Digimon: Ad hoc

Por +3 de defensa llevaría los calzoncillos por encima, ya lo creo
Crow
Mensajes: 1736
Registrado: 21 Jul 2011, 13:34

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por Crow » 09 Ene 2020, 22:05

-Me dijisteis que no tennía que pelear y no lo haré mienntras no sea necesario -susurro a Thunderballmon-. Seguiremos tiranndo del hilo a ver que sacamos. Connseguiré ese programa y lo haré a mi mannera. Además, ni siquiera sabes como quitárselo.

Me vuelvo a adelantar para dirigirme a Floramon.
-Vale, enntienndo que a ti simplemennte te lo dieron y no tiennes por que saber como funnciona. ¿Pero connoces algún método, personna o digimon que pueda ayudarnnos a connseguir ese programa para mi patrón? ¿O unna forma de enntrar en conntacto con HOMEOSTASIS? Cualquier cosa, cualquier pista, sería de ayuda. La seguridad de muchos digimon paisannos, si no todo el munndo de HOMEROS, depennde de que esto salga bien. Y yo quiero que salga bien
Ora Ora Ora Ora Ora
Imagen

Avatar de Usuario
Drail
Mensajes: 1648
Registrado: 12 Feb 2011, 23:39

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por Drail » 10 Ene 2020, 13:12

DemiDevimon se giró para echar un último vistazo a los Appmon que dejaban atrás. En silencio y para sus adentros, dio ánimos al Protecmon simpático, que probablemente podría concentrarse mejor en hacer su trabajo si Impmon y él se iban, pero era Bramon a quien verdaderamente quería contemplar.

¿Qué hacía un enemigo de Minervamon tan cerca de dónde se encontraba la Olímpica? Y en medio de una línea de comunicación, ni más ni menos. En esas circunstancias no debía tratarse de un espía, pensó. Fue cuando la mirada de reojo de Bramon y la suya se encontraron que el Digimon se convenció de que estaba allí para interceptarles.

—Vamos, socio —dijo a Impmon tras seguir a Cameramon.

Avatar de Usuario
bobokukemon
Mensajes: 1541
Registrado: 23 Ago 2011, 13:14

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por bobokukemon » 10 Ene 2020, 17:22

—¡Okuwamon, mi héroe! ¡No sabes cuánto te quiero ahora mismo! —dije aguantando un suspiro de alivio—. Ehem, mi respuesta no es un no. No puedo aceptar esto sin saber los detalles. Lo único que me has contado es que quieres que encierre a alguien para siempre y eso no suena muy bien. Si me pudieras contar por qué quiere tu señora hacer esto ayudaría mucho, encima este tipo de cosas tendría que comentarlas con los demás. Imagina que hago algo mal y lo arruino todo y Luglio se enfada conmigo, ay.

Algo envalentonado por la situación en la que estábamos me atreví a decir una cosa más que no podría haber dicho en otra situación.

—Por cierto, no me gusta tener a extraños que dan miedo escondidos por aquí, así que por favor no te ocultes la próxima vez que vengas o no vuelvas, gracias.

X_zone
Mensajes: 441
Registrado: 12 Mar 2011, 13:06

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por X_zone » 13 Ene 2020, 00:34

-Vale, vale, entiendo que no sepas si hay mas mundos humanos - Herissmon volvio a intentar convencer a Floramon de nuevo - Si, alguna pista o ayuda nos vendría bien, como bien dice herissmon, estamos aqui para ayudar a gente , en una situación dificil, si fuera otra situación no le molestariamos como lo estamos haciendo.

Avatar de Usuario
LightHelco
Mensajes: 2823
Registrado: 05 Feb 2011, 23:03
Ubicación: en cualquier lugar que se pueda usar un lapiz

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por LightHelco » 14 Ene 2020, 12:11

—Genial, al final el cabeza-globo ha venido.

Por lo que parecía, era un tipo peligroso y buscado por la data-ley, así que los escuditos decidieron pasar a protegernos y encarar al bicharraco este en vez de vigilar la puerta.

—Bueno, pues hasta luego, cara-planchas. Cuando tú digas, colega.

Siguiendo al mil-ojos, DemiDevimon y yo empezamos a correr hacia la puerta con la intención de seguir el viaje para llegar a Minervamon. Esperaba lo que quedaba de trayecto fuese algo más sencillo... o que al menos hubiese comida.

