Capítulo 7 - Ser mago es una mierda.
(¡No había muerto! Sólo ocurrieron muchas cosas, las más destacables: videojuegos nuevos y trabajo de la universidad.)
Prefiero los funerales élficos, pero admito que he entrado en calor. Y que te den, Morrigan.
Y como ya no hay nada más que hacer por aquí, podemos empezar a reclutar gente.
Y llevamos a la Torre de los Magos un gólem que odia los magos y una apóstata. ¿Qué puede salir mal?
Soy un guarda gris y he venido a reclutar a vuestros magos para salvar al mundo.
No hay ninguno por aquí. Aunque si lo hubiera me plantearía el ayudarte.
Gracias, Shale.
He venido a reclutar gente y no me iré de aquí sin conseguirlo.
¿Qué?
Sois unos putos inútiles. Abre esas puertas, que ya me he enfrentado a unos cuantos demonios.
Si ya habéis huido una vez no voy a confiar en que no lo hagáis de nuevo. Déjame pasar y yo mataré lo que haga falta.
Vine aquí a por los magos, pero tanto me dan hechizos que espadas.
Entendido.
(Y este es un momento tan bueno como cualquier otro para empezar a explicar cosas que cuentan en el Origen Mago y en informes y códices que no os voy a enseñar.
- Spoiler: Mostrar
- El comentario de Morrigan no es aleatorio en absoluto. La Capilla ordena que todos aquellos que nazcan magos sean llevados la torre para aprender las escuelas de magia legales y a resistir el influjo de los demonios para evitar ser poseídos, a lo que son especialmente sensibles . Y no pueden salir de la torre. Jamás.
En la torre también viven los templarios, que son los que se encargan de asegurarse de que las cosas no se descontrolen. Es decir, cargarse cualquier mago que muestre algún signo de debilidad o corrupción o no es capaz de superar la Angustia, que es una especie de "examen final" en el que van al Velo y se enfrentan a un demonio.
Y si resulta que alguien consigue escapar de la torre, los templarios lo persiguen para traerlo de vuelta gracias a una muestra de sangre que conservan de todos los magos. Cabe mencionar que la magia de sangre está prohibida por ser especialmente cruel y peligrosa, ya que los hechizos utilizan la fuerza vital del usuario o de la víctima, y los magos son más susceptibles todavía a ser poseídos por demonios.
Y si no quieres sufrir nada de esto, tu única opción es convertirte en Tranquilo. Aunque también te pueden convertir en uno porque les de la gana.
Conclusión: no nazcas mago)
Aún no hemos cruzado la puerta y ya hay tres cadáveres. Esto promete.
Iba a ayudar, pero no parece que os haga falta.
Un momento, ¿tú no eras... Wynne?
El derecho de anulación todavía no ha llegado.
¿Y qué pretendes hacer?
Muy bien, te ayudaré. Solo espero que queden suficientes de vosotros para ayudarme contra los engendros. Aunque reconozco que entre caballeros fanáticos descerebrados o magos que pueden ser poseídos por demonios en cualquier momento, no sé qué es lo que menos necesito ahora mismo...
Como quieras. Tú sabes mejor que yo lo capaces que son.
(Y quito a Morrigan para añadir a Wynne, que es obligatoria para esta parte)
(Viene con hechizos de la parte de creación, que son habilidades curativas. Wynne va a ser muy útil.)
¿Seguro que vas a poder aguantar con nosotros?
Bueno, son menos muertos que antes. Igual las cosas no están tan mal.
(En este juego los demonios se dividen en cinco rangos básicos. De menos a más poderoso están los demonios de la cólera, de la gula, de la pereza, del deseo y del orgullo. También existen las abominaciones, los horrores arcanos y las sombras, que aparecen cuando un mago o un cadáver de mago es poseído o no han sido capaces de poseer nada, respectivamente)
(Las abominaciones explotan al morir)
¿Quién eres y qué haces aquí?
Oh, espera. Eres un Tranquilo, ¿verdad? Perdona si me alejo de ti cinco pasos.
Podemos confirmar la hipótesis de que hay magos de sangre por aquí. ¡Morid!
Tengo por costumbre defenderme de aquellos que intentan matarme.
Pronunciar ese nombre en mi presencia no va a ayudarte demasiado.
(Aquí está hablando Wynne, ejem)
En eso tiene razón. O al menos tiene sentido, no sé mucho sobre la historia humana salvo la parte que les interesa a los dalishanos.
Ir de cabeza a la Capilla no me parece la opción más sensata, pero allá tu. Estas cosas son trabajo de los templarios, de todas formas.
