Vamos a jugar a... -Foro-

Alivio.

Tiré la piedra al suelo y me coloqué a Nori sobre el hombro.

-Lo has hecho genial -musité-. Ha sido culpa mía que te atacara... estaba claro que si te cegaba atacaría hacia la única fuente de sonido. Aun así, has conseguido hacerle mucho daño antes de que te alcanzara. Eres genial, Nori.

Miré a Hawkmon con desconfianza, pero no parecía representar una amenazada. En cualquier caso, prefería quedarme cerca de Asch y Ginryumon, por si las moscas. Caminé junto a ellos y vi que el chico estaba mirando algo en su dispositivo digital. Me aseguré de que tenía los ojos secos, porque ahora que todo había pasado no quería que el otro chico me viera así.

-¿Qué ocurre? ¿Y ahora qué hacemos? -dije, mirando a mi alrededor-. ¿Crees que habrán ganado al otro Digimon? Esto es una aldea... quizá deberíamos buscar comida o algo así. ¿Qué tal va la herida del cuello, Nori? Yo no me la veo. Ah, y deberíamos hacer... Algo, con los huevos. No quiero que ese Hawkmon se recupere y piense en comérselos. ¿Qué podemos hacer al respecto?

—¡Si, toma esa, copia barata de Jack Sparrow! —salté celebrando la victoria al ver que Hookmon se transformaba en un Digimon azul con forma de reptil —¡Choca esa pata, Válor!

Extendí el brazo ofreciéndole mi mano al Gazimon para que la chocara. Tras eso, me planté delante del Veemon, que momentos antes había sido Hookmon, con una sonrisa que dejaba bastante claro mis intenciones hacia este. También hay que mencionar que hice sonar los huesos de mis puños para prepararme.

—Muy bien, marinero de agua dulce, que tal si nos hablas un poco de Persiamon y esta Memoria que he conseguido —empecé con el interrogatorio preparándome para cualquier ataque —. Te recomiendo que hables, no querrás que mi amigo Válor y yo te hagamos ver las estrellas, ¿verdad?

Si el enemigo se resistía a hablar, le indicaría a Válor que lo agarrase por la espalda para yo así poder propinarle varios puñetazos al estomago y mandíbula que lo dejaran demasiado débil para poder realizar un contraataque. Ni de coña iba a dejar que se fuera de rositas tras haberle dado una bala de cañón a mi compañero en la cara dos veces.

—¡¿N-no vamos a ayudarles…?! P-pero… …Supongo que sería demasiado esfuerzo, ¿no? Tienes razón…

—¡No, no es eso! Ellos pueden cuidarse solos, y lo sé porque confío en ellos. Igual que confío en ti, Opossumon. ¡No debemos distraernos!

La idea de Luke distrajo a Frogmon, y bomba de Opossumon hizo un buen trabajo lastimándole, y aunque me alegraba porque íbamos por buen camino, me preocupaba que nuestro rival comenzara a enfurecerse más y más. Antes de poder darme cuenta, había un shuriken volando a toda velocidad hacia mí.

—¡Esquívalo! —exclamé a Opossumon apresuradamente al ver el tornado que se acercaba rápidamente a él, antes de poder reaccionar siquiera al shuriken que cada vez estaba más cerca.

No tenía tiempo de pensar una orden que darle a mi compañero para salvarme del arma arrojadiza, por lo que instintivamente rodé hacia un lado con la esperanza de ser lo suficientemente ágil y rápida para esquivarla. Esperaba que con algo de suerte Opossumon fuese capaz de esquivar el tornado y ayudarme.

Meramon había desaparecido, pero eso no significaba que estuviéramos a salvo sino lo contrario. El enemigo podía aparecer por cualquier sitio para sorprendernos y ya no teníamos a Tortomon para defendernos. Por otra parte, los ataques de Tentomon habían sido prácticamente inútiles, así que tampoco podríamos enfrentarnos a él en un combate frontal.

Decidí que lo más seguro sería alejarnos del lugar donde estábamos y escondernos en algún sitio fuera del alcance del monstruo.

—¡Retirada! ¡Salgamos de aquí, rápido!

-Podríamos... asarlo y comérnoslo entero! Dije que habría pollo para cenar y no me retracto de ello. Ginryumon, de momento descabezalo y vamos a ver como lo llevan los otros. -dije mientras le palmeaba el lomo a Ginryumon y le enseñaba todos los dientes al pavo. A ver que nos decía si tenia miedo de morir.

Mi magnifico plan de distracción junto a la ayuda de Opossumon hicieron que Swanmon lograse salir del ataque que Frogmon había desatado sobre él. Cuando volvió conmigo, me acerqué para comprobar cómo estaban sus heridas. Entonces, la rana empezó a decir algo de un ataque muy poderoso. ¿Se refiere a un ataque definitivo? ¿Algo en plan ataque definitivo especial técnica secreta? Entonces será muy fuerte, fijo. Caca.

