Soul Eater: Black Priest

Por +3 de defensa llevaría los calzoncillos por encima, ya lo creo
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Dark
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Dark » 23 Feb 2015, 09:39

¡Logré llegar a tiempo! ¡Oh dios mio, lo conseguí! Pero el tio ese asqueroso me ató, me tiró hacia él y me chupó. ME CHUPÓ.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH QUÉ ASCO QUITA QUITA QUITAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Ni tiempo a pensar me dio para darle un espadazo, pero el tio desapareció y... ¿eso era teletransportación? Pero la cuerda seguía ahí, queriendo hacer una morcilla de mi mano, así que el tio ese debía ser rápido de cojones. O eso, o su teletransportación era una cosa muy rara.

—¡REPUGNANTE! -la voz de Valeria vibró por encima de la música-. ¡ES ASQUEROSO! ¡ACABA CON ÉL, RITA! ¡VAMOS!

—¡LO SÉ! —dije recordando el asqueroso momento del lametazo—. ¡ESE TIO SE PUEDE DAR POR MUERTO, Y ME DEBE UN BAÑO DE BALNEARIO!

Y para colmo, el tio se recochineaba riéndose, haciendo brillar sus dientes entre las sombras y tio, por dios, ¿lleva ahí focos de luz o leds o algo? ¿Licor del polo? Me gustaría saber cómo tenía los dientes tan blanquitos. Pero se le iba a acabar el tener dientes blanquitos, porque de unos cuantos rotos no se iba a salvar. Si seguía atada, seguía unida a él, lo que significaba que sabría encontrarme... y yo a él. Cogí la cuerda y pegué un tirón para atraerlo a mi. Esta vez su lengua solo querrá lamer su sangre del tajo que le fuese a soltar, ya que en cuanto pudiese verlo el tio se iba a quedar sin alguna parte del cuerpo. Y ya de paso, miraría de quitarme la cuerda de las narices, que prefería seguir teniendo mano a no quedarme como el... ¿sueco? No, de Austria, pero mi mano conmigo y enterita.

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LightHelco
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por LightHelco » 23 Feb 2015, 14:48

—¡Auch! Eso ha dolido —me quejé frotándome el culo.

La cosa no había salido bien, pero al menos le habíamos quitado uno de los ojos y ahora estaba jugando muy a la defensiva. Lo cual significaba que tocaba mi ofensiva total. Golpeando los dos puños, me levanté y encaré al monstruo que estaba haciendo crecer unas cuchillas desde lo que parecían ser sus brazos.

—Yu, ¿te ves capaz de romper esos huesos? Porque si es así vamos a dejar de ser halcones para convertirnos en quebrantahuesos —sonreí bastante motivado con aquella pelea.

Prácticamente estaba tan motivado que ni llegué a escuchar la respuesta de mi compañero y lanzando el gancho para atrapar una de las cuchillas, me lancé rápidamente con intención de obligarle a defenderse y así romper sus armas de unos cuantos puñetazos. Tenía que ser bastante rápido, bueno siempre lo era, pero si conseguía cargarme las dos cuchillas podría amenazar el refuerzo de su cara y rompérsela de un buen derechazo.

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Aritriel
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Aritriel » 27 Feb 2015, 18:45

¡La habitación se había reparado sola! Los muebles estaban como nuevos y todo parecía limpio. Me pregunté cómo de mullida sería la cama ahora que volvía a estar intacta. La tentación de saltar sobre ella se me antojaba casi irresistible. ¡Era el suelo de todo crío; y yo no era menos! ¿Podría impulsarme tanto como para salir por la ventana?

Entonces oí voces de gente, y me di cuenta de que no estábamos solos. Pero la mujer y el niño no parecían darse cuenta de nuestra presencia. Aunque, un momento. ¡¿De dónde han salido!? ¡Si este sitio está abandonado! Durante un segundo parecía que el niño me miraba. Qué siniestro. ¿Estarían enfadados por haber entrado aquí sin más, aunque no debería haber nadie?

Entonces todo volvió a tener el aspecto de siempre; que casi parecía que nos iba a caer el techo encima, vamos. Y la mujer se convirtió en un zombi. ¡Un ZOMBI! Y pretendía luchar contra nosotros con una espada. Suria decía que era muy fuerte, pero yo no sabía que pensar. Era un saco de huesos andante, vamos; aunque decidí hacerle caso y no confiarme, porque ella era la lista del grupo. Le lancé unas llamas de prueba y me preparé para esquivar sus ataques e intentar usar los muebles de la habitación para protegerme.

