Capítulo XXXII:
El punto de no retorno
En la última verborrea balbuceante sobre Star Wars que tuvimos, Revan y sus alegres compañeros se habían estrellado contra un planeta desconocido, que resultó ser nada más y nada menos que la cuna de los Rakata, alias Los Hacedores, antiguos fundadores del Imperio Infinito y esclavistas de muchas de las especies inteligentes que ahora pueblan la República.
Resulta que nuestro querido Halcón cayó en picado al suelo debido a un campo disruptor procedente del Templo de los Ancestros, el cual está sellado. Para acceder a él, sin embargo, se nos han presentado dos opciones: colaborar con los Rakatas Negros para eliminar a los Rakatas Rojos, o unirse a estos y tratar de lidiar con el primer grupo para que suelten a uno de sus prisioneros.
Y todo eso está muy bien, pero no nos han llegado a explicar del todo bien qué demonios es este templo.




A Revan le gusta la información redundante, por lo que se puede ver.
Lo de los Rakatas y la pérdida de su conexión con la Fuerza es un tema que se podría haber explorado mucho más. En el juego te lo mencionan un par de veces más para justificar el que tengas que pasar por una mazmorra adicional, pero es algo que sugiere muchas preguntas: ¿Cómo pierde una especie entera su conexión con la Fuerza? ¿Es una posibilidad relativamente conocida, o, por el contrario, son los únicos a los que les ha pasado esto? ¿Se debe a un problema genético o a algo superior, a algo más... místico?
Lo cierto es que no sé ninguna de esas cosas, así que todas esas preguntas se perderán. Se perderán... como lágrimas en la lluvia. Snif.



¡Ahora hasta sabemos qué tipo de enemigos vamos a encontrarnos en esta mazmorra!

Aparte de que es muy grande y muy peligrosa, no sabemos demasiado de ella.

Anda, anda, exagerado. Nosotros ya llevamos un buen tiempo aquí y el sol nos ha estado dando en la cara todo el rato.



Qué traviesos éramos entonces. Aaaaaah, los años mozos...
Hablando de traicionar, ¿qué habrá en esa sala que hay a espaldas del historiador?

Ooooh, ¡un ordenador de 30.000 años de antigüedad! Vamos a aporrearlo hasta que haga algo.



El PEOR. SISTEMA DE SEGURIDAD. DE LA HISTORIA.
¿No os trae recuerdos de Kashyyyk? Dios, cómo odio ese puto planeta.





Y así es como murió la variedad de elecciones en el juego. Con esto nos están diciendo de manera muy clara una cosa: que tenemos que elegir POR HUEVOS a una de las dos tribus. <Suspiro>
Con el cántico descargado los Rakatas Negros ya nos podrían ayudar, pero lo cierto es que no son muy de mi agrado. Los sacerdotes, por otro lado, son más dados a la conversación. Aunque... no sé, no sé, la base del Elegido era mucho más molona que ésta... uuuuhm... ¿sabéis qué? Vamos a ir primero hacia allí para ver qué opciones nos dan, y luego ya elegimos.

Esta imagen es una definición visual de lo que son los combates de relleno.



¿Ein? ¿Qué pasa?


¿Qué?

Oh, por el amor de... ¡No pensé que lo dijera en serio! ¡Ya habían establecido firmemente que temían nuestro poder! ¿¡Cómo iba a pensar que sería tan gilipollas!?
En fin...

... parece que nos han quitado la decisión de las manos. ¿Recordáis cuando dije en cierto momento que íbamos a tener que aniquilar a una de las tribus sí o sí? Bueno, ya sabéis por qué lo decía.
Lo cual me parece lamentable, la verdad. La auténtica función del planeta, a nivel narrativo al menos, es la de enfrentar a Revan a su pasado. Estando frente a frente con sus antiguos errores Revan debería tomar una elección, y al hacerlo demostraría si de verdad había cambiado o si seguía siendo el canalla en el que se había convertido al final de la guerra. Sin embargo, ¿qué tenemos con esto? Que o matamos a los Rakatas violentos que visten de negro, o matamos a los Rakatas pacifistas que visten de blanco. Hagas lo que hagas, sea cual sea la evolución de tu personaje o tu interpretación de él, terminas haciendo un puto genocidio.

