Capítulo 2: El bucólico mundo demoniaco.
: Si no te unes a nosotros, pienso desplumarte y arrancarte las patas.
Hooty: Vale, vale...
: Bien, tras ese breve retroceso, volvemos a donde lo dejamos. Estamos en... ¿VillaHuey? ¿Quién es Huey?
: Pero nosotros queremos ver a Lucifer...
: Lo primero será ir a la tienda a por un mapa. No llegaremos a ningún lado sin él.
: Aquí tienes un banco. Puedes guardar el dinero y sacarlo en cualquier otra tienda. Por supuesto, eso sólo nos serviría de algo si algún demonio logra vencernos y robarte, cosa que
no ocurrirá.
Gnomo: Pero hay una grieta temporal en el camino.
: Pues espero que no tengamos que ir en esa dirección...
: Creo que tendremos que ir allí.
: Habrá que recordar eso.
Pixy:
Su nombre es Wartak.
: Algo me dice que tendremos que ir allí.
: ¿Y qué es este sitio?
: ¡Oh! ¡Un Laboratorio de Fusión! Entremos.
: ¿Fusionar? ¿Como lo que hacían Goten y Trunks en Dragon Ball?
: Parecido, pero un poco más permanente. Haz la prueba.
:
: Muy bien, Windling, Icy, os vais a conocer muy a fondo.
: ¡MOLA! ¡Otra vez! ¡Otra vez!
: Creo que estos me gustaban más antes.
: Oye, ¿y qué pasa si quiero fusionarte a ti? También eres un demonio.
: ¿A mí? Venga, inténtalo.
: Así que me fusionas con las ovejitas numeradas, ¿eh? Siempre me ha gustado el cordero.
: Espera, ¿qué?
: Digamos que mi forma física y mi personalidad son demasiado... estables, no serán influidas tan fácilmente sólo por fusionarme con uno de estos demonios. Ganaré parte de su poder, pero no influirá en mi personalidad ni en mi forma.
: Pero... Esto es... ¡Esto es como si te lo hubieras zampado!
: Si quieres decirlo así... Por cierto, ¿qué hay de postre?
: No sé si me gusta esto... Los demonios se unen a nosotros confiando...
: Se unen porque son débiles y cobardes. Tú dame un puñado de debiluchos al día, así servirán a un bien mayor. Además, es la única forma de hacerme más fuerte. Pero sigamos fusionando, necesitamos un compañero a mi altura. Fusiona a la Rata de Lava y a Aminoz.
: Y ahora combínalo con Krane, el pájaro de fuego de antes.
: ¡Perfecto! No me incomoda admitir que el León de Batalla es incluso más poderoso que yo ahora mismo.
: Ahora tenemos un equipo ideal. Podemos continuar el viaje.
: Pero antes teníamos muchos más amigos y aliados...
: Tu Demiloc sólo puede invocar un demonio cada vez, ¿verdad? ¿De qué te sirve tener muchos si los van a ir eliminando uno a uno? Es mucho mejor llevar un par de compañeros tan fuertes como sea posible. Echemos un vistazo a ese mapa.
: ¡Salen los demonios que hemos visto en cada zona!
: Útil. Así sabremos a dónde acudir cuando me apetezca un bocado fácil de reclutar.
: ¡Gale!
: Tal como sospechábamos.
: ¡Ah! ¡No aparezcas de repente!
:
debería conocer una manera de atravesar esta grieta temporal. ¡Akira, Lord Lucifer y yo te esperaremos en el Palacio Oscuro!
: ¡Espera! Si vas a ir por otro camino, llévanos contigo...
: Jé. Seguro que estaba aquí porque él tampoco puede pasar por la grieta temporal y necesitas que la arreglemos.
...
: Bien, si no malinterpreto el mapa, ahora tenemos que ir hacia el este, atravesando esa región de...
: Larguísimos y vertiginosos puentes colgantes.
