@Boku
Pones a prueba tu plan. Utilizas Fusco para prepararte ante un posible ataque... parece que cada vez te cansa más usarlo. Saltas hacia la serpiente e intentas clavar la espada en el cuerpo del sincorazón, pero tu arma rebota contra una de las partes moradas en relieve, haciéndote caer hacia atrás... parece que no están sólo de adorno.
-¡Ataca en donde no tiene refuerzo! -exclama Nanaki, todavía en la cabeza de la serpiente.
El Zolom comienza a sacurdirse de nuevo... esta vez golpeando su cabeza contra una pared y aplastando a Nanaki bruscamente contra ella. Tu compañero emite un alarido de dolor y cae al suelo, pero logra sobreponerse a sus magulladuras y levantarse.
-No me arriesgaré a acercarme de nuevo... -te dice, resoplando- ahora depende de ti, Boku.
Nanaki se aparta, consciente de que no sería capaz de luchar en su estado. La serpiente, por su parte, parece dolorida por su reciente choque contra la pared, y parece un poco mareada.
@Sara
@Edurna
Sara, utilizas Arcano. Seguramente por culpa de la furia de tu ataque, el primer golpe no es tan certero como querrías y no logras atinar a ninguna Sombra, pero logras acertar con los dos siguientes y acabar con un crítico golpe espiral. Con tu ataque has destrozado a tres de los sincorazón, quedando otros tres en pie. Dos de ellos se dirigen hacia ti, Sara. Uno intenta atacarte pero calcula mal y acaba de bruces contra el suelo, mientras que el otro aprovecha para saltar encima de él y arañarte en el pecho, echándote hacia atrás.
Edurna, la tercera sombra se dirige directa a ti, como una centella. Antes de que llegue a tu posición, utilizas Shock. El hechizo atraviesa a tu agresora, desintegrándola, y se dirige a la Sombra que se había caído al suelo, derrotándola también.
Parece que sólo queda una sombra, pero... decide escapar de nuevo al verse en desventaja.
@Felanan
@Loki
Derrotais sin problemas a las dos Sombras, con fluidos movimientos. Una vez despejado el campo, Felanan, decides coger lo que te habías dejado allí. Un trozo de cristal brillante, con forma de estrella, brilla en tu mano.
Mientras inspeccionas el objeto, sientes una extraña presencia sobre vosotros...
Loki, ves que en el tejado de una de las casas de la plaza se posa un enorme ave, de color negro y ojos grandes y amarillos, parecidos a los de las Sombras. Dos cuernos adornan su cabeza, y su cola es larga como un látigo. Líneas verdes adornan su cuerpo.
Os preguntáis cuánto tiempo lleva observándoos, pero, antes de lograr preocuparos por ello, alza el vuelo.
JEFE: GARUDA
Comienza a atacaros desde las alturas, expulsando unos extraños proyectiles al cielo a modo de mortero, que comienzan a precipitarse sobre vosotros...
@Aurek
Coges el cristal estrellado. Emite un brillo agradable.
Mientras lo inspeccionas, levantas la vista y ves que Viento y Vivi se han puesto en guardia. No entiendes por qué, hasta que te das la vuelta y ves una criatura tan alta como tú en lo alto del cráter. Se trata de un sincorazón negro, cono ojos amarillos parecidos a los de las sombras, que se levanta sobre dos patas provistas de garras. SIn embargo, está encorvado, lo cual te recuerda a la posición en la que caminaban algunos dinosaurios... el propio monstruo te recuerda a un reptil. Por su espalda se extiende una capa de escamas brillantes, que emiten un brillo parecido al del cobre.
JEFE: SOMBRAGAAN
El monstruo comienza a rodar sobre sí mismo alrededor del cráter, rodeándoos a los tres, que estáis en su fondo. De repente, cambia su trayectoria y se dirige cuesta abajo pro la ladera del agujero, hacia vosotros...
@Zodiark
-¡Un monstruo en forma de tesoro! ¡Mi archienemigo! -l sArtemición, recuperado del susto.
Agarras al moguri para apartarlo de la trayectoria del ataque y saltas en la lengua del monstruo, todavía con él bajo el brazo. Comienzas a correr por ella, dirigiéndote al cofre ante los gestos de desesperación de tu enemigo. Justo antes de llegar, divisas que dentro del cofre el monstruo no tiene piernas, sino una cabeza más en donde deberían estar sus piernas... pero es gelatinosa, y parece estar temblando.
-¡Su punto débil! -dice Artemición, en tu antebrazo.
En un movimiento desesperado para que no entres en él, el cofre se cierra de un golpe todavía con la lengua de fuera, haciéndote caer... pero causándose a sí mismo un enorme daño. Cuando vuelves tu mirada hacia él, ves que está sufriendo sobremanera, agarrándose su pobre lengua. Todavía gesticulando como un loco, la retrae, te mira furioso y esconde dentro del cofre, cerrando la tapa. De la parte inferior del baúl salen dos cañones, que comienzan a disparar pequeñas bombas hacia ti.