¡Bravo! ¡Sí señor, ahí están nuestros héroes! ¡Jajaja, mirad a todas esas madres y a sus crías llorando, cubiertas en la sangre de sus seres queridos! ¡Morid, esclavos de la oscuridad! ¡Vosotros nos habéis atacado primero, así que nosotros estamos en la posición moral de abusar de nuestro poder y exterminaros a todos como los perros que sois! ¡Sí! ¡Viva el Lado Luminoso!

Revan: "¡No huyáis, cobardes! ¡Tenéis que morir TODOS por la elección que ha tomado vuestro líder!"
Jolee: "Te estás pasando, chico."
Revan: "¡AUNQUE ME LLEVE CINCO HORAS, ESTE SITIO VA A QUEDAR VACÍO!"
Canderous: "¡Así se habla!"




Es un combate interesante, aunque sea más por lo visual que otra cosa.

También es uno de los escasísimos momentos en los que he tenido que cambiarle el arma a alguien en el combate. En este caso el honor pertenece a Canderous, porque estar disparando un rifle gigante a bocajarro pierde su utilidad contra tres rancors. Para compensar le hemos puesto para pegarse cuerpo a cuerpo la espada de doble hoja de Ajunta Pall. Sí, en serio.

Y Jolee curando como un cabrón, claro.
El resplandor morado es, por supuesto, uno de los muchos escudos de energía que tenemos. Y, ahora que me fijo... dediqué tropecientos párrafos en el último capítulo para hablar de la Fundación, ¿verdad? ¿Por qué cojones no he caído en hablar de la puta referencia andante que son los escudos?
Uno de los elementos clave en las primeras historias de los libros (y en las no tan primeras) son, precisamente, los escudos personales, unos pequeños dispositivos que generan un campo de energía alrededor del portador que hacen rebotar cualquier disparo de arma láser. Es una descripción que encaja al 100% con lo que usamos en el juego, ¿verdad?
"Pero, ilustrísimo señor Orogird" - diréis - "¿no es cierto que un escudo personal es un elemento muy básico en la mayoría de ambientaciones de ciencia ficción?". Bueno, pues sí, es verdad que es algo muy genérico, pero recordemos una cosa: ¿qué es lo que decían de los escudos al principio del juego? ¿no sé qué de que era tecnología extraña, que la había traído el nuevo imperio Sith? ¿Que, al igual que sus naves, no se había visto nada igual en la República? Eso es exactamente lo que pasa en los libros. Al principio el imperio cree que lo de la Fundación no es más que un mito, y una de las leyendas más populares es que tienen extraños mecanimos que les protegen de cualquier arma.
El verdadero misterio es, sin embargo, cómo cojones he tardado tantísimo tiempo en sacarlo a colación. Me hago lento y viejo, necesito un abracito.

Bueno, mientras estaba hablando una vez más sobre la puta Fundación, Revan le ha reventado la cabeza contra el suelo al Elegido. Chachi.

¡Y con toda la experiencia que hemos conseguido hemos subido al fin al nivel 20, el nivel máximo!
Lo más triste es que, pese a ser sólo 12 niveles de Jedi, somos el tipo más poderoso de la Orden con diferencia.
En fin. ¡A saquear!

Aquí hay más piezas para reparar nuestra nave, que se dañó en el aterrizaje. Ya las cogimos de la otra nave estrellada que nos encontramos por ahí, pero mejor que sobren a que falten.

Y aquí está el Rakata Rojo capturado, ya sabéis, el que teníamos intención de negociar por él. Parece que disfruta de un rato tranquilo a solas, con los cadáveres de sus amigos empalados a sus espaldas.

UUuuhm, no sé, ¿cuántos días podía durar el empalamiento? Dependía de por dónde introdujeras el palito, eso ya lo sé, pero nunca recuerdo cuál era la versión larga.
Ah, sí, ya me acuerdo. La larga era en la que te clavaban desde abajo y te tirabas días agonizando mientras el palo subía lentamente por tu cuerpo hasta atravesarte del todo. La corta es la que han usado con estos de aquí. Entonces no, no puede haber supervivientes.




Menos mal, porque odio las misiones de escolta.

Curiosamente encontramos un cojón y medio de armas súper avanzadas en estos humildes cestos de mimbre. Ya sé que han estado saqueando todas las naves que se han estrellado en el planeta, pero eso no hace que su sistema de almacenaje sea menos gracioso.

Bueno, pues así es como se sirve a la Luz, niños. Recordadlo.
Ahora vayamos a ver a nuestros amigos los buenos para recibir nuestra recompensa por haber hecho tanto bien.

De camino usamos todas las piezas para reparar la nave, así la tenemos a punto para cualquier emergencia. Dicho esto... ¡Transición!






Sí, obviamente había un corte cuando se iban a deliberar, ¿pero a que es más gracioso pensar que tan solo andan cinco pasos para luego volver a informarnos de su decisión?
Lo sé, lo sé, soy un genio del humor. Por favor, no me pongáis en un pedestal; soy humano, igual que vosotros, solo que mejor en todos los sentidos.



Siguen siendo cautelosos, lo cual les coloca como, probablemente, el grupo más inteligente de todo el juego. Los Selkath molaban, pero eso de llevarnos a juicio tres veces fue un poco molesto.

Revan: "Que sí, hombre, que sí. ¿Que clase de persona créeis que soy? ¡Mira que retomo la Fragua y la hago disparar aquí, eh!"



No es como si fuera un cambio brutal, la verdad.
Bueno, tras merendar e ir al baño...


Revan: "Yo los pongo, yo los quito."

A sus órdenes.

Tralarí, tralará...

¿¡Cómo cojones habéis llegado aquí antes que nosotros!? ¡¡Es imposible!!
Ah, y todavía vamos con gente, es cierto. Usaremos nuestra habilidad especial de mandar a tomar por culo a la gente.

Listo.

Si vais a tardar muchas horas, ¿por qué cojones no podemos esperar en la nave? ¡Que yo venía comío y cagao por algo!



Anciano Rakata: "¡Aaaaah, un negro!"


Oh, por el amor de Dios...


Revan: "Me han convencido, señor maestro de ceremonias. No voy a permitir que ningún enemigo anónimo me queme la cara, me corte la mano o me reviente la mandíbula. Necesito carne de cañón para poder llegar a la gente importante."




Eso ha sido... eficaz.


Revan: "¿Habéis traído algo para picar?"
Juhani: "No."
Jolee: "Nop."
Revan: "Joder. ¿Y alguna holocinta para ver, o algo?"
Jolee: "No, ¡pero siempre podemos contar historias!"
Revan: "No, por favor, no."
Jolee: "Hace muchas décadas, cuando recién había empezado a trabajar como contrabandista, encontré este maletín que... "
... Transición.

Jolee: "... Vincent no estaba por ningún lado, pero había que entregar el maletín, así que lo cogí y lo abrí, para comprobar que todo estaba en orden. Curiosamente, en cuanto lo abrí, un extraño fulgor dorado emanó de él, y... "
Revan: "¡Mira! ¡Algo está pasando!"
Jolee: "Sí, eso está muy bien, pero como decía..."
Revan: "¡QUE MIRES!"

La madre de Dios. Y nosotros con nuestros rayitos y nuestros empujoncitos de mierda. ¡¿Cómo se hace eso?!



Jedi Justice Squad Senior edition, ¡en acción!
Y bueno, me he cansado ya de decir "¡Transición!", así que recurramos a un viejo amigo.



¿Soy yo o le estamos viendo más cuello de lo normal a Malak?

Insisto en que esas estadísticas infladas no llevan a ningún sitio. Vosotros no habéis hecho nada por mejorar la Fragua, sencillamente estáis redescubriendo su potencial. No puede haber un rendimiento superior al 100% cuando no has alterado nada.

¿Y qué coño hace ese droide ahí? ¿Le estará maquillando o algo?

¡UOOOOOOOH! ¡JAJAJAJAJAJAJA!
Me encanta este momento. Es la típica escena en la que tienes al personaje desfigurado siempre en planos realmente forzados para que no se le vea, de manera que el espectador está pensando "No va a salir, no va a salir...", para luego ¡BAAAM! Jajajaja. Un ejemplo reciente que se me viene a la cabeza ahora mismo es lo que hacen con Dos Caras en El Caballero Oscuro de Nolan.
Espera, ¿El Caballero Oscuro es del 2008? Me cago en la puta, pero si parece que fue ayer... Joder, me estoy haciendo viejo de verdad



¿De qué ha servido esta escena? Sólo para machacar una vez más lo de Bastila, y para humanizar al imperio de Malak demostrando que, pese a todo, no son racistas.
Ah, y para que podamos ver la gracia que le hizo Revan a su "amigo" en la cara, claro. ¿No somos adorables?


Bueno, pues aquí estamos. El Templo de los Ancestros.



El diseño es reminiscente de la tumba aquella donde encontramos el primer mapa de las estrellas en Dantooine, lo cual es muy correcto. Lo bueno es que tenemos de añadido vistas al mar y luz natural, así que eso que nos llevamos.

El templo puede parecer laberíntico al principio, lo cual puede asustar un poco al principio, pero nada más lejos de la realidad. Es un pasillo cerrado con un cojón y medio de salas que explorar, siendo la gran mayoría de ellas perfectamente olvidables.


Aparte de Jedis Oscuros también hay droides, lo cual demuestra una vez más que el poder de la Fuerza de destruir droides es increíblemente útil.

Ya sabéis qué va a pasar aquí.


Jujujuju.

Nunca sobra descargarse el mapa de la mazmorra, pero en ésta es especialmente útil.

En una de las salas nos encontramos a estos simpáticos adoradores del Lado Oscuro, y encima resultan conocer nuestra cara. Ya podrían haber sido así todos los de Korriban.
Ah, y recordad añadir mentalmente en todas estas conversaciones con opciones de diálogo binarias una tercera línea que consista en mi maravillosa persona cagándose en todo.


¿Por qué se lo estás diciendo a tu compañero?

¿Tú también? A ver, sí, tu amiga tiene unos ojazos de la hostia, pero creo que las amenazas son más eficaces cuando se las diriges a su supuesto objetivo.

Claro que sí, porque tomar la opción que podría evitar un baño de sangre es de gente mala.

Al ser nosotros Centinela, ahora mismo llevamos al equipo más poderoso del juego. ¿De verdad hace falta que os diga cómo acaba todo esto?

Vaya, otro que se está arreglando la cara.


Ah, pues no.

En serio, ¿es que Malak no deja que haya ningún Jedi Oscuro con pelo? Admito que es increíblemente gracioso y, encima, pega con el personaje, pero creo que es un poco exagerado.
Aunque lo cierto es que le comprendo. Bien sabe Dios que si yo pudiera haría calva a toda la humanidad. ¿Cómo os atrevéis a tener pelo mientras yo estoy aquí pasando frío en la puta cabeza?

Juhani: "No puede ser, su nivel de midiclorianos..."
Revan: "¡Tiene más de 8.000!"

En un 1vs1 habría sido muy jodido, pero con tres bestias pardas arremetiendo a la vez... en fin.

Y este es el poder del Lado Oscuro de causar miedo en el enemigo. Lo cual, unido a los efectos visuales que le han puesto, convierte a este Jedi Oscuro en un brujo del WoW. O en un sacerdote especializado en sombras.

El calvito maligno tiene una habitación entera para él solo, llena de cosas guays y malvadas, todo ello colocado de una manera organizada y vil.
Como todos los calvos.

Nuestra intención es llegar a la parte más alta del templo, pero la puerta para ir a esa zona está bloqueada. El único otro sitio al que podemos ir, y donde esperamos que haya algún panel de control para abrirnos el paso, es el sótano del templo.

Quitando que aquí ya sí que no hay luz natural, no hay un gran cambio respecto a lo de antes.

Oh, por el amor de Dios.

Sí, estamos ante el típico puzzle de tener que dejar todas las baldosas del mismo color.
| i1 | c1 | d1 |
| i2 | c2 | d2 |
| i3 | c3 | d3 |
| R |
La baldosa que está fuera de la matriz 3x3 (R) es la que sirve para resetear todo si la has cagado. Obviamente hay muchísimas formas de solucionar esto, incluyendo la opción de ponerte a pisar todo como loco hasta que se activen todas, que de hecho no es demasiado mala. Aun así, mi consejo es hacerlo todo siguiendo un patrón de "H":
1- Pisar d3-d2-21
2- Pisar d2-c2-i2
3- Pisar i3-i2-i1
Así no debería haber grandes problemas con algo tan tonto.

El problema que tiene mucha gente con esto, y yo me incluyo, es que este juego no tiene unos controles especialmente propicios para este tipo de cosas. Básicamente casi toda la complejidad del puzzle se centra en intentar que tu muñeco siga el puto camino que quieres que siga, y no el que le sale a él de los huevos. La cámara, por supuesto, es tu peor enemigo en esta fase.
Y... ¿Puerta masiva?

Tirorori ri ro riroriiiiiiii...

