y un hombre bastante grande con dos alas, rodeado de fuego.

-Soy Brontus, ¿estarás a mi altura? ¡Entretenme de nuevo, muchacho, pero esta vez en serio!

Con un batir de alas rápido ves que se acerca a ti en cuestion de segundos...

Hoekyte

Lucha contra el que debería luchar Ami.

@Light

Sigues en medio del cielo, pero caiste también. Ves a lo lejos la figura de Lly, tal y como es en realidad:

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Por si no lo enseñé, pero tiene dos alas, que la segunda no me cabía, jaja

Despliega sus dos alas y las prende, como hizo la otra vez.

-Niñata engreida, ¿como osaste a conseguir mi poder? ¡Me da igual! ¡Podré conseguir derrotarte, porqué solo tienes una décima parte de todo mi poder!

Se lanza a por ti...

Spoiler: Mostrar

Usa el talismán, hazlo

@Flan

Del cielo desciende una persona que te parece sonar de algo, pero no llegas a adivinar el qué. Sin embargo, sientes mucha rabia por esa persona.

-Vaya, otra alma descarriada. Supongo que deberé presentarme de nuevo, con el mismo nombre de la otra vez. Me llamo Zy, y bueno... soy el dios supremo de este mundo. Mi poder es el alcaesto, ¿podrás hacer algo contra mi? Miremos a ver si eres capaz.



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Nota del GM:

Spoiler: Mostrar

Bien, esta será la última pelea de este rol. Según vuestras armas y poderes, os lo pondré más fácil o más dificil.
No espero que estéis contentos o no con el final de la pelea, simplemente, disfrutad de ella. Intentaré hacerlas amenas y entretenidas, a la par de dinámicas.
Cualquier crítica POSITIVA será escuchada, si es para mejorar las peleas.

Un consejo, usad todos vuestros klys, esto será difícil.

Rápidamente alzo el vuelo y retrocedo para esquivarle y, sin demora, saco los revólvers y los cargo con unas balas eléctricas e invoco a la mujer de agua para enfrentarme al tal Brontus.

Me coloco los diodos en las manos. Tal vez así podría desviar los rayos... o al menos disminuir su efecto.

-Empezemos, pues. -digo, al mismo tiempo que saco mi guadaña, lista para la batalla. Lanzo un corte horizontal contra el ser.

Con la armadura bien puesta y equipada, me vi disparado hacia los cielos antes de que querer darme cuenta. Comenzamos a caminar por un paisaje, cuanto menos, celestial... lleno de nubes, vaya. Caminamos buscando a esos dioses de los que tanto se hablaba... Miré al cielo, pensando en qué podría hacer para salir victorioso de aquella batalla final. Sin embargo, cuando bajé mi vista al frente de nuevo, descubrí que mis compañeros ya no estaban conmigo... un extraño hombre se hallaba de pie ante mí, con una mirada arrogante.

Zy escribió:-Vaya, otra alma descarriada. Supongo que deberé presentarme de nuevo, con el mismo nombre de la otra vez. Me llamo Zy, y bueno... soy el dios supremo de este mundo. Mi poder es el alcaesto, ¿podrás hacer algo contra mi? Miremos a ver si eres capaz.

-¿Zy? Tu nombre me suena de algo...
Claro que me sonaba. Mis compañeros me habían hablado de él... era el que les había hecho pensar que nuestro mundo estaba destruido, el que los engañó.
-Tú -dije, señalándole con un dedo acusador-, tú eres el que ha hecho que este mundo pierda el poco sentido que tenía.
Invoqué mi kly escudo y lo golpeé contra el suelo nuboso para crear una plataforma de tierra que pudiese usar contra aquel demonio.
-Y la existencia de alguien como tú...
Choqué mi mano libre contra el suelo que había creado para sacar a la espada Excalibur.
-¡¡TAMBIÉN CARECE DE SENTIDO!!
Barrí el suelo con la espada para hacer que la plataforma tomase la formade una ola y se dirigiese hacia Zy, con el fin de enterrarlo.

Había llegado el momento. Delante de mi tenia a ese que me lanzo la maldición. Nervioso, trague saliva.

Dark escribió:-Oh, parece que mi invitado ha llegado ya, encantado de verte de nuevo, joven. Soy Laagia Daaria, y esta vez lucharé contra ti. Manejamos la vida a placer, podemos deteriorar cosas o hacerlas nacer de nuevo. Pero... ¿no es mejor hacerlas deteriorar únicamente?

- Eso. Laagia Daaria. Ya decía yo que tu nombre era muy lioso. Estaba ansioso por volver a verte y dejar un par de cosas claras.

Saque mi kly transformándolo en el Lucero de Alba. Me puse en guardia frente mi enemigo inmóvil.

- No me hagas reír con esa pregunta, se de sobra de que va el rollo de tu poder, eso de manipular la vida, lo he vivido en mis propias carnes, y ya me esperaba que digieras algo tan retorcido como eso. Solo sois demonios que os hacéis decir dioses. No me importa si tenemos el mismo poder o no, ni siquiera se como usarlo, ¡pero voy a terminar con todo esto igualmente!

Apareció un árbol de dónde estaba él. Venia hacia mi directo. Levante el lucero y espere a que el árbol estuviera la suficientemente cerca para destrozarlo con él.

- He llegado hasta aquí para darte una paliza, ¡no voy a ponértelo tan fácil!