: ¿A dónde iremos a parar si nos caemos desde aquí? Eso de ahí abajo parece el cielo...
: Creo que caeríamos mucho tiempo y acabaríamos volviendo al punto de partida. Pero la verdad, no tengo ni idea.
: ¡Un Ángel! ¡Un Ángel! Creía que aquí todos erais demonios...
: Bueno, técnicamente él también es...
: ¡Lo quiero en mi equipo!
: Bien. Ejem. ¡Chavalín, más vale que te vengas con nosotros si no quieres que te meta ese cetro por el...!
: ¡GALE!
: ¡Mira lo que has conseguido! ¡Pobrecillo!
: Vale, vale, perdona. Mira, convenceré a esta serpiente blanca como disculpa.
: Uhm, no es que vayas sobrado de dinero ahora mismo, quizá no deberías...
: ¡Tenemos de sobra! ¡Dale lo que pide!
: Supongo que es el único camino. Esos... ¿dientes? no parecen muy alentadores.
: Según el mapa, hay que ir por aquí.
: ¿Qué aterradores demonios encontraremos en las profundides...?
: ...
: ...
: La quiero.
: Yo más.
: Pero no la amenaces con meterle nada por ningún lado
: Que no, que no. Observa. Ajem. ¿Te gustaría darte una vuelta con nosotros, señorita? Tratamos muy bien a los felinos. Aquí el señor León de Guerra puede dar fe de ello... Y parece interesado en ti.
León de Guerra: ¡Oye! ¡A mí no me metas en esto!
: ¡León de Guerra, cierra el pico! ¡Lo has estropeado!
: ¡No discutáis entre vosotros que se aprovecha!
: ¡Señorita, por favor!
: No... No acabo de entender el cambio.
: Todo ha salido bien, no te quejes.
: Ey... ¿Es esto lo que yo creo?
: Pero no podemos hacer nada al respecto.
: Los chicles suben nuestras aptitudes de forma permanente. Yo me comeré todos los que encuentre.
León de Guerra: Eso no me suena muy justo.
: Los demás podéis fusionaros entre vosotros para aumentar vuestro poder una y otra vez. Yo tengo que estar siempre en primera línea y no tengo esa ventaja, necesito muchos demonios débiles para fortalecerme.
: Bueno, conseguimos pasar sin problemas.
: Este es el bosque laberíntico que nos dijeron.
: Me limitaré a ir en línea recta, así no puedo perderme.
: Ñam.
: Me lo temía. Hemos vuelto al punto de partida.
: ¡Pero si he ido todo el rato en línea recta!
: Estás en Dem. Las leyes físicas normales no se aplican.
: ¿Qué Dem ni qué demonios? ¡Esto es el puto bosque del Zelda!
León de Guerra: Akira, si la exploración de este lugar te agota, puedo devolverte a VillaHuey con mis poderes de teletransportación.
: ¡Tú sí que eres útil, León de Guerra!
León de Guerra: Gracias. Hago lo que puedo.
: Estas piedras deben ser la salida. Al final no ha sido para tanto.
: Ya sabemos algo sobre ese tal Tupon. Tiene un gusto pésimo.
: ¿No está en casa?
: Mira, hay una campana.
La campana hace bastante escándalo...
: Tú sigue dándole.
: Bueno, si no está, no está...
: Hazme caso.
Tupon:
No sé por qué me has despertado de mi siesta... ¡Pero vas a pagármelas! Listo o no, ¡allá voy!
: Eeeeh, relajado, amigo. Si no quieres que te despierten... ¡No pongas una puta campana en el recibidor!
: Jé, no ha sido para tanto.
León de Guerra: He tenido que curarte mucho.
: Eso no se cuenta, hombre.
: Y tu eres el idiota que ataca al primero que le despierta sin preguntar primero. Seguro que hasta tenías la Vuelta Ciclista puesta de fondo mientras dormías en el sofá.