La puerta da paso a una sala enorme donde la única cosa que hay es el ordenador que hay en medio.


Dios, es Kashyyyk de nuevo. Ya hemos tenido este susto al principio del capítulo, ¡no volváis a repetirlo! ¡Monstruos!

Gracias a la Suerte. Desde luego no es un gran sistema de seguridad, pero es mucho más amigable.



Siendo un avatar de la Wikipedia, quizás tenga más información que los sacerdotes.








Esto ha sido francamente interesante. El ordenador ha confirmado todo lo que sospechábamos: la Fragua funciona con el Lado Oscuro de la Fuerza, y el Imperio Infinito cayó en buena medida debido a su incapacidad de sostener ese tipo de energía de forma adecuada. Que eran gilipollas, vamos.
Lo más interesante es, sin embargo, el círculo vicioso que genera: la Fragua necesita el Lado Oscuro, pero al usarlo sólo le exige más y más a aquellos que la alimentan, que en este caso es Malak. Esto explicaría en parte por qué nuestro maravilloso aprendiz se ha vuelto cada vez más y más idiota: porque para usar la Fragua necesita tirarse al pozo más profundo del Lado Oscuro. Es como un Anillo Único, pero en cutre y gigante.




Los sensores Rakata son muy, muy finos. Las cosas hay que decirlas.

Chachi piruli tope chupi.

Ya es por mera curiosidad, no es que necesitemos esta información para nada.





Estaréis notando un pequeño patrón aquí, y tenéis toda la razón. El ordenador está justificando todos los macguffins del juego con explicaciones que de hecho, suenan hasta bien. Básicamente éste es el punto de la historia donde los guionistas vieron que podían encajar todas esas piezas de trasfondo que no habían podido exponer de manera adecuada en el resto del juego.
En cuanto a la explicación de los mapas en sí, ahora queda todo mucho más aparente. No es que Revan y Malak encontraran las únicas pistas disponibles en toda la galaxia para llegar a la Fragua, sino que dieron con las que eran de más fácil acceso. ¿Por qué hemos ido entonces nosotros detrás de los mismos mapas que ellos? Pues porque ya sabíamos que estaban ahí, claro está. Revan podía recordar muy vagamente dónde estaban, y sumando eso a los pocos registros de actividad que pudieron encontrar los Jedis sobre el dúo calavera... ¡tachán! Tenemos un videojuego aclamado por el público y la crítica.





La Peste Negra, edición tirano.

Me estoy cansando con esto de las "razas". ¡Que son especies, coño! ¡Especies! Si estuviéramos hablando de que todos tienen un antepasado humanoide común, pues mira, todavía podría hacer la vista gorda, ¡pero es que ni eso!
También es verdad que esto es muy probablemente herencia del D&D y, en consecuencia, de gran parte del rol clásico. Pese a hablar de elfos, orcos, enanos y humanos, que son especies distintas, siempre se hablaba de razas, y eso se ha ido transmitiendo año tras año y juego tras juego. Y sí, ya sé que no queda tan bonito hacer un listado de especies como hacer un listado de razas, porque suena mejor lo último, pero eso no lo hace más correcto.
Y no metamos a los semielfos y a los semiorcos en esto, por favor.


Pues otros nos dicen que fue hace 30.000. En serio, hacen un bailoteo con las fechas acojonante.
Bueno, pues eso es todo lo que tenía el ordenador para contarnos. Ahora sabemos con mucho más detalle qué es lo que pasó con los Rakata y su Imperio, y a qué tipo de arma nos estamos enfrentando.

Armados con nuestro poderoso conocimiento histórico, retrocedemos y nos encaminamos a la parte del templo que antes estaba sellada, donde ahora podemos acceder a la parte superior.

Revan: "Oh, guay, luz natural."
Juhani: "Parece que hay alguien al final del puente, ¿verdad?"

Revan: "Sí, parece que hay alguien."
Jolee: "¿Quién es? Mi vista no es lo que era."

Revan: "Parece... un Jedi Oscuro."
Jolee: "Ajá."
Revan: "Y creo que es una mujer."
Jolee: "¿Dirías que tiene pinta de zorra?"

Juhani: "¡Es Bastila!"
Revan: "Ah, pues entonces sí. ¡Jiajaja!"
Jolee: "¡Jajajajaja!"
<Sonido de manos chocando>
<Sonido de dedos chasqueando>
Revan: "Genial."

