Vamos a jugar a... -Foro-

Miré a los dos chicos que habían aparecido de pronto, y cuando uno de ellos me miró, giré la cara, tímido.

- Bueno, ¿y cómo bajamos? Las escaleras están rotas - pregunté a Tsuki, a ver si tenía alguna idea.

-Oh, ¿nos lo entregas...?

Observaba el mecanismo casi embelesada. Parecía un ordenador portátil normal y corriente, pero, como decía Centarumon, poseía gran cantidad de usos. Podía ser una gran ayuda... o tal vez un inconveniente.

-Muchas gracias, Centarumon. Cuidaremos muy bien de él. Estoy segura de que nos asistirá en nuestra cruzada contra Mon.

Dirigi una fugaz mirada a Heliga, otra a Habimaru y, finalmente, asentí con firmeza ante mi propia convicción.

-Una última cosa antes de marcharnos... ¿Sabes dónde o cómo conseguir el permiso para abandonar este área?

Tras recibir una respuesta, lo mejor sería coger el mecanismo y abandonar el lugar por donde entramos. Mi chaqueta estaba un poco quemada, pero decidí guardarlo bajo ésta. Era mejor que llevarlo a la vista de cualquiera.

@Zodiark[II ], Rayden[ I ], Light[ I ], Boku[III], Loud, Ami[ ], Habi[ I ]:

Zodiark, Rayden, Light, Boku, Loud, bajáis por las escaleras y avanzáis por un pasadizo, en el que encontráis más señales de lucha. Vuestros Digimon abultan bastante y se os hace difícil avanzar, todos apretujados.

Ami, Centarumon niega con la cabeza.

-Los Permisos de esta zona nunca han estado en este templo. Se guardan en otro lugar, pero no me ha sido revelado dónde... Y bueno, quizá esos recién llegados sepan algo más.

Señala a tu espalda. Ves acercarse a un buen puñado de humanos con sus Digimon. Uno de ellos es un niño muy pequeño que lleva un huevo. No les da tiempo a ver el Mecanismo Sagrado, porque te lo has guardado ya.

@Sergio[II ]:

Os acercáis a Coelamon, pero en cuanto os detectan, los Crabmon se interponen y os miran de forma amenazadora.

-Un Seadramon -dice la voz de Coelamon-. Este no es tu sitio. ¡Márchate!

Todo el grupo bajó por esa extraña reliquia, mas lo único que vimos al llegar era más gente.

- Koku, ¿quién será? Vamos a preguntarle, colega.- le dije con una sonrisa.

Enseño las manos, haciendo ver que no llevo ninguna arma y adopto una pose no amenazante.
-Venimos en son de paz, nos manda el gran Magno, buscamos digimons de gran poder para ayudar en su ejercito y derrotar a Mon-le miro con ojos que demuestran un fingido respeto-.Hemos venido a verte por que escuchamos de tus grandes habilidades, para decirte que te necesitamos de tus servicios, poderoso Coelamon -le hago una exagerada reverencia-.Por favor, el gran Magno precisa de tus habilidades, es una oferta difícil de rechazar- miro a los Crabmon-.Si quieres permanecer con tus amigos, te los puedes llevar también.
Vale, por hacerle un poco la pelota no pasaría nada, ¿verdad?Acaricio nervioso la zona entre los ojos de Ben

- Eh, esa no es la chica que estaba luchando? - les pregunte a los chicos al ver a los otros humanos - Quizas ellos sepan algo del mecanismo, que tal si se lo preguntamos? - nos acercamos a los otros dos humanos - Hola, soy Alazne y este es Eguzki, mi compañero.

Umf, casi que alguien deberia de-evolucionar, ¿no? Light, Soda, creo que Tsuki y Eguzki ocupan mas.

Bueno, mas gente. Una nena y un chico en uniforme. Vamos a presentarnos. Encantado, me llamo Ray. Como vosotros, somos humanos que han llegado a este mundo para cargarse a Mon. Hemos venido hasta este templo a buscar un aparato llamado Dispositivo Sagrado. ¿Alguien sabe donde esta?
Por cierto, tu eres la chica que antes estaba enfrentandose a un SkullMeramon, ¿verdad? Me alegro de que hayas ganado. Supongo que esta chica gata sera tu compañera evolucionada.

- Hola yo soy..Loud.. y como veis este es mi "digimon".. se sacrifico para salvarme asi que ahora mismo solo soy un poco de lastre jajaja, almenos de vosotros nos podemos fiar, no Boku?

Suspiré aliviado al ver que la chica estaba a salvo, y decidí presentarme.

- Yo soy Zodiark, y éste es mi compañero Digimon, Tsuki - miré a Rayden -. Y tú deja de llamarme "Soda", por favor - suspiré indignado.

Iba a contestar y despedirme de Centarumon cuando señaló a nuestra espalda. Me di la vuelta, curiosa, ¡sólo para encontrarme una de las cosas que llevaba buscando todo el viaje!

-¡Otros humanos! ¡Por fin! -exclamé con una sonrisa, corriendo hacia ellos-. Yo soy Ami Eketrea. ¡Es un placer! Ellos son Heliga, mi colega, el gruñón es Habimaru y su compañero se llama Aura. ¡Qué bien que nos hayamos reunido, ja, ja!

El grupo estaba formado por tres chicos y una chica de aproximadamente mi edad y un niño que parecía demasiado joven para estar ahí... Prácticamente todos nos hablaron amablemente, pero uno de ellos preguntó sobre el Dispositivo Digital. Estuve a punto de mirar hacia Centarumon, pero me contuve. Una pequeña parte de mi escepticismo y desconfianza original retornaron a mi ser. Así que me habían estado observando mientras luchábamos contra SkullMeramon, ¿eh...?

-¿Un... dispositivo sagrado? Tiene pinta de ser importante. ¿Para qué lo necesitáis? -Comencé a avanzar para salir de aquel subterráneo según hablaba, despidiéndome con la mano de Centarumon. Traté de cambiar un poco de tema-. ¿Y qué habéis hecho vosotros? ¿Habéis descubierto algo por vuestra cuenta, por cierto? ¿Algo que nos ayude a derrotar a Mon? ¡Quiero detalles! Nosotros pasamos por un castillo ruinoso y derrotamos a un supuesto general de nuestro enemigo, y luego llegamos aquí, poco más. No tenemos ni el Permiso para abandonar la zona...