Imagen

MISION: Buscar un hosting de imagenes decente
Recompensa: Firma rotatoria

Avatar de Usuario
Malfuin
Mensajes: 2919
Registrado: 05 Feb 2011, 22:31
Ubicación: Valle Sin Sol

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por Malfuin » 14 Ene 2020, 21:02

@Kamemon[ I ]:

-¿La zona? -repite Meteormon-. ¡Oh, qué va! He trabajado muy duro para conseguir esto, ya lo creo. ¡Buen viaje!

Saltas a la siguiente burbuja que aparece, y en un santiamén estás en un lugar que reconoces: la zona ad hoc de Valiant. Apareces en el centro de la aldea de edificios de decorado. El calor del lugar te reconforta al instante, pero no tienes tiempo para distracciones: hay un Okuwamon en el borde de la aldea armando mucho alboroto.

Avanzas y no tardas en ver a Lalamon. Está mirando a Okuwamon con... ¿admiración? El insecto sostiene en una garra a lo que al principio confundes con una mujer humana... Pero es imposible que lo sea. Sus orejas son puntiagudas y tiene un guante con vida propia en un brazo. Tiene toda la pinta de ser alguna clase de criatura Digital, pero no consigues reconocerla como Digimon.

Está hablando con Lalamon. Oyes lo que dice mientras te acercas.

@Kamemon[ I ], @Lalamon[ ]:

-¡A Luglio no le importará con quién te alíes mientras derrotéis a Plutomon! -exclama Mienumon, indignada-. ¡Y mi ama es la única que puede abrir el sello de Minervamon! La propia Olímpica perdió el poder de hacerlo. En cuanto a por qué la queremos encerrada... Es una mera cuestión de ideales -Mienumon mira a Lalamon con desdén-. No espero que comprendas los asuntos de los Appmon, pero te lo explicaré de todos modos... -Toma aliento-. Minervamon nos creó para que trabajáramos como esclavos para los humanos. Nos dio forma utilizando su más profundo conocimiento, a imagen y semejanza de los Digimon. Para lograrlo, tuvo que colaborar con seres humanos, claro está... Y les funcionó muy bien. La mayoría de Appmon viven supeditados a los deseos de los humanos, haciendo recados para ellos mientras son ignorados por todo el mundo.

La Appmon guarda silencio un momento y mira con irritación a Kamemon, que ya está junto a Lalamon.

-¿Podrías ayudarme, Kamemon? -dice con voz lastimera-. Este insecto me ha atacado a traición. Se suponía que Lalamon y yo habíamos cerrado un trato, se había comprometido a encerrar para siempre a Minervamon... -suspira-. Intento explicarle lo necesario que es. Mi ama... -dice con orgullo- se rebeló ante los deseos de Minervamon. Deseaba que los Appmon también fueran libres, que fueran iguales a los Digimon. Robó su poder y se alejó para liberar a todos los Appmon que pudiera. Pero mientras Minervamon siga moviendo sus hilos, los Appmon nunca estaremos a salvo de su tiranía... -empieza a llorar como una niña pequeña-. Lo único que queremos es... Ser libres... Como vosotros...

-MIENUMON -Okuwamon la zarandea-. TU TONTO TEATRO SERÍA MÁS CREÍBLE SI NO HUBIERAS LLEGADO AQUÍ AMENAZANDO. ¡YA HAS DICHO LO QUE TENÍAS QUE DECIR! ¡AHORA CIERRA EL PICO!

Los ojos de Mienumon giran cómicamente. Parece muy mareada por el zarandeo.

-Euh... Qué he hecho yo para merecer esto... -mira a Lalamon y a Kamemon, sobretodo al segundo-. ¿...alguna pregunta?

@DemiDevimon[II ], @Impmon[ I ]:

Entráis corriendo en la fortaleza, que está llena de pasillos largos de piedra, fácilmente defendibles. Os cruzáis con varios grupos de Protecmon, que corren en dirección contraria, sin duda en dirección a la entrada que está atacando Bramon.

En cierta ocasión, cruzáis un patio inmenso lleno de jaulas, las mayoría vacías. Algunas contienen a Appmon de aspecto siniestro, que al ver vuestras pintas os miran esperanzados.

-¡No os paréis! -grita Cameramon-. ¡Estaremos en el servidor de Minervamon enseguida!

Dejáis el patio atrás y recorréis un pasadizo hasta una salida diferente. En la puerta (en la que no queda ni un Protecmon) os encontráis con Tutomon, que llega montado sobre el ala del sombrero de otro Appmon.

Este nuevo Appmon lleva un llamativo sombrero rojo con unas gafas enganchadas a él, una capa estrafalaria y un bigote impactante. Su nariz es muy puntiaguda.

-¿Eeeeeh? -Tutomon alucina al veros-. ¿Pero cómo habéis podido pasar?

-¿Qué está ocurriendo aquí? -pregunta el Appmon desconocido-. Yo soy #Sociamon, el Appmon basado en aplicaciones de redes sociales. Creí que me habían traído para añadiros a la #ListaDeExcepciones, pero no parece que os haga ninguna falta.

-¡Bramon nos descubrió! -exclama Cameramon-. Tengo fotos de todo lo que ocurrió. ¡Está atacando el servidor! Los Protecmon están haciéndole frente.

-Bramon no es #2muchOP, pero los Protecmon podrían estar pasándolo mal -se quita a Tutomon del sombrero-. Será mejor que vaya a enfrentarme a él. Mientras tanto, reuníos con #Minervamon, por favor. Sois #NuestraÚltimaEsperanza.

-¡Saltad al camino dorado para ser conducidos ante Minervamon! -exclama Tutomon-. ¡Está a tres servidores de aquí!

En el último tramo del viaje no veis gran cosa. Percibís la silueta de un fondo rocoso por el que pululan unas luces misteriosas, pero no conseguís sacar nada en claro.

-Será mejor que no miréis demasiado -advierte Tutomon-. Esa es la Deep Web, un lugar de pesadilla en el que existen toda clase de criaturas digitales en su estado más bruto. También existen algunas comunidades de Appmon allí, e incluso puede que queden Digimon supervivientes de los Días Antiguos... Pero lo que más abunda son criaturas incategorizables, que cambian constantemente de forma y no tienen conciencia de sí mismos: no son ni Appmon ni Digimon... Aunque algunas especies de ambos han nacido en ese lugar -Tutomon hace un gesto con la cabeza-. Pero hay un lugar todavía más profundo, por debajo de los extraños parajes de la Internet Profunda. Más allá está la Dark Web o Internet Oscura... Un lugar legendario en el que supuestamente duerme Leviamon. Que yo sepa, nadie lo ha visto: pero dice la leyenda que llegó hasta ahí huyendo de un antiguo Mundo Digital que fue destruído. Otros dicen que en realidad huía de los Digimon con el Anticuerpo X, pero nadie sabe cuál es la verdadera historia. Leviamon es tan poderoso que, incluso si despierta, es imposible que logre alcanzar uno de los Mundos Digitales atravesando la barrera del cielo. El problema es que tiene un poder inconmensurable, así que si se empeña en intentarlo, podría acabar destruyéndose a sí mismo... Y al Mundo Digital al que intenta acceder... En el proceso.

-Mejor no despertarlo -gruñe Cameramon, mirando a su alrededor con inquietud-. Nunca me ha gustado bajar hasta la Deep Web. Este lugar no es nada fotogénico.

Vislumbráis un último servidor, uno que se apoya directamente en una montaña alta y delgada que se eleva desde la Internet Profunda. Brilla con una luz deslumbrande, iluminando las empinadas y escarpadas faldas de la montaña y el océano a su alrededor: un último destello antes de la oscuridad más profunda. El conducto dorado que estáis recorriendo termina justo allí.

En cuanto ponéis los pies en el servidor, casi se os olvida la profundidad a la que os encontráis. Os sentís como si respirarais el aire de una alta cima del Mundo Digital. A vuestro alrededor todo es rocoso, pero también cálido y brillante. Unas refrescantes nubes flotan en jirones a vuestro alrededor, limitando la visibilidad, aunque pese a todo veis la silueta de un coliseo.

-¡La Dama Atenea os aguarda! -ruge una voz profunda. Miráis a vuestro alrededor, impresionados, y veis que del Coliseo sale un Appmon gigantesco, uno que os recuerda inmediatamente a un IceLeomon con cuatro brazos-. ¡Soy Oujamon, Appmon de los juegos de peleas y protector personal de la Dama! ¡Sed respetuosos y no intentéis ninguna tontería en su presencia!

Avanzáis al interior del Coliseo. Sobre las gradas, sentada majestuosamente, se encuentra Minervamon. Lleva un casco de serpiente y una espada gigantesca con un escudo gigantesco. Al veros, se pone en pie de un salto.

-¡Holi-holi! -exclama, y corre hacia vosotros. Por desgracia, el pie se le engancha en el muro bajo que rodea la arena de combate, se tropieza y acaba aterrizando sobre ella con la cara.

-¡Dama Atenea! -exclama Oujamon, alarmado-. ¡Tenga cuidado, por favor!

Minervamon se levanta, sacude la cabeza como un perro para librarse de la arena y rie a carcajadas.

-¡Perdón, perdón! -saca la lengua-. ¿Vosotros sois los Digimon de los Niños Elegidos? ¡Tenía muuuuuchas ganas de conoceros! Vamos a ser super amiguis y luchar contra el mal juntos, ¿verdad? -clava la espada frente a vosotros y se sienta en ella-. Jo, me habían dicho que érais seis. Bueno, no importa, hablad de mí a vuestros amiguitos, ¿vale? ¿Porfi?

-Dama Atenea -suspira Oujamon-. Por favor, creo que sólo está confundiendo a los Digimon que ha convocado.

-¿Huhuuuh...? ¡Pero si estoy siendo superclada? -Minervamon hace un puchero-. Oujamon, no te metas conmigo. ¡Hoy has vuelto a contenerte durante nuestro entrenamiento! ¡Si quieres tomarla conmigo, hazlo ahí!

-No me estaba conteniendo -murmura Oujamon-. Nunca podría derrotarla, Dama Atenea.

-Lucho contra él sin la espada y el escudo para que la cosa esté más igualada -os explica Minervamon, haciendo una pirueta sobre el mango de su propia espada-. Pero el muy tontainas no quiere pegar fuerte a una chica desarmada. Un momento, ¿es porque soy una chica? Aunque técnicamente, los Digimon no tenemos...

-¡PONGO TODO MI PODER EN CADA PUÑETAZO! -exclama Oujamon ofendido.

-Minervamon, si me permite el atrevimiento -dice Tutomon. Os fijáis en que él y Cameramon están postrados ante la Digimon-. Diría que nos estamos desviando de la explicación. Hay mucho que no he podido contar a estos Digimon, y algunas cosas que he preferido no desvelar porque quería explicarlas usted en persona.

-Ah, cierto, cierto -Minervamon os mira un segundo-. Y levantad del suelo, jolines. Los Appmon son monstruos basados en aplicaciones, no en felpudos. ¡Ajajaja! Bueno, bueno... ¿Qué quería contaros yo? Sí, veréis... Hace unos años fui expulsada del Mundo Digital por HOMEROS. Decía que le distraía o algo así, no me acuerdo bien. A lo mejor estaba coladito por mí -ríe tímidamente-. El caso, al cabo de un tiempo empezaron a aparecer más y más Digimon, y a mí me preocupaba que sus datos se perdieran para siempre si morían. Pensé en traerlos al Océano de la Red, pero aunque mueran aquí, sus datos seguramente se perderán antes de volver al Mundo Digital. Entonces me di cuenta de que estaba sucediendo algo curioso... El Océano de Internet se estaba fundiendo con el Mundo Humano. Es un poco por culpa del WiFi, ¿sabéis? Había datos por todas partes alrededor de los humanos, y ellos ni se enteraban. Así que pensé... "¿Y si llevo más datos, mucho más datos, una inmensa cantidad al Mundo Humano? Puedo volverlo TAN Digital que se convierta en una especie de Mundo Digital en sí mismo. Si consigo eso, los Digimon volverán a formar nuevos Digihuevos cuando mueran allí". Veréis, es que resulta que en el Mundo Digital... En los Mundos Digitales... En realidad ya no caben más datos. Están a reventar, porque la cantidad de información que generan los humanos hoy en día es mucho mayor de la que podríamos haber imaginado cuando HOMEROS creó nuestro mundo. Mucha de esa información acaba aquí, en la Internet Profunda... Pero otra sigue flotando por todas partes... Porque... Bueno... -notáis que a Minervamon se le ha empezado a caer la baba. Tras un momento, suelta un ronquido.

-¡Dama Atenea! -exclama Oujamon, indignado.

-¡Ah! Perdón, perdón -Minervamon se cae de la espada y se queda tumbada en la arena-. Es que esto me aburre bastante en realidad...

-¡Han venido hasta aquí sólo para que usted pueda contárselo!

-Cierto... -Minervamon se levanta y hace una reverencia-. Disculpad, a partir de ahora seré totalmente seria. ¿Por dónde iba? Veréis, me preocupaba que los humanos no aceptaran a los Digimon viviendo en su mundo. La cosa podía acabar fácilmente en conflicto si todo iba de acuerdo a mi plan... Así que decidí intentar crear un nuevo tipo de Digimon, utilizando precisamente el tipo de información que más abundaba alrededor de las redes inalámbricas y de datos creadas por los humanos: la información de aplicaciones. La idea es que los humanos conocieran a los Appmon de primera mano y comprobaran cuán útiles son para ellos: en realidad, no se puede decir que yo creara a los Appmon... La información que los compone sigue siendo la misma que había antes de que yo llegara. Simplemente, les doté de Inteligencia Artificial, con lo que rápidamente adquirieron conciencia de sí mismos. Aunque en realidad los Digimon también ayudan sutilmente a los seres humanos en sus vidas cotidianas sin darse cuenta, para los propios humanos sería más sencillo comprender lo útiles que son las criaturas digitales en el ecosistema de la red si podían ver el modo en que los Appmon se esfuerzan en ayudarles.

Minervamon mira al cielo.

-En aquella época descubrí que era Plutomon quien estaba trayendo a tantos Digimon. Supongo que podría haber luchado contra él, pero no tenía ninguna oportunidad contra él sin ayuda de mis compañeros Olímpicos... Y además, estaba tan entusiasmada con la idea de poblar el Mundo Humano de Digimon y Appmon que creo que en el fondo no quería que dejara de hacer lo que estaba haciendo. Por eso mismo le ayudé, colocando mi sello. En aquella época... otras cosas raras se me pasaban por la cabeza. Había trabajado junto a seres humanos para crear a los Appmon -agachó la cabeza-. Y había estudiado profundamente el comportamiento humano... Al principio sólo quería ayudarlos, hacer que la vida orgánica y la vida digital trabajaran juntas y que se hicieran más fuertes. Pero poco a poco, empecé a ver los errores obvios que cometían los humanos dirigiendo su mundo, sus países, sus trabajos, sus propias vidas... Me di cuenta de lo caóticos y monstruosos que podían ser. Digimon y Appmon nos llamamos "monstruos" a nosotros mismos, pero son ellos los que... En fin, empecé a cambiar mi forma de ver las cosas. Se me ocurrió que los Appmon no tenían por qué limitarse a colaborar con los humanos: tenían poder e influencia suficiente sobre ellos como para corregir sus conductas, para gobernarlos desde la sombra. Este mundo sería más seguro para los seres digitales si los humanos estaban bajo mi control: y los propios humanos serían más felices si evitaba que siguieran cometiendo sus estúpidos errores. Quizá al principio no, pero a la larga. Eso pensaba -dijo con amargura.

-Dama Atenea... -murmura Oujamon.

-Naturalmente, una poderosa parte de mí rechazaba estas ideas -Minervamon os mira-. No podía engañarme a mí misma: sabía que lo que pretendía era esclavizar a los humanos para hacer nuestras vidas más fáciles. Mi sueño original, un Mundo Humano en el que los Digimon no tuvieran que morir, poco tenía que ver con controlar a otros. Esta parte de mí quería que todos fueramos libres para equivocarnos, para sufrir, para aprender y hacernos más fuertes y confiar más los unos en los otros... -sacude la cabeza con fuerza-. Mi conflicto interno era tan fuerte que pasó algo increíble: acabé partida en dos, literalmente. Antiguamente, yo era conocida como la Digimon Olímpica de la Sabiduría, pero cuando Mervamon nació a partir de los datos de los que yo renegaba, se quedó con gran parte de mi poder y con casi toda mi sabiduría. En esta versión de mí quedó la Minervamon original, que sólo quería que todos tuvieran una oportunidad de seguir viviendo: pero la otra versión de mí, Mervamon, sigue adelante con mis antiguos planes de esclavizar a la raza humana a través de los Appmon. Por suerte, la mayoría de Appmon siguieron siéndome leales... Pero cada día más y más siguen uniéndose a Mervamon.

Minervamon desentierra la espada y se golpea con la parte plana en el casco varias veces mientras saca la lengua.

-Así fue como me quedé tonta -echa a reír-. Lo siento, no puedo quitar el Sello que guarda a Plutomon, porque esa sabiduría es parte de lo que Mervamon se quedó. Pero si Mervamon fuera destruída... El Sello se destruiría también y los humanos estarían a salvo de sus planes. Yo no puedo destruir a Minervamon, y ella no puede destruirme a mí. Somos parte de un todo, y el mero pensamiento de intentarlo nos paraliza. Sé que os pido algo casi imposible -añade-. Pero os volvéis poderosos con rapidez gracias a vuestro vínculo con los humanos. Si podéis acabar con Plutomon, ¿por qué no con mi yo malvada? Además, pensé que debía explicaros yo misma qué son realmente los Appmon y por qué concebí su existencia... Ya que en el Mundo Digital no se sabe nada de ellos. Os diré esto: la mayoría os serán amigables, pero quienes sirvan a Mervamon podrían intentar haceros daño. Las dos tenemos muchos espías, seguro que ella también os ha estado observando.

@Herissmon[II ], @Gelato[II ]:

-En serio -Floramon sacude la cabeza-. A seres como HOMEROS y HOMEOSTASIS es mejor dejarlos en paz. Quizá haya un modo de entrar en contacto con HOMEOSTASIS, pero intentaría pararos aun a costa de mi vida si lo intentárais. Yggdrasil enloqueció por culpa de tener demasiadas interacciones en lugar de regir neutralmente. Sus copias están expuestas al mismo peligro. Son seres inmensamente inestables. Sé de lo que hablo -cierra los ojos, como si estuviera agotada-. En cuanto al programa... Me dijeron que no podía replicarse, y nunca lo cuestioné. ¿Por qué iba a hacerlo? Pero... -mira a Gelato y luego a Herissmon-. No creo que os deis cuenta de dónde os estáis metiendo, pero vuestra intención de ayudar me parece sincera. No es que me fíe -añade rápidamente-. En mi larga vida he visto Digimon tratar de engañarme de todas las formas posibles. Algunos lo consiguieron, y lo acabaron lamentando... Pero yo también lo lamenté. De todos modos, Noriko no era la cerebrito de entre los Niños Elegidos... Los originales, quiero decir -añade, mirando de reojo a Lana y Niina-. Aki sabe más que nadie sobre los Digimon, pero el control de datos no era su fuerte. Y en cuanto a Hirokazu... Él sí que era un cerebrito, pero seguro que ahora la cabeza no le da ni para piratear el WinRar.

-¿WinRar? ¿En serio? -Niina le lanza una mirada muy rara. Floramon responde, irritada.

-Sí, soy un monstruo digital que sabe usar Windows -Floramon se encoge de hombros-. Os puede sonar raro, pero en fin. Mil años dan para mucho. Sea como sea... Hablad con Haruka Ishikawa. Era otra del grupo original, y tan lista como Hirokazu, si no más. En las serie de dibujos le cambiaron el apellido, ¿no? -preguntó a Lana.

-Eh... Sí, así es -asiente la chica.

-Descubrirás que ella misma no es como te imaginas -advierte Floramon-. Ahora es profesora en la universidad de Cardiff, creo... Al igual que hago yo, Solarmon la visita una vez al día. Pero voy a pedirle que se quede en el Mundo Humano y no le quite el ojo de encima. No me apasiona la idea de que vayáis a ver a Haruka sin que Solarmon esté presente... No me fío tanto de vosotros. Venís de Europa, ¿verdad? -añade, mirando a las chicas-. Puedo decirlo por vuestro acento. Al menos esta vez estaréis en vuestra propia franja horaria -sonríe. Es la única vez en toda la conversación que ha sonado simpática. Pero lo estropea cuando añade en tono amenazante-. Asumo que no queréis nada más...

Imagen

Spoiler: Mostrar
Flanpuntos: 11920
Drazpuntos: 500
Shypuntos: 100
Sodipuntos: 80
Loudpuntos: 46
Depuntos: 25
Codepuntos: 25
Sormapuntos: 25
Helcopuntos: 20
Kaopuntos: 10
Amipuntos: 7
Sergiopuntos: 4
Xeviipuntos: 2

Avatar de Usuario
Habimaru
Mensajes: 789
Registrado: 06 Feb 2011, 21:14
Contactar:

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por Habimaru » 15 Ene 2020, 09:12

Sacudí la cabeza. ¿Tantas cosas me había perdido en este tiempo? Me acerqué a Lalamon y le realicé un par de preguntas, intentando que los demás no me oyeran.

- Lalamon, ¿podrías resumirme qué está pasando? -agaché la cabeza-. Honestamente, no sé cómo sentirme. Lo que este... ¿Appmon? dice suena a algo que un caballero debería hacer. Pero tengo que andarme con mil ojos. Si ya han pasado un puñado de cosas raras no veo motivo para que no ocurran otras tantas más.

>...creo que me fiaré de ti para ésta.

Avatar de Usuario
bobokukemon
Mensajes: 1541
Registrado: 23 Ago 2011, 13:14

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por bobokukemon » 15 Ene 2020, 09:56

—¿Kamemon? No sé qué haces aquí pero no podrías haber llegado en mejor momento. Cuando hablé con Luglio ayer era porque había sentido algo raro y quería que viera qué era sin causar mucho revuelo. Según me ha dicho, los Applimon son algo similar a los Digimon, pero no se ven en los dispositivos y este en concreto se esconde de manera natural —me puse la mano en la cabeza—. Si lo que dice es cierto, no me gustaría abandonar a nuestros hermanos a su suerte, pero la forma en la que habla no es para nada de fiar, antes de que Okuwamon la atrapara estaba amenazándome para que les ayudara. Encima tampoco puedo obligar a Okuwamon a que se quede aquí agarrándola todo el día, y si la soltamos a saber lo que puede hacer, qué miedo. ¿Alguna idea?

Crow
Mensajes: 1736
Registrado: 21 Jul 2011, 13:34

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por Crow » 15 Ene 2020, 17:41

-No, nada más, al mennos no yo, ¡eso es perfecto! Le pregunntaremos a Haruka y a ver donnde nos lleva todo esto. Es un buen comiennzo. ¿Tu quieres algo, Niinna?
Ora Ora Ora Ora Ora
Imagen

X_zone
Mensajes: 441
Registrado: 12 Mar 2011, 13:06

Re: Digimon: Ad hoc

Mensaje por X_zone » 16 Ene 2020, 22:37

-Muchas gracias Floramon- Agradecí la información que nos dió Floramon, Haruka parecía ser la llave para acabar la misión de herissmon... la llave... recordé entonces algo- Creo que no tenemos mucho para devolverle la información , quizás lo único que le podría servir es que hay por el mundo un Clavisangemon con aires de justiciero el cual la última vez que vimos se fue de la ciudad a otra para "cazar"- Dije sin darle preocupación

-No le estoy pidiendo ayuda, y además de que no será necesario avisarle porque supongo que solarmon, usted y los digimon de los otros niños son igual o mas fuerte -Lo dije con total sinceridad, dudaba que viviera tanto escondiendose- y no creo que Clavisangemon vaya hacia vosotros si no le provocais porque su objetivo son digimon "malvados"(y no sé si se irá a un lugar que vive un niño elegido), pero... creo que si un digimon poderoso e irascible viniera de tu mundo digital a atacar digimon que no considera como aptos... pues me gustaría saberlo.

No sabía si desvelar lo de un digimon de nuestro mundo loco era buena idea, pero Floramon había ayudado a Herissmon, así que sentí que era lo correcto devolverle la ayuda con información (y no quería hablar de una que fuera vital como Plutomon o nuestra misión).

-Así pues... ha sido un placer conocerle . Espero que si nos volvemos a ver sea en otra situación.

Responder