Vamos a jugar a... -Foro-

Ilargi no fue capaz de luchar mucho rato, tal y como me temía, y las llamas de Trydan no parecían haberle hecho casi nada. Palidecí al ver que el robot digimon contraatacaba, sabiendo que Trydan estaba demasiado cerca y no sería capaz de esquivarlo. Grité su nombre sin darme cuenta; pero algo golpeó al digimon y evitó que el FlareRizamon sufriera grandes daños. Me levanté tambaleando y me acerqué corriendo a él para pedirle que se alejara otro digimon.

A pesar de la confusión, vi como todos nuestros compañeros con digimon aparecían por allí con sus digimon, e incluso uno, cuyo nombre no recordaba, evolucionaba. Vi a Mafy entrar en el edificio y gritar algo sobre un digimon eléctrico y otro intentando escapar. Entonces recordé de golpe que teníamos un prisionero. Vi como el Thunderballmon trataba de evitar que el agumon escapase y tuve una idea. Me acerqué a ellos asegurándome de que Trydan me seguía y saqué el RH para buscar datos. Me temblaban tanto las manos que estuvo a punto de caer al suelo dos veces, pero tuve lo que quería.

-¡Trydan, tenemos que evitar que el agumon escape! ¡Tengo una idea con tus ataques eléctricos, así que vuelve a ser Elecmon, por favor! -tampoco debía de quedarle mucha más energía. Y sus ataques de fuego tampoco parecían ser muy útiles contra el digimon robot. Además, otro de los digimon había evolucionado y estaba segura de que habrían descansado más que nosotros

-¡Al Thundreballmon no le debería pasar nada, así que ataca con el Trueno... Trueno...! - ¿sparkling? ¿Qué rayos era eso y por qué no podía saber mejor inglés? ¿Por qué los datos no podían estar en un idioma que entendiera mejor?- ¿Brillante? -finalicé, mirando al dispositivo como si tratara de gastarme una broma- ¡Ah, lo que sea! ¡Lanza electricidad para que el agumon quede paralizado y no huya! ¡Y tú, Empresario, entra en el planentario! Te necesitamos. Trydan y yo nos encargaremos del agumon.

Seguí a los demás hasta el sitio de donde había salido el ruido, y nos encontramos con el grupo que faltaba por llegar y no me había dado cuenta, el de Mafy, Lira y Senetyl, que hacían frente a una especie de robot que parecía sacado de una película. ¿Y esa cosa quería matar al señor Kenji?

-¿P-p-pero por qué querría e-?…

Me quede muda. Si eso era un digimon no sé parecía en absoluto a los que nos habíamos encontrado hasta el momento. Su sombra, esos cuadros que cambiaban, su propio aspecto frio… El grito de Nenti me volvió a poner los pies en el suelo. Lo primero que hice fue mirar la entrada del taller mientras repasaba el plan. Todo el mundo se había puesto en marcha, incluso digimon que no había visto aún aparecieron como si nada y atacaron al androide. Iba a actuar junto los demás, pero… ¿De qué serviría llevarlo hasta el taller gravitatorio? ¿Acaso suspenderlo en el aire nos iría a solucionar ese problema? ¡Si pretendíamos derrotar a esa cosa dentro del taller nuestros digimon tendrían que luchar en las mismas condiciones entonces! No lo tenía claro, ¿qué se supone que iba a hacer? Todo estaba ocurriendo tan deprisa…

Había algo extraño en ese digimon. Estudie lo que aparecía sobre él en el dispositivo digital. Los demás parecían conseguir que Andromon hiciera lo que ellos querían. No estaba del todo segura, pero…

-¡FanBeemon – le pedi -, dispara tu aguijón a la sombra de ese digimon!

No podia ser peor, lo que nos despierta es un digimon perfecto, tendremos que debilitarle entre todos para poder ganarle mientras activan la cosa esa de la gravedad...

Andromon, digimon Androide. Se supone que deberia llevarse mal con los cortocircuitos pero DoKunemon no tendra tanta fuerza.

- ¡DoKunemon, disparale seda en los ojos! Mientras este ocupado quitandosela podreis atacarle con todas vuestras fuerzas. Cubre su pierna con tu Pesadilla electrovenenosa, ya has vencido a alguien fuerte antes.