Más muertos a los que matar.
El piso está despejado. Puedes bajar a la primera planta y quedarte con los magos que hay allí. Será más seguro.
Eso es mucho más peligroso, pero allá tu.
¿Y esto?
¡Joder! ¡Yo no sabía que iba a pasar eso!
¿Y sólo tiene dinero? Bah, ya podía haberme dado un casco o unas botas.
Con todo el caos, nadie tiene por qué saber que un guarda gris ha entrado en los aposentos del primer encantador para buscar tesoros, ¿verdad?
A ver si dándoselo consigo que odie el mundo un poco menos.
(Los horrores arcanos usan magia muy fuerte, pero mueren de un par de espadazos)
Pero ya habíamos llegado a esa conclusión antes de empezar a subir la torre.
¡Templarios poseídos! Esto es una novedad.
¿Por qué tiene un lingote de oro un templario?
¡Vale, esto se ha vuelto mucho más grotesco más rápido de lo que esperaba!
Y supongo que tendremos que seguir por la puerta que está rodeada de esas masas asquerosas.
¡Tú, libera a ese templario!
Sólo lo estás engañando. Y eso definitivamente no es bueno.
Bueno, reconozco que si lo pones así...
(Y tras una breve y reñida votación en el chat...)
¿Qué estás haciendo?
(No sabía que si decidías matar al demonio terminabas cargándotelos a los dos. En mi otra partida había decidido dejarles marchar por curiosidad.)
Tengo la sensación de que no he hecho lo correcto. O lo más satisfactorio, al menos.
(Nunca había conseguido capturar el golpe final en el que cortas la cabeza del enemigo)
(¡No, Leliana, que ibas muy bien!)
También es mucho esfuerzo luchar contra nosotros. Deja que te matemos sin protestar.
Bueno, es cierto que hay más guardas grises por ahí, fuera de Ferelden...
¿Dónde estoy? ¿Y qué estaba haciendo antes?
¿Duncan? ¿Tú no estabas muerto?
(Weisshaupt es el cuartel general de los guardas grises, y se encuentra entre Anderfels y el Imperio de Tevinter)
¿Y por qué cojones no he vuelto con mi clan?
Y. POR. QUÉ. COJONES. NO. HE. VUELTO. CON. MI. CLAN.
La capacidad persuasiva de este demonio da pena.
Extraño.
(¡Bienvenidos al Velo, mazmorra odiada por muchos, pero que es de mis preferidas! En ella tendremos que viajar entre los distintos puntos, derrotando demonios para conseguir sus poderes de transformación y desbloqueando caminos hasta derrotar a los jefes de cada zona, rescatar a nuestros compañeros, y acabar con el jefe que hay en la zona central. La idea me encanta, aunque reconozco que la ejecución podría mejorarse, que es el motivo por el cual casi todo el mundo odia este sitio.
El Velo es el lugar al que van los dormidos y los muertos, aunque sólo los magos recuerdan haber estado aquí al dormir. También es el sitio que habitan los demonios y los espíritus. Es precisamente la influencia del Velo la que permite a los humanos y los elfos poseer magia. Y los enanos no pueden ser magos porque no sueñan.)
(Estoy de acuerdo con mucha gente que esa escena habría sido mejor si estuviera relacionada con el origen del personaje en lugar de Duncan. Porque vale, Duncan te salva la vida, pero no es alguien a quien llevas conociendo desde siempre.)
Un momento, yo te estaba buscando. Tenías una Letanía que podía ayudarme o algo así.
(Y para salir de aquí hay que hacer lo que expliqué antes.)
(Así que vamos al grano)
Sinceramente, ni siquiera te había visto.
¿Tu poder?
¡Como mola! ¿Me podré convertir en más animales?
El Velo es un lugar muy raro.
Y NI SIQUIERA ME LIBRO DE VOSOTROS AQUÍ. MORID.
(Hay un montón de objetos que te suben las estadísticas por aquí.)
¿Por qué me has visto? ¡Tengo sigilo!
(Y aquí no me vieron, pero empezaron a atacar a ese guerrero.)
Me da un poco de repelús la forma en la que has dicho eso.
Ahora puedo convertirme en un horror arcano y atravesar cosas translúcidas. Qué feos son, por los dioses.
Y aquí termina el paseo, que no me apetece morir de forma horrible. Al siguiente sitio.
Tal vez no me ataquen si no abro la puerta.
¿Qué está pasando?
¡Se han matado entre ellos!
Tengo la ligera sospecha de que por aquí va a hacer calor.
Estás en llamas.
Ahora puedo atravesar fuego sin morir. Y los ataques de fuego apenas me hacen cosquillas.