Tupon: Prefiero no responder a eso.
: ¿Un Hiper-Molinillo...?
Tupon:
¡Esto mandará cualquier cosa por los aires!
: Pero estamos hablando de grietas temporales, no creo que...
: ...
Tupon:
Pero eso no significa que vaya a destruirlas. Necesitarás algo más para deshacerte de ellas. ¡Buena suerte, chaval!
: No sé si es un idiota o un genio.
Tupon:
El Hiper-Molinillo sólo puede ser utilizado una vez.
: Pues danos muchos.
Tupon:
En cualquier caso, ve a Ciudad Central y habla con Lord Lucifer. Puedes volver a verme después, si tu quieres. Siempre serás bien recibido.
: Claro, porque ya has descubierto que eso de recibirnos mal es doloroso.
Tupon:
Cuando lo hagas, quizá podría unirme a tu equipo.
: ¡Genial!
: ¿Y ahora qué pasa?
: ¿Es por ese papel de bollycao que tiré al jardín de la escuela? ¡Pensaba echarlo a la papelera, lo juro! Lo llevaba en el bolsillo y todo, pero se me salió y como estaba sonando la campana de las clases no quise pararme, ¡LO SIENTO!
Kibra: No sé de qué me hablas...
: Uff...
Kibra:
Akira, las grietas temporales absorben la vida de mis súbditos.
:
Me dirijo a Ciudad Central, donde espero encontrar a Lucifer y preguntarle cómo destruirlas.
Kibra:
¿Has notado la grieta temporal en la cueva cuando venías hacia aquí? Esa grieta crece con el paso del tiempo.
: Joder, chaval, no es tan difícil de asimilar. Las manzanas en los árboles también hacen eso.
Kibra:
Atravesarás muchas dificultades para salvar este mundo. Pero recuerda, siempre estaremos contigo en espíritu.
: ¿En espíritu? ¿Entonces vas a meter tu espíritu en mi Demiloc?
Kibra: No te pases.
: Sí, sí, muy bonito. Ahora teletransportémonos a VillaHuey y volemos esa grieta temporal de una vez.
La luz y la sombra manan, envolviendo a Akira por completo.
:
¡Ahora podemos ir a ver a Lucifer!
: ¿Eso de ahí abajo son estrellas?
: Sip.
: Es bonito, pero da vértigo.
: Un... diplodocus con casco de Megaman.
: Lo quieres.
: Lo quiero.
: No tenemos, señor Mokele...
: Creo que es un poco susceptible.
: Pero con un poco de paciencia puedes poner de tu lado a cualquiera.
: Otro golpe más y te lo hubieras cargado...
: Nunca dije que yo fuera paciente.
: Otro de estos. Pero no hay nada que podamos hacer al respecto. Mira, creo que hay una casa allí abajo.
: ¿Se puede...? No hay nadie.
: ¡Uy! Perdone, perdone, es que... Parece usted una lámpara de pie. No se ofenda.
: Caray, y ni siquiera he tenido que amenazarle.
: Da un poco de mal rollo, pero no nos viene mal.
: ¡Por fin! ¡Civilización!
: Siempre hay un tipo en la entrada de las ciudades al que pagan por decir el nombre de la ciudad. Se dice que en la antigüedad usaban carteles, pero se rebelaron contra los demonios.
: ¡Ya casi estamos! Pero primero vamos a la posada...
Pixy:
Es una ciudad subterránea de Dem.
: Bueno, por ahora eso no nos interesa...
: ¿Doncellas?
: ¡Olvida eso! ¡Mira! ¡No sabía que teníais ordenadores en Dem!
: Todos llevan Windows Vista.
: ¿Qué hicisteis para merecer este infierno?
: Bueno, vamos a aprovechar para fusionar un poco.
Wiregg: ¿Qué? ¿Vais a fusionarme?