Pero como Stingmon, no se que es lo que hace que estas rayas del RH suban o bajen, pero la ira... solo lo empeoraba.

- ¡A por el, DoKunemon!

—¡Ilargi!

Corrí hasta ella para cogerla en brazos y alegarla del androide, pero el ir a buscar a mi compañera me dejo a muy pocos pasos de Andromon, el cual ya preparaba un nuevo ataque para acabar definitivamente con nosotras. Por suerte Trydan atacó en ese momento envolviendo al Andromon en llamas y a los pocos segundos llegaron el resto de nuestros compañeros uniéndose a la batalla.

—Ilargi, lo siento —me disculpé alejándome de la batalla tanto rápido como pudiese —. No tenía que haberte forzado a luchar de forma directa, tendría que haber pensado mejor las cosas antes de ponernos en peligro...

Fui hasta donde estaba el Empresario tras escuchar a la profesora avisarnos de que usáramos electricidad con el aparato de anti-gravedad. Habíamos tenido suerte en tener al Empresario en plena forma, por lo que podríamos tener el sistema listo en poco tiempo. Aunque alguien se tendría que encargar de vigilar a Hakase.

—Mafy, ni tú ni yo podemos ayudar contra Andromon de forma directa, ayúdame a llevar a Hakase para que el Empresario no tenga que encargarse de él y pueda darle energía al sistema de Anti-gravedad.

Me aterrorizaba pensar que Horus podría agotar su energía antes de conseguir arrastrar a Andromon a la sala de gravedad cero, pero aun fui capaz de fijarme en la sombra del digimon. ERIDANI... Este bicho busca a Kenji... lo habrá enviado alguna empresa para acabar con él? Habrá robado esa tecnología o son ellos los que quieren evitar que se distribuya? Ya le interrogaré luego, ahora... ¡Tengo que evitar cualquier daño que pueda producir el cyborg!

-¡Sigue así, Horus, gana tiempo hasta que consigamos ayuda! ¡Tu puedes! ¡Ogremon! ¡Levántate y golpea con fuerza, ahora es tu oportunidad!

Si conseguíamos hacer flotar a Andromon, siendo poco ágil, quizá mejoraríamos la situación. Y aunque en Diatrymon no podía volar en condiciones normales, en gravedad cero podría ser que sus alas le bastaran para nadar por el aire. Aunque mas preocupante era poder causar daños suficientes al Digimon para que dejara de funcionar... ¿hacíamos bien en usar al digimon eléctrico para activar el taller o saldría mas a cuenta que le atacara directamente? No... echarme atrás ahora podría ser fatal para alguno de esos digimon principiantes... no debo dudar... Si alguno más pudiera evolucionar...

-¿¡Nadie más puede evolucionar!? ¡Necesitamos a otro Digimon fuerte!

Justo antes de bajar y que Nenti pregonase a gritos mi plan la profesora Ziel nos dijo adónde debíamos ir para restablecer la electricidad de los talleres. La verdad es que agradecía esa información pues yo pensaba que posiblemente los fusibles estarían fuera y tendría que buscarlos (dudaba que alguien más se atreviese a pasar el lado de lo que fuese que había entrado).

Al llegar al... ¿vestíbulo? Lo que sea, hablo del piso de abajo, vimos a un digimon grande luchando con otro robótico en el cual aparecían cuadraditos como cuando acabamos en este mundo digital. Lo mejor de todo era esa palabra rara "ERIDANI" que se podía leer a ratos ¿Qué significaría? Mientras el de segundo decía que arrastrasen a Andromon al taller gravitarorio y veía de reojo que la Ziel iba a la sala de control no pude evitar dejar que varias preguntas invadiesen mi mente. Por fortuna, la aparición de Ogremon me devolvió a la realidad.

Escuché el grito de... ¿Mafy se llamaba? ¡Como fuese! Miré a mi alrededor y decidí ir yo misma a por el digimon eléctrico mientras los demás distraían al otro. De repente, Falcomon digievolucionó y pegó el mayor grito que había escuchado en mi vida ¡La madre que le dio! "¡Que no estamos sordos!" grité molesta con los oídos tapados mientras buscaba al dyatrimon para asesinarle con la mirada; sin embargo, me costaba verle y fijarme en él... El condenado se movía rápido. Suspiré y me olvidé de ello, decidiéndome finalmente por ponerme en marcha.