Frogmon lanzó dos shurikens y unos tornados a la vez para acompañarlos a los shurikens. Menudo combo había hecho, la verdad. Pero no me iba a impresionar. Al ver venir el shuriken mi primer impulso es saltar sobre Swanmon y agarrarme a él para no caerme.

—¡De esquivar va la cosa! ¡Rápido, salgamos de aquí!

Sabía que si quería moverme hacia algún lado, me llevaría el golpe yo o Swanmon protegiéndome, y eso no iba a permitirlo.

—Juntos nos movemos y juntos venceremos —pensé en voz alta.

Quizá lo dije tan bajo como para que lo escuchase, o quizá lo oiría. Pero una cosa era segura: íbamos a vencer juntos, no permitiría que nos venciese Frogmon. Aunque es bastante fuerte, todo sea dicho.

@Alan (50%) @Alice (25%)

-¡Ha sido todo gracias a ti, Alice! -te asegura Gazimon, chocando su pata con tu mano. Acto seguido, se aleja un poco y tararea bajito-. Soy el mejor, soy el mejor, soy el mejor.

Alice, te acercas a Veemon, que todavía está arrodillado en el suelo sujetándose el espacio entre sus piernas con las manos. Válor y Floramon se colocan en sus flancos, preparados por si se le ocurre realizar algún movimiento precipitado. Cuando haces sonar tus nudillos, Veemon levanta la cabeza para mirarte, aterrorizado.

-¡Ya he visto bastante estrellas por un día, Capitana Pelo Flamígero! -te contesta, inclinándose levemente-. ¿Qué quieres saber exactamente...? Persiamon es nuestra comandante, y está en la Ciudad de los Tanemon, en la fortaleza. Ella es la que ha ordenado que os cacemos a los niños humanos y a vuestros digimon. En cuanto a la Memoria, ¡no tengo ni idea, lo juro! ¡Sólo sé que es algo que Persiamon quería proteger, así que nos lo dio a algunos de sus soldados más poderosos! ¡No sé nada más, lo prometo! ¡Por favor, perdóname! ¡Seré un buen digimon de ahora en adelante!

Alan, intentas moverte y descubres que puedes levantarte. Aunque todavía te duele mucho la caja torácica, puedes andar con relativa normalidad. ¿Puede que Floramon haya estado curándote todo el tiempo que estuvo a tu lado...?

@Luke (-50%) @Tris (160%)

Luke, te subes encima de Swanmon. Al principio, tu digimon no está muy seguro de cuáles son tus intenciones, e incluso parece estar un poco contrariado de que le estés montando. Pero entonces le ordenas salir de ahí, y te comprende al fin. Echa a volar, consiguiendo que ambos esquivéis el shuriken gigante. Sin embargo, la tormenta es demasiado amplia como para poder esquivarla horizontal o verticalmente, así que acabáis siendo golpeados con ella. Las turbulencias comienzan enseguida, y tienes que agarrarte muy fuerte a Swanmon para evitar caerte.

-¡Je, je, je, je, je!

Con un salto increíblemente preciso, como si le guiara su propia tormenta, Frogmon aterriza encima de Swanmon. El digimon alado comienza a perder altura y a agitarse todavía más. Frogmon te acerca su shuriken al cuello como si fuera una cuchilla, Luke, y no parece que vaya a dudar a la hora de clavártelo.

-¡Perziamon me colmará de riquezas y bebida cuando haya acabado con vozotroz doz! -exclama Frogmon, sacando la lengua.

Tris, dejas a Opossumon un tanto confundida con las palabras que le dedicas. La tormenta es demasiado amplia como para poder esquivarla, y Opossumon termina teniendo que protegerse la cara del viento cortante con su brazo libre. El shuriken gigante, sin embargo, es demasiado rápido como para que lo puedas esquivar de una simple voltereta. Opossumon se da cuenta de esto.

-¡TRIS! -chilla, y en un acto desesperado, lanza todos sus globos en tu dirección.

El ataque de Opossumon da el resultado esperado, eliminando completamente el shuriken de Frogmon. Sin embargo, una explosión tan potente no te deja ilesa, Tris, y sales disparada, estrellándote contra un árbol. Aunque no te rompes nada y puedes moverte, el impacto hace que te duela mucho todo el cuerpo, sobre todo la espalda.

-¡N-no! T-Tris, ¿qué he hecho...?

Es entonces cuando escucha la risa de Frogmon. Alzando la mirada, Opossumon ve a su enemigo subido encima de Swanmon y peligrosamente cerca de Luke. El digimon gatuno duda unos segundos.

-Confía en ellos... Pueden cuidarse... solos... -susurra para sí misma. Deja pasar unos instantes, y entonces frunce el ceño, su mirada repleta de determinación-. ¡Lo siento, Tris, pero no puedo hacerte caso en esta ocasión... -Con un grácil movimiento, Opossumon se quita el sombrero y saca de él un orbe de cristal que empieza a flotar alrededor de las palmas de sus manos. La esfera comienza a brillar con un resplandor verdoso-. ¡ORBE MISTERIOSO!