: Al menos no te podrás quejar de que te aburres con nosotros.
: ¡Encantado, Jack Frost! ¡Ji-jó!
: Me suenan de algo estas Doncellas del Tiempo... Aunque creo que las conozco con otro nombre.
: ¡Estoy deseando visitarlo! ¡Ji-jó!
: No te adelantes a los acontecimientos, chaval.
: ¿Qué? ¿Un casino?
: ¿Podemos ir? ¿Podemos ir? ¿Podemos ir?
: Quizá merezca la pena echar un vistazo.
: Así que... ¿los chips son las fichas?
: Compraré unas pocas, vamos bien de dinero.
: ¡Oh! ¡Sé jugar a esto! ¡Me encanta!
: ¿De qué trata?
: Tienes que adivinar una combinación de tres números no repetidos. Puedes probar números al azar y te dicen cuantos números de los que has puesto están en la combinación, y cuantos en la posición exacta.
: Lo he puesto en Fácil para empezar, así que sólo pueden ser números del 0 al 5. Pruebo con estos tres.
: Uno de los tres está en la combinación, pero no en la posición exacta.
: Ahora tengo dos números de la combinación. Si el uno fuera el correcto, significaría que el 5 también forma parte de ella.
: Pero no lo era. Son estos tres números. Sin embargo, siguen desordenados...
: ¡Conseguido! No ha sido una buena puntuación, pero sólo quería chips suficientes para empezar a jugar en difícil.
: Vale, admito que me estás impresionando.
: Se te da muy bien esto, chaval. Pero creo que ya es suficiente, ¿vamos a ver los premios?
: ¿Hay premios?
: Bueno, después de todo es un casino.
: ¿Puedo tener a Ares? ¡Genial! ¡Hasta yo conozco su nombre!
: Llévatelo, y también a Akerr.
: ¡Bien! Parecen muy fuertes.
: Demasiado fuertes, aunque no importa. Ha sido un buen negocio.
: ¿Demasiado? ¿A qué te refieres?
: Ya lo descubrirás.
: Bueno, ya tenemos todos los premios interesantes. También están el Martillo Sagrado y la Túnica del Viento, pero no nos sirven para nada. ¡Vámonos!
: ¡Yo quiero quedarme aquiiiiií!
: No me hagas cabrearme, niño.
: Jo... Bueno, voy a invocar a Ares.
: ¿¡QUÉ!? ¿NO SOY LO BASTANTE FUERTE?
: Necesitas ser un invocador más poderoso y experimentado para hacerle salir del Demiloc.
: Esto no es justo...
: ¿Valhalla era el lugar del que vino Amy, no? ¿Fue creado por dos jóvenes...?
: ¡Ji-jó! Ojalá podamos visitarlas.
: ¡Ah! Alguien te mencionó en VillaHuey. Se me había olvidado.
: Así que eres el ayudante demoniaco del profesor Oak.
: ¿El ayudante de quién?
: Déjalo, son cosas de humanos.
: Oh, preguntas sobre demonios, te puedo chivar las respuestas.
: ¡Mira cuantos chicles he conseguido!
: Uh... Esperaba que nos regalase demonios.
Wartak: Si sigues respondiendo preguntas, te daré demonios.
: Pero es tan aburrido... ¿Me puedo ir al casino mientras tú vas respondiendo?
: Trato.
Un rato después...
: No está mal, ¿eh?
: Pero no puedo usar ninguno.
: ¿Ves? Así tendrás una razón para fortalecerte.
: Si es que estoy hecho un hacha.
: Bueno, vamos al Palacio Oscur... Oh, parece que no está pegado a la ciudad.
: Lo ponía en el mapa, no sé de qué te sorprendes.
: ¡Legolas afro!
: Es Midion.
: Ajem. Tenemos una noble tarea por delante, oh valeroso guerrero, y en verdad nos congratularía que formaras parte de nuestra Compañía. El destino de los mundos bien podría depender de nuestros valerosos esfuerzos.