-Guil no creo que sea útil en un edificio de este tamaño, pero quizá otro digimon rápido podría servir - comenté mientras le daba una palmada en el hombro al digimon rojizo para darle ánimos, confiaba en que haría todo lo posible por ayudar- ¡Seguid así! ¡La idea no es vencerle, es frenarle lo suficiente como para hacer un buen contraataque o huir! -dije en voz alta para que me escuchasen, por supuesto que no había ideado ese plan tan rápido para vencerle ¡Demasiado poco tiempo! El plan estaba claramente poco elaborado, pero seguía habiendo esperanza. Aún se me podía ocurrir algo sobre la marcha.

Me apresuré a salir del edificio y busqué al digimon eléctrico del que hablaban. Miré a mi alrededor, debía darme prisa así que me acerqué a una compañera de clase, alta de pelo oscuro que estaba al lado de... ¡Elecmon! "Bingo" murmuré mientras miraba alrededor, veía que estaba sola y me daba cuenta de que me había dejado el bate en el planetario.

-¡El digimon eléctrico que venga conmigo! -dije con un tono de clara seguridad a pesar de la situación algo "crítica" en la que nos encontramos - Le llevaré a la sala de... eh... control o lo que sea, la idea es activar el taller gravitatorio para frenar la movilidad del robot andante -informé apresuradamente- No hay tiempo que perder - fue lo último que dije antes de esperar una respuesta. Me daba igual que fuese negativa o positiva, lo único que sabía después de decir eso es que no iba a tardar en volver ahí dentro.

@Senetyl[II ], Lira[ I ], Kiara[II ], Nenti[ ], Rudy[II ], Suzu[II ]:

-¡No me estabas prestando atención antes! -protestó Trydan, volviendo a su forma anterior y mirando a Sen-. ¡Trueno eléctrico!

Thunderballmon no pareció afectado por la descarga, pero el profesor Agumon se desmayó. Lira y Mafy se ocuparon de recogerlo y arrastrarlo al interior entre los dos. Kiara apareció e indicó al Empresario que le siguiera. Pasaron a la sección de información y Thunderballmon saltó por la trampilla.

Un segundo después, se oyó un chasquido. Todos los paneles luminosos del techo se encendieron. Las luces de la cafetería, también. El taller antigravedad, también...

Ogremon golpeó a Andromon en la cabeza con su porra, DoKunemon le lanzó una nube especial llena de veneno y electricidad a la pierna, que le hizo encogerla y perder asidero y finalmente fue empujado a través de la puerta del taller. Se despegó totalmente del suelo y fue flotando hasta chocar contra la pared del otro lado de la habitación.

FanBeemon probó algo diferente. Disparó un aguijón a la extraña sombra de Andromon. Sucedió algo extraño, porque la aguja pareció detenerse antes de lograr golpear la sombra, se desvió en otra dirección y se clavó en el suelo. La sombra pareció deformarse un poco, pero permaneció intacta. Sin embargo, aquello bastó para que Andromon centrara toda su atención en él.

---Ametralladora--de---misiles--- -se abrieron unos compartimentos en su armadura que dejaron salir dos raros misiles que disparaban balas, y persiguieron a FanBeemon. Horus giró el cuello y se apresuró a destruir aquellos misiles con su ataque sónico-. --Espada---espiral----

Diatrymon no pudo evitar este ataque. La línea azul que había salido del brazo rotatorio de Andromon le partió por la mitad. Sus datos brillaron y se concentraron en un punto más pequeño, haciendo aparecer un Falcomon muy magullado.

-Sabía que iban a darme para el pelo -masculló, y se retiró a toda prisa del camino de Andromon. El androide seguía empeñado en enviar ráfagas de misiles a FanBeemon, que las evitaba como podía, aunque ya había recibido algunos disparos.

-¡Deja en paz a mi subordinada, maldito robot! ¡¡Te vas a enterar!! -gritó Nezu, que había entrado en la habitación y flotaba a un palmo del suelo. El Dispositivo RH que llevaba en la muñeca comenzó a brillar.