La luz engulle tanto a Frogmon como a Swanmon y Luke. Se escuchan tres impactos, y poco a poco la iluminación vuelve a su estado natural. En el suelo se encuentran ahora un Dorimon y un digimon con forma de foca bebé o de cría de dinosaurio, la forma infantil de Penguinmon.

Spoiler: Mostrar

Luke, aunque la caída ha sido dura, has sufrido peores daños cayendo de árboles más altos en Mitchelstown. Tienes moratones y algún arañazo, pero en general te encuentras bien. Bukamon se sube a tu hombro y suspira, aliviado de que todo haya terminado.

Tris, Opossumon se acerca a ti a ritmo pausado y te ayuda a levantarte.

-Tris, lo siento... -murmura, bajando la cabeza-. Si te hubiera hecho caso... Tanto tú como Luke y Swanmon habéis acabado heridos... Si hubiera confiado, si hubiera dejado que os cuidarais solos... -suspira-. A partir de ahora sólo haré lo que tú me digas.

Tris, tu dispositivo digital vibra igual que cuando te informó de que habías descargado una nueva forma para Labramon. En esta ocasión, figura la siguiente frase: "Memoria -Bosque Frondoso- Recuperada".

Y una vez más, gracias a la ayuda de Opossumon nos salvamos. Aunque Swanmon había vuelto a cambiar, pero a una forma más pequeña. Supongo que habría ido dos niveles para abajo, qué caos.

—Supongo que nos queda más por practicar, ¿no? Y... ahora eres un... ¿Bukamon? Creo que se llamaba así. Eh, ¿te parece que te llame Flynn? Mola mucho el nombre, ¿no crees? Y así dejas de cambiar de nombre, y tienes uno propio y molón, como tú. ¿Te hace?

Quizá estaba demasiado entusiasmado con lo del nombre, pero así dejaría de ir cambiándole de nombre todo el rato, y sería más divertido. Flynn mola mucho.

—Por cierto —dije, cogiendo al Dorimon en el suelo—, has luchado bastante bien, rana. ¿Pero qué leches quiere Persiamon y todo eso? Tengo curiosidad. Además, pensamos llevarnos el barco, ¿a que sí, Flynn? Y el barco era vuestro, así que vente si quieres. Sin rencor, luchaste bien, campeón —dije, mientras le acariciaba.

Y sin soltarlo aún, me acerqué a Tris y Opossumon.

—Gracias chicas, si no fuera por vosotras no sé qué nos habría pasado... ¿Os queréis venir con nosotros? Y ya de paso, a ver qué quieren hacer la pareja de allá. Y Opossumon, eres la caña, ¡muchas gracias! Dorimon, discúlpate.

—Estás equivocada... —dije intentando reincorporarme a duras penas, llevándome una mano a la espalda a causa del dolor—. Es justo al revés. He sido yo quien ha depositado mi confianza en ti, Opossumon, y no me arrepiento. Me has salvado la vida. Era esto... o morir, ¿o acaso crees que habría podido contarlo si ese shuriken me hubiese alcanzado? A veces hay que sacrificar algo de HP para vencer, jeje. Oh, y también has salvado a Luke y su compañero —todavía medio agachada, tratando de levantarme muy lentamente para no lastimarme más, hinqué las rodillas en el suelo y, tras dedicarle una cálida sonrisa a mi compañera, me acerqué para darle un tierno abrazo de agradecimiento—. No tienes que preocuparte, Opossumon. Eres la mejor. Muchas gracias.

Luke se acercó, con la forma preevolucionada de Frogmon en brazos, y nos dio las gracias.

—De nada, Luke, pero todo el mérito es de Opossumon —respondí al agradecimiento al mismo tiempo que soltaba a mi compañera y me levantaba muy suavemente, con una mano en la espalda—. Ay... Vayamos juntos, sí. Será lo mejor si hay más Digimon hostiles por ahí. Veamos qué quieren hacer Alice y Alan.

>>¡Ah, por cierto! —añadí, sacando el dispositivo digital del bolsillo y mostrándoles la pantalla a los tres, donde aparecía el texto "Memoria -Bosque Frondoso- Recuperada"—. ¿Alguno de vosotros sabe de qué va esto?

Tortomon había aplastado al Meramon y luego había salido disparado. Observé desde el suelo, incrédulo, como el inmenso digimon había salido disparado, y como volvía a su forma de ángel. Entonces me levanté con rapidez y corrí hacia él. Me arrodillé en el suelo y comencé a sacudirlo para que se despertase. Entonces escuché al otro chico y decidí que tenía razón al huir. Nuestros digimon parecían demasiado cansados para evolucionar y difícilmente podrían con el Meramon en su estado. Me eché al Lucemon a la espalda y corrí hacia el otro chico, esperando que encontráramos un lugar seguro.