FINAL FANTASY X
Género: JRPG
Plataforma jugada: PS2
Desarrollador: SquareSoft
Introducción:
No creo que sea necesario hacer un mini resumen del argumento de este juego debido a su fama y popularidad, aun así para el que no lo sepa:
Final Fantasy X es la decima entrega numérica de la saga con el mismo nombre y en la que se nos cuenta la historia de Tidus, un joven y famoso deportista que un día ve su ciudad atacada por una enorme bestia llamada Sinh, la cual lo transporta a un nuevo y muy diferente mundo.
Lo que me gusta:
- Principalmente lo que me ha hecho querer terminar este juego ha sido su historia, sinceramente me ha encantado, el peregrinaje como va haciendo cambiar a los personajes poco a poco o el romance entre Tidus y Yuna el cual es importante, pero no es nada pesado o meloso como suele pasar en muchas ocasiones. Los giros que hay durante la trama están bastante bien llevados, salvo unos pocos que en mi opinión están un poquito pillados con pinzas (si, Auron, me refiero a ti).
La historia y el romance de Yuna y Tidus, lo mas destacable del juego
- Junto con la historia destaco la música del juego que ambienta muy bien los lugares, escenas y bastantes batallas, exceptuó algunas de Seymour las cuales tenían un tema no muy motivante para darle de leches al pesado de turno.
- Aunque me ha dado quebraderos de cabeza, me he cagado en su diseñador y en todas sus casillitas y caminos, el sistema del tablero de esferas me ha resultado bastante original y personalizable, sobre todo a partir de que ya podemos empezar a desbloquear los caminos que separan a los personajes e ir mezclándolos.
¿Cuantos quebraderos me habras dado condenado panel?
- Los personajes también están bastante bien desarrollados y creo que voy a destacar un poco a Wakka, el cómo empieza siendo un fiel creyente del dogma y el clero y al ir avanzando y descubriendo la verdad sobre este. Para la batalla el que más sobresale es Auron, igual demasiado ya que su fuerza, defensa y vida son tan altas que está casi obligado a participar en todos y cada uno de los combates, mientras que otros como Rikku solo entran para quitar a las maquinas de en medio y si eso robar alguna cosilla.
Lo que no me gusta:
- El mapa. Creo que podría compararlo con un rio, tienes la rama principal que es la que llegara al mar y mientras hay algún que otro rio pequeño que se une a ella, los cuales si los miramos encontramos cofres o alguna chorradilla, pero siguen siendo ríos sin importancia. Luego hay ocasiones en las que el rio se ensancha creando lagos enormes como el desierto o la pradera, pero después se vuelve a estrechar y sigue tirando para adelante.
Las batallas son entretenidas, salvo cuando aparecen los Mobols
- La falta de exploración. Al ir por ese rio pues como que no hay mucho que explorar y el juego nos hace tirar para adelante en todo momento y hasta que podamos volver atrás… ¡uf! Y lo mejor, es que cuando por fin podemos hacerlo solo nos dan un mapa con tres opciones: Lugares visitados, contraseñas y búsqueda libre por coordenadas. Me ha faltado libertad en este juego, demasiada para mi gusto.
- Los eones. No, no tengo ningún problema con ellos, me gustan, pero la facilidad que tienen de romper el juego me mosquea, al principio lo veo bien, pero más adelante encontrarte con jefes que te obliguen a que abuses del límite de los eones porque si no barren a tu equipo…no me gusta, aun tengo una partida guardada en frente del jefe secreto más poderoso del Golden Sun 3 porque no me quede nada a gusto conmigo misma al usar el truco de los Djinn y lo mismo me ha pasado con el ultimo jefe, el ver como Anima se comía 80000 de vida con su límite no me deja contenta.
No me mires asi despues de haberte cebao con el jefe, bestia
- Lo que realmente no me ha gustado y me ha hecho cabrearme del palo de no querer jugarlo en días es que el juego te obliga al uso de alguna guía o ayuda. Los templos de ciertos eones, el regresar al fin a antiguos lugares y encontrarnos con jefes secretos de los que nada ni nadie nos avisa y que nos sacan mas números que los premios de la lotería, los diccionarios que ni sabes por dónde empezar a buscarlos, las contraseñas y coordenadas para la exploración y… no avisar en Libra que cierto jefe sabe un ataque que puede destrozar al grupo entero si o si y hacerte tragar la misma puñetera escena de 30 minutos de duración otra vez.
Momento destacable: La escena de Tidus y Yuna en el lago con el tema cantado de fondo, es algo que me ha encantado y lo más bonito del juego.
Conclusión: Final Fantasy X es un juego precioso con una historia y banda sonoras más que destacables, pero que tiene algunas cosas que hacen que llegas a no querer saber nada de él y rejugar sus 70 horas sea una cosa que te pensarías demasiado bien.
Nota: * insertar nota con la que Loud y Malfuin no me descuarticen*