-¡Gizamon digievoluciona en...!



-¡...TUSKMON! ¡GARRAS GOLPEADORAS!

Narine se había convertido en un dinosaurio verde de largos brazos y cuernos que rozaban el techo. Esto le permitió encontrar apoyo en el suelo y avanzar con rapidez hacia Andromon. Comenzó a golpearle, una y otra vez, con aquellas enormes garras de hueso por delante.

---Misiles--ge-gemelos--- -de repente, hubo una explosión que Tuskmon recibió de lleno. Salió girando hacia atrás en el aire y volvió a convertirse en Gizamon. Nezu le atrapó en el aire.

-¡Cómo te has atrevido! -Nezu apoyó los pies en una pared y se impulsó a través de la habitación sin gravedad... directamente hacia Andromon-. ¡Voy a partirte la cara!

-¡Nezu! ¡Idiota, no! -Tomi perdió los nervios por una vez. Trató de impulsarse frenéticamente hacia él para detenerlo, pero no se manejaba bien sin gravedad y enseguida perdió apoyo y quedó inútilmente colgado en el aire-. ¡DORUmon! ¡Párale! ¡Digievoluciona! -ordenó, y apretó el botón de su RH.

-¡DORUmon digievoluciona en...!



-¡...DORUGamon!

El Digimon de Tomi no se molestó en intentar atacar a Andromon. Utilizó las alas para moverse en la ingravidez, atrapar rápidamente a Nezu antes de que se pusiera a tiro del androide, dar media vuelta en el aire, agarrar también a Tomi entre sus garras y salir escurriéndose por la puerta del taller.

-¡No! ¡Suéltame! ¡Vuelve y pelea, maldito! ¡Obedece!

-Volveré cuando te haya dejado a salvo -replicó DORUGamon con voz fría.

El problema era que ahora sólo quedaban principiantes para oponerse a Andromon. El Digimon se impulsó apoyando la pierna que no tenía malherida en la pared (la otra seguía recubierta de veneno y paralizada por calambres) y, con el brazo girando como un taladro a toda velocidad, se impulsó directamente hacia FanBeemon.

-¿Por qué me atacas sólo a mí? -preguntó FanBeemon-. ¿Tanto te ha molestado que disparara a tu sombra?

-Es-espa-daaaa---- -Andromon presentaba bastantes fallos, tenía rotas algunas partes de la armadura tras los golpes de Tuskmon.

-¡Pero no puedo dejar que me venzas! ¡Todos me han protegido! ¡Tengo que hacer honor a su esfuerzo! -zumbó FanBeemon.

-Es-piiiiiiiiii-r-

-¡FanBeemon digievoluciona en...!



--ral---

-¡...WASPMON! ¡AGUIJÓN TURBO!

De repente, la versión digievolucionada de FanBeemon lanzó una lluvia de disparos láser, que volvieron a empujar a Andromon hacia atrás y fueron destrozándole la armadura. Uno de ellos le alcanzó en la pierna rota y se la partió del todo. El extraño Digimon quedó pegado a la pared. La ráfaga de disparos cesó y Waspmon volvió a recargar energía.

Pero Andromon volvió a impulsarse con los brazos hacia Waspmon. Su mano mecánica desapareció en el interior de su brazo y quedó sólo una especie de agujero al final. Y entonces...

--E-Espada-lá-láser---- -una hoja de luz cegadora apareció en el extremo del brazo de Andromon.

Me entro mucho miedo cuando el digimon empezó a atacar a FanBeemon después de que él disparase a la sombra. ¿Habíamos encontrado su punto débil? ¿¡Pero a qué precio!? ¡No le estaba dando cuartel!

-¡Cuidado!

¿Por qué quería matar al señor Kenji? No le había hecho nada, era la primera vez que se presentaba, ¿de qué lo conocía? ¡No tenía ningún derecho a hacernos esto! El digimon de Nenti protegió a FanBeemon de los ataques de Andromon. Había conseguido digievolucionar, como aquella vez con Rudy. Y no solo él, esa chica, Senetyl, y el digimon que la acompañaba… y no solo ellos, pronto Narine y el compañero de Tomi también cambiaron de forma, y tampoco lograron hacerle frente.

