Vamos a jugar a... -Foro-

- Bajar? Yo veo que son para arriba uh... bueno vamos!

Uff... que cansado era esto. Nunca me había gustado subir escaleras, pero lo tenía que hacer.
-Bueno... vamos. Propongo ir en fila india, para que si alguien se cae, los de atrás puedan cogerle... Y el último que se sujete a la camisa del antepenúltimo. -mi idea era que nadie se cayese, aunque esto podría hacer que calleramos todos, pero si lo haciamos, lo hariamos juntos.- Bueno, pensandolo bien, que Eguzki y Flonne vayan detrás, ellos tienen fuerza cómo para recojer a humanos si tropezamos.

-La mejor defensa es un buen ataque, Ashura. Desvía sus ataques con tu Espadarmadura Metálica y dale un golpe directo.

Escaleras? Y parecian no acabar. Nunca habia sido muy atletica y me acansaba bastante rapido, aunque tampoco queria obligar a Eguzki a llevarme todo el trayecto, pero quizas pudiese convencerlo dando pena mientras las subiamos.

Tuve que resignarme a ver cómo todo el material escolar del aula acababa esparcido por el suelo, destrozado. Cuando Clear empezó a realizar su estrategia, sin embargo, aquella preocupación quedó en segundísimo plano.

-¡Caray! -exclamaba con admiración al ver cómo Clockmon manipulaba el tiempo de aquella manera.

Cuando el flujo temporal hubo vuelto a la normalidad en la sala y todos los proyectiles hubieron alcanzado su objetivo, casi di por sentado que la victoria pertenecía a Clear. Poco duró mi gozo cuando vi que el SkullScorpiomon todavía no se daba por vencido.

-Siento estar destruyendo tu colegio, Flint. ¡Pero déjame intentarlo otra vez! -me pidió Clockmon.

Tenía que haber algo que yo pudiese hacer para ayudarle... Miré a mi alrededor. Las mesas, la puerta, la pizarra...

-¡Vale, Clear! ¡Pero intenta taparte los oídos!

Me acerqué al encerado y posé mi mano sobre él.

-¡No creo que le haga gracia que pares su tiempo en el momento exacto en el que oiga esto!

Flexioné los dedos y arañé la tabla con fuerza, generando un molesto chirrido. Yo sólo tendría que aguantarlo unos segundos, pero al escorpión le iba a parecer una eternidad.

Cuando vi a Lopmon digievolucionar me invadió la satisfacción. Hacía tiempo que no peleaba y, de algun modo, me senti muy bien, lo echaba de menos... ¿Podría vivir otra vez una aventura con él? Bueno, primero teníamos que cargarnos a ese digimon.

- ¡Vamos, Lopmon, sin piedad! – dije animándolo.

Astamon se lanzo encima de él. Parecía que iba a darle una patada. Dio un golpe muy fuerte y levanto el polvo. Por suerte Lopmon había conseguido escapar y aprovecho la oportunidad para atacarle. Astamon levanto la ametralladora apuntándole, ya decía yo que no la llevaba para adornar.

- ¡Lopmon, usa Ilusión de terror para despistarle y atacar!

Yo por si acaso me lance detrás del banco. Habia pensado también en aprovechar el arena para cegarlo, pero entonces se pondría a disparar por todos lados y podría herir a alguien… Esperaba que esto nos diera ventaja, sino habría que pensar en algo distinto.

@Loud[II ], Light[III], Zodiark, Sergio:

Subisteis durante muchísimo tiempo, recorriendo toda clase de escaleras y avanzando en silencio. Cuando las piernas comenzaban a doleros a rabiar y el cuerpo os pedía urgentemente un descanso, todos notasteis una ráfaga de viento: una silueta negra y enorme acababa de pasar sobre vosotros, saltando de una escalera a otra. Oísteis el sonido de fuertes pisadas bajo vuestros pies, y notasteis que os observaban.

Ravemon no parecía haberse dado cuenta, seguía ascendiendo con normalidad.

@Drazham[II ]

-¡Espadarmadura metálica! -exclamó Ginryumon, y Sangloupmon cayó de espaldas muy malherido al recibir el golpe.

De repente, la puerta del ascensor se abrió, y cuatro hombres uniformados apuntaron con fusiles a Sangloupmon. Los disparos alcanzaron al Digimon, que estalló en datos, y estos se introdujeron en el interior de un medidor digital de tensión.

Los soldados os observaron.

-Apuntad al chico -dijo la voz de uno-. Si él muere, su compañero se desvanecerá.

Ginryumon golpeó tu silla de ruedas con la cola y la envió dando vueltas al interior de una habitación vacía, justo a tiempo de evitar que los balazos te dejaran fuera de juego.

@Dyray[II ]

Aterrizasteis en el tejado, aunque Magno tuvo que "ampliar" un poco la entrada antes de poder bajar por las escaleras. En aquella forma, su maniobrabilidad dentro del edificio era nula

Mientras bajabais, escuchasteis ruido de disparos, y una voz conocida, la de Ginryumon, que gritaba algo.

@Drail[ ]

Aunque el plan salió bastante bien, los disparos de Astamon eran muy veloces, y acribilló tanto a Wizardmon como a las ilusiones rápidamente, antes de recibir un ataque en el pecho y caer derribado. Se incorporó y os miró con ojos llenos de ira: parecía que esta vez no iba a tomárselo en broma.

@Final[III]

En cuanto Clockmon detuvo el tiempo, hiciste un sonido infernal con la tiza, que provocó sacudidas y temblores en el supuestamente inmóvil SkullScorpiomon. En cuanto el tiempo regresó a la normalidad, el Digimon imitó el gesto de Clear y se llevó las manos a los oídos... Pero claro, él no tenía manos, así que acabó clavando sus afiladas pinzas en su propia cabeza. Se convirtió en datos, que fluyeron en espiral hacia tu teléfono móvil. La destrozada clase quedó bastante más vacía.

Un movimiento visto a través de la ventana llamó vuestra atención. Unos tipos uniformados corrían por el patio del colegio, disparando a un Ikkakumon.

-Magno, haz un hueco al piso superior. Intentemos pasar sin que nos vean hacia la sala de donde provenía la voz de Ginryumon. Puede que Draz corra peligro...

-¡¡Victoria!! -exclamé, abalanzándome sobre Clear.

Apoyado en la esfera de Clockmon, vi mi teléfono móvil tirado en el suelo. Los datos de SkullScorpiomon habían... "vuelto" a él. Porque habían salido de allí, ¿no?

-¿Qué te parece si me explicas por qué un escorpión ha salido de mi teléfono y me ha intentado matar? -le dije a Clear, con complicidad- ¿Los digimon malvados se están haciendo con el mundo real?

Noté como si un chip se me activase en el cerebro. El mundo real... Mon... claro. Estaba ocurriendo. La digitalización del mundo real. Pero entonces... no sólo los digimon peligrosos se abrirían paso a nuestra realidad, sino todos los demás también... Clear era una prueba de ello.

Solté un ligero suspiro y, de reojo, me fijé en cómo a través de la ventana se estaba dando una escena de lo más particular en el patio del colegio. ¡Otro digimon más! ¡Y... había humanos haciéndose cargo de él! ¿Estaría causando problemas? ¿O quizás...?

-¡Tenemos que acercarnos, Clear! -le dije, señalando al exterior.

Agh, ¿y ahora qué…? Ese tipo superaba en Lopmon de nivel, ¡si la cosa seguía así terminaría muy mal!

- ¡Lopmon, rápido, lánzale varias esferas explosivas!

Si Astamon no caía tras esto, por lo menos podría ser que su ametralladora se estropeara con las explosiones. Esto nos ayudaría bastante a tener la balanza a nuestro favor.