¿Qué pintáis vosotras aquí? ¿Y por qué hay golems? ¡Ni siquiera duermen!
¡SÍ! ¡Shale tiene razón! ¡Ser un gólem es la hostia!
Aunque no entiendo por qué tengo orejitas.
Por fin encuentro al demonio que controla esta zona.
Ya se ha muerto. Qué triste.
En la forma de gólem nada me dura más de un par de golpes.
Parece que he desbloqueado un sitio apartado del resto. A ver qué hay.
¿Wynne? ¿Era aquí dónde estabas? ¡Y aún no están muertos, esto sólo es una pesadilla!
No, que necesito tus habilidades curativas.
Estamos en el Velo, Wynne. Deberías saberlo mejor que yo.
¿Pero tú no estabas muerto?
Aunque gracias por ayudarme a convencerla.
(Y tras el combate, Wynne desaparece.)
¡El puto sigilo no funciona!
Sí, venga, muere ya.
Gracias.
¿Esto significa que los gólem sueñan?
Pero no tengo ni idea de por qué estás soñando cuándo no duermes.
Por mi, adelante.
Jo, jo, jo.
Y ya sólo falta uno. Pero antes vamos a ver a Leliana.
Pero necesito su ayuda para salir de aquí y salvar el mundo.
¡Pero tuviste un sueño de tu dios diciéndote que te unieras a nosotros! O eso me contaste.
Por favor, Leliana, no desaparezcas tu también cuando acabemos con eso.
¡¿Qué te he dicho?! ¿Tan mal líder soy que no me queréis ni en sueños?
En realidad los he matado a todos menos a uno.
¿Y qué ocurrió?
¡¿Te habías dormido?!
Genial... Aunque no me extraña.
No es mala idea, la verdad.
No te preocupes, ya casi me he cargado a los demonios. Saldremos de aquí en seguida.
Me atacan hasta pelotitas de luz flotantes.
Al fin te encuentro. Muere de una vez para que pueda cargarme a tu jefe y salir de aquí.
Alguien con ganas de partirte la cara. Y lo mejor es que no puedes huir durmiéndome porque ya estoy dormido.
¡Habéis vuelto!
(Rescatarlos de las pesadillas sirve para que te ayuden en esta batalla. No se quedan atrapados aquí para siempre aunque no les ayudes.)
¡Sí, Shale! ¡Rómpele la cabeza por mi!
Espera, ahora yo también puedo convertirme en gólem.
¡JAJAJAJAJA!
¡No puedes contra el poder de un golem! ¡De dos golem!
Y... ¿descansa en paz?
Ya no podré volver a ser un gólem...
¿Por qué hay crías de dragón aquí? ¿Las abominaciones necesitaban mascotas o qué?
Desde luego, la decoración no ha mejorado nada.
Parece un poco traumatizado.
Somos reales. Todos nosotros.
Le dije que mataría demonios y salvaría gente. Necesito reclutar a la mayor cantidad de gente posible para luchar contra la Ruina.
¿Has escuchado algo de lo que he dicho?
Vale, eso no suena bien. Tendremos que darnos prisa o no quedará a nadie a quien reclutar.
Tú échate una siesta, que pareces necesitarlo bastante.
(Espero que no seas tan pesado con el Inquisidor, porque si no, cuando juegue a DO:I voy a querer darte una bofetada cada vez que te vea.
Sí, es Cullen. El mismo Cullen. No sé nada más al respecto y no quiero saberlo hasta que juegue, estáis advertidos.)
Cuidado no vayas a terminar apuñalando gente por pura paranoia.
Reconozco que se me está revolviendo el estómago.
Guau. ¿Qué cojones?
He visto suficiente. ¡Tenemos que matar ya!
No suelo ser tan directo, pero no sé durante cuánto tiempo podré retener el desayuno en el estómago, así que prefiero darme prisa con esto.
(Se ha convertido en un demonio del orgullo. O se ha dejado poseer por uno, supongo)
(Durante la batalla algunos magos empezarán a transformarse en abominaciones y hay que usar la Letanía para evitarlo. Si Irving se convierte, los templarios acabarán con los magos sin que puedas hacer nada por evitarlo.)
(Y digo todo eso porque cuando me di cuenta, el combate había terminado y no había hecho ninguna captura. Ja, ja, ja.)
Podéis pagarla ayudándome a luchar contra la Ruina. O pueden ayudarme los templarios, me da igual.
¡Te dije que lo solucionaría!
Te dije que te echaras una siesta.
¡Y es una persona sensata y con cerebro! Lo cual es bastante increíble.
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