¿Qué íbamos a hacer? Caíamos como moscas, y Andromon se preparaba para atacar de nuevo a Fanbeemon. Corrí hasta la entrada del taller, donde me pare. ¡Que rabia me daba ese digimon! Encima FanBeemon lo único que podía hacer en ese momento era evadirlo.

-¡Déjale en paz, estúpido robot! ¡No te hemos hecho nada! ¡Vete de aquí!

Si había alguna forma de librarnos de él no la habíamos encontrado a tiempo… Iba a alcanzar a mi compañero con su ataque y lo único que podía hacer era mirarlo. Sin darme cuenta estaba cerrando el puño en el que tenía el dispositivo digital con fuerza. Fue entonces cuando ocurrió. Iba a cerrar los ojos para no verlo, pero fue otra cosa lo que me hizo hacerlo; la luz que salió de FanBeemon. Lo siguiente que oí fue como láseres de una peli o un videojuego y pequeñas explosiones, abrí los ojos y vi que FanBeemon se había convertido en una avispa gigante. ¡Lo había conseguido, había digievolucionado! Quería felicitarle por el contrataque, pero Andromon había retrocedido hasta la pared de nuevo, aún no estaba derrotado. Aproveche el momento para liberar el dispositivo digital y ver en qué se había convertido FanBeemon. Andromon cargo de nuevo con una hoja en la mano apuntándole.

-¡Aprovecha que viene hacia ti y que no puede salir de la trayectoria del láser! ¡Usa el aguijón turbo de nuevo a su cabeza!

“Al final llevar a Andromon al taller de gravedad habrá servido de algo”, pensé. No podía apartarse del ataque de FanBeemon que antes le había afectado de esa manera gracias a la falta de gravedad. ¡¡Dale duro!!

@Senetyl[II ], Lira[ I ], Kiara[II ], Nenti[ ], Rudy[II ], Suzu[II ]:

FanBeemon lanzó una ráfaga de disparos a Andromon. El androide desvió los dos primeros con rápidos movimientos de su espada láser, pero recibió el tercero en la cabeza y su casco se agrietó. Al cuarto comenzó a dar vueltas en el aire hacia atrás, totalmente desviado, y trozos de su casco iban desprendiéndose, pero antes de que pudierais ver su rostro, brilló un segundo y aumentó de tamaño.

Su forma había cambiado totalmente, un rápido escaneo con el RH reveló que ahora estábais ante Guardromon.

-¡Granada destructora! -en cuanto topó con el suelo y pudo estabilizarse, Guardromon volvió al ataque.

-¡Poder metálico! -pero DORUGamon volvió a la sala y lanzó una ráfaga por la boca que la hizo detonar en el aire. Hubo un momento de silencio tras la explosión.

Sucedía algo extraño. Guardromon seguía atacándoos, aunque se veía muy débil y lleno de grietas. Sin embargo, de vez en cuando su silueta se deformaba, parecía que estaba intentando volver a la forma de Andromon. De hecho, por algún motivo, la sombra roja no había cambiado: seguíais viendo la figura estilizada de Andromon salpicada de cuadrados negros en el suelo.

Corrí hacia Horus para comprobar si estaba bien.
-Chico, te duele algo? ¿Estas bien? ¡Has estado increible!
Juntos observamos como el digimon de Nezu y Tomi evolucionaban y eran repelidos por Andromon, y después FanBeemon hacía lo propio y empezaba a darle problemas al robot.
-Es muy duro, espero que no haya muchos de su nivel o no saldremos vivos de aquí...
Al final, Waspmon consiguió darle una tunda a Andromon y... ¿se convirtió en un bicho más grande? Quizá era más débil. Y estaba malherido.
-Solo queda rematar el trabajo... ¿por que la sombra no cambia? Hacer amigos no se me dará bien, pero dar ordenes... -me levanté de al lado de Horus y le grité a Suzu y Tomi- Ya casi lo tenéis, pero mientras uno intenta golpear al cuerpo, que el otro ataque a la sombra, es muy sospechosa! ¡Esta débil, es vuestra oportunidad de terminar esto sin bajas!