Midion: ¡De buen grado me sumaré a vuestra expedición, oh nobles gentes!
Midion: Hacedme pues un hueco entre vuestras filas.
: ¿Y este de dónde sale?
: ¿Soy mono?
: Cuidado que nos pega.
: Vale, es bastante duro. Y encima ataca con fuego al pobre Jack.
Jack Frost: Ji... Jó... Lo siento.
: ¡No es culpa tuya! ¡No te preocupes, podremos con él!
: ¡Eh! ¡La gente que se cura en batalla es despreciable!
: Pero si tú también lo haces...
: ¡Por una buena causa!
: ¿En serio? ¿Le quedaba un solo punto de vida?
: Así son estas cosas.
: Este no quería comprobar nada, nos ha atacado porque le mola que le peguen.
: Sí, sí, pero podríamos haber ido a verle sin darnos de hostias con uno súbdito aburrido. Ahora tendremos que volver atrás. León de Guerra, si haces los honores...
León de Guerra: Desde luego.
León de Guerra: Vaya, ¿vais a fusionarme?
: Es que ya no estás a la altura de nuestros otros demonios...
León de Guerra: Bien, trataré de seguir siendo útil durante mi siguiente etapa.
: Ambos molaban más antes, me da pena hacerles esto.
: El poder es lo importante, chico. Ya les volverás a fusionar cuando toque.
Basilisco: Al menos podré seguir usando mi Teletransporte, sé que os resulta útil.
: A ver si llegamos al Palacio Oscuro de una vez. Esto cada vez tiene peor pinta.
: ¡Un gato espadachín!
: Disculpa, pero, ¿podrías bajar el arma? Nos vendría bien un espadachín como tú en el grupo.
: No hay señales de que Jin esté por aquí, así que... Sí, supongo que se refieren a mí.
: Genial, pero... ¿por qué le has reclutado, Gale? A Midion ya le teníamos.
: Es mi almuerzo.
: ¡Gale!
: Al fin, el Palacio Oscuro. Veamos qué quiere Lucifer.
: Te lo dije, les pagan para esto.
: Parece que no era por aquí.
:
Akira... El DemiKid, está aquí.
:
Las grietas temporales están...
:
A este ritmo, el futuro no podrá llegar. Mi mundo está condenado.
:
Dos jovenes se aventuraron fuera de este mundo... Eran conocidos como...
: Derrochaban imaginación en aquella época.
:
Dejaron este mundo con una visión... Un utópico sueño. Se fueron para crear Valhalla...
:
Sospecho que hay alguna clase de relación... Ambos dejaron las cosas al cuidado de las Doncellas del Tiempo. Estas tres doncellas residen en la Habitación Orgel, en las profundidades del palacio. Deberías visitarlas.
: Mira por donde, Forlo nos dijo que
tú eras el experto en grietas temporales.
: Vale, tú molas.
:
Te permitirá invocar un demonio extra durante las batallas. Podrías necesitarlo...
: Genial, vayamos a ver a esas Donc... ¡AGH! ¿Cómo es posible que estos sitios cada vez den más vértigo?
: ¡Doble invocación! ¡Molamos!
: ¡Ah, coño, claro! Las Doncellas del Tiempo son las Nornas.
: ¿Puedes predecir los números de la lotería?
Skuld: No parecéis necesitar mi ayuda para los juegos de azar, a juzgar por vuestras hazañas en el casino.
: Touché.
: Pues mira, mucho mejor que el Hiper-Molinillo.
: Sabía que habría alguna pega.
: ¿Entonces que hacemos?
: ¡Bien! ¡Nos vamos a la región helada! ¡Ji-jó!
: ¡Y nos llevamos un unicornio!
: Esto es todo por ahora. ¡Nos vemos en el siguiente capítulo, invocadores!