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Malfuin
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Malfuin » 02 Mar 2015, 20:06

ALMAS MORIBUNDAS

Rada se transformó al instante y corriste escaleras arriba. Al llegar a lo alto, buscaste con la mirada a tu objetivo y lo encontraste volando en línea recta hacia el borde del tejado.

Disparaste.

La bola de energía golpeó al hada y la hizo estallar. Dos almas rojas se quedaron flotando cerca del borde. Rada suspiró y volvió a convertirse en humana.

-Un dinosaurio y un hada -comentó, negando con la cabeza-. ¿Qué locura es esta...?

Caminó hasta el borde, recogió las almas y se las tragó una tras otra. Mientras tanto, tú notabas que ocurría algo extraño a tu alrededor. Al principio no lo habías notado, pero una especie de niebla morada lo cubría todo a aquella altura. El cielo tenía un tono claramente purpúreo, aunque sabías que desde la calle se veía azul. Y te fijaste en que había figuras extrañas rondando por los edificios contiguos, aunque sus siluetas se desdibujaban por causa de aquella neblina y emanaban un aura demoniaca.

-Raro, ¿eh? -gritó una voz. Te fijaste en que había un tipo de aspecto extraño en el tejado del edificio contiguo. Tenía pinta de aborigen y muchas rayas horizontales tatuadas en la cara. Por lo que podías sentir, su alma también era un huevo de Kishin. Rada saltó hacia ti y se transformó en el acto-. ¡Eh, eh, eh! ¡Vamos! Yo en tu lugar no haría eso. Soy el único ser humano que queda por aquí -aseguró-. A menos que cuentes a los autómatas de ahí abajo -señaló hacia la calle-. Esos tipos ya no son personas de verdad, no tienen aquello que les hace humanos. Yo sé por qué, y si me perdonas la vida te lo diré. Pero primero... A ambos nos convendría que te encargaras de eso.

Señaló detrás de ti. Te diste la vuelta y viste como se formaba, a partir de la niebla, un inmenso olifante volador morado, que planeaba con ayuda de sus gigantescas orejas. Tenía un castillo de madera atado a la espalda, y montones de guerreros esqueletos se apoltronaban sobre él. Cada vez que el olifante aleteaba con las orejas, un puñado de esqueletos caía al vacío, aunque desaparecían antes de llegar al suelo.

-¡A propósito! -gritó el tipo del edificio de al lado-. ¡Yo no atraparía muchas almas de esqueletos! ¡Cada vez que destruyas a uno, una persona inocente morirá ahí abajo! ¡Pensé que debías saberlo! -aseguró, y cayendo de espaldas, se echó a reír a carcajadas.

El olifante planeaba alrededor del tejado, y los arqueros esqueleto empezaban a dispararte.

EL FANTASMA DE LA ÓPERA

Tu plan funcionó. El tirón lanzó a tu enemigo hacia ti por los aires, y se cubrió con el brazo para evitar tu ataque, pero la delgada extremidad salió volando al instante. El extraño chilló (su voz quedó ahogada por el sonido del concierto) y se arrastró a toda velocidad a una buena distancia, cerca de uno de los pilares de acero que sostenían el escenario.

Rápidamente, te quitaste la cuerda con el filo de Valeria y volviste a sentir la sangre fluir por tu mano.

Mientras tanto, el Fantasma estaba corriendo a toda velocidad... sin moverse del sitio. Se había agarrado con la mano que le quedaba a un lugar de acero y se sostenía en el sitio mientras sus pies hacían el movimiento de correr a toda velocidad, tan rápidamente que se desdibujaban y se veían borrosos. Lo único que evitaba que se moviera del sitio era aquella mano, cuando se soltara saldría disparado hacia ti como una bala.

DEVORADORA DE ALMAS

Enganchaste una cuchilla y la arrancaste de la mano de barro del tirón, lo cual te dejó desprevenido. Pudiste defenderte del ataque de la otra cuchilla, pero el monstruo se te había echado encima y consiguió tumbarte y pisarte con un pesado pie de barro. La punta de la cuchilla de hueso que te quedaba comenzó a girar como una broca de taladro y la dirigió directamente contra tu guantelete. Notaste la vibración en todo el brazo y oíste como Yu gruñía, tratando de resistir.

LA MANSIÓN DE LOS RECUERDOS

Lanzaste una llamarada hacia la enemiga, pero Neri lo esquivó con facilidad. Aun así, el tocador polvoriento estalló en llamas, que se extendieron rