Re: Digimon: Data Disruption [Rol]
Publicado: 10 Oct 2015, 01:54
Corrí por los pasillos todo lo rápido que pude siguiendo los gritos de sufrimiento de mi compañero y deseando que pudiera llegar a tiempo. Al final alcancé la sala del trono donde encontré a Válor sentado en él. La imagen que mostraba el Digimon era horrible, había vuelto a su forma de Gazimon y tenía sus patas encadenadas con un montón de cables y tubos rodeándole.
—¡Válor, aguanta! —grité a la desesperada corriendo hacia él, pero antes de que pudiese hacer nada, Angewomon salió de detrás del trono impidiendo que llegara hasta mi amigo —¿Angewomon? ¿Qué es lo que estás haciendo? Tengo que ayudar a Válor inmediatamente.
Cuando la ángel habló me di cuenta de que no era la misma Digimon que tan bien nos había tratado al Gazimon y a mí. Esta me se burló de mi y tras dejar mi dispositivo, maldita ladrona, sobre el regazo de Válor me apuntó con una flecha de luz sentenciándome a morir. Apreté el puño y los dientes preparándome para esquivar la flecha y atacarla, pero pronto me di cuenta de que no iba a poder hacer nada más que recibir el ataque. Si, podía esquivar una flecha, pero Angewomon era un Digimon muchísimo más poderoso y hábil que la guarda que había derrotado, además, Válor se encontraba a dos pasos de ella, no tenía más que apuntar a la cabeza de mi compañero para obligarme a rendirme. Estaba totalmente a su merced y eso me ponía furiosa.
Pero al final no tuve otra que soltar el machete y alejarlo con el pie a la vez que levantaba los brazos a modo de rendición.
—Si si, lo que tu digas de matarme —bufé mirándola desafiante —. Pero que sepas que a la Persiamon le hará gracia del todo el que hayas matado a una pieza tan buena como yo. Ya nos lo confesó el Piratamon que tenía contratado, Persiamon quiere a los niños elegidos con vida, ¿por qué si no nos habría tirado a este mundo en donde podemos defendernos? —le dije no muy segura de si las cosas serían así, pero era cierto que podía habernos matado la primera vez que la vimos —. Y fijo que la recompensa es superior con un prisionero vivo que con un cadáver maloliente.
Esperé a lo que la Digimon tuviera que decir, pero mientras hablaba me fijé en ciertas cosas. Angewomon quizás podía haber fingido ser buena y ahora ser malvada, aunque al igual que Persiamon las veces que había podido matarme eran tantas que no podía contarlas siquiera usando los dedos de los pies. Pero claro, lo que realmente no podía fingir Angewomon era el ser una adolescente y la forma de hablar de esta ángel no lo era. Y vaya... ¿no podía la Digimon gato protagonista de la serie digievolucionar a dos cosas de aquel castillo?
—Aunque bueno, siempre puedes matarme y perder la única oportunidad de librarte de esta cría que se cree una reina y conseguir la total confianza de Persiamon... y eso sería bastante malo, ¿verdad, Nefertimon?
—¡Válor, aguanta! —grité a la desesperada corriendo hacia él, pero antes de que pudiese hacer nada, Angewomon salió de detrás del trono impidiendo que llegara hasta mi amigo —¿Angewomon? ¿Qué es lo que estás haciendo? Tengo que ayudar a Válor inmediatamente.
Cuando la ángel habló me di cuenta de que no era la misma Digimon que tan bien nos había tratado al Gazimon y a mí. Esta me se burló de mi y tras dejar mi dispositivo, maldita ladrona, sobre el regazo de Válor me apuntó con una flecha de luz sentenciándome a morir. Apreté el puño y los dientes preparándome para esquivar la flecha y atacarla, pero pronto me di cuenta de que no iba a poder hacer nada más que recibir el ataque. Si, podía esquivar una flecha, pero Angewomon era un Digimon muchísimo más poderoso y hábil que la guarda que había derrotado, además, Válor se encontraba a dos pasos de ella, no tenía más que apuntar a la cabeza de mi compañero para obligarme a rendirme. Estaba totalmente a su merced y eso me ponía furiosa.
Pero al final no tuve otra que soltar el machete y alejarlo con el pie a la vez que levantaba los brazos a modo de rendición.
—Si si, lo que tu digas de matarme —bufé mirándola desafiante —. Pero que sepas que a la Persiamon le hará gracia del todo el que hayas matado a una pieza tan buena como yo. Ya nos lo confesó el Piratamon que tenía contratado, Persiamon quiere a los niños elegidos con vida, ¿por qué si no nos habría tirado a este mundo en donde podemos defendernos? —le dije no muy segura de si las cosas serían así, pero era cierto que podía habernos matado la primera vez que la vimos —. Y fijo que la recompensa es superior con un prisionero vivo que con un cadáver maloliente.
Esperé a lo que la Digimon tuviera que decir, pero mientras hablaba me fijé en ciertas cosas. Angewomon quizás podía haber fingido ser buena y ahora ser malvada, aunque al igual que Persiamon las veces que había podido matarme eran tantas que no podía contarlas siquiera usando los dedos de los pies. Pero claro, lo que realmente no podía fingir Angewomon era el ser una adolescente y la forma de hablar de esta ángel no lo era. Y vaya... ¿no podía la Digimon gato protagonista de la serie digievolucionar a dos cosas de aquel castillo?
—Aunque bueno, siempre puedes matarme y perder la única oportunidad de librarte de esta cría que se cree una reina y conseguir la total confianza de Persiamon... y eso sería bastante malo, ¿verdad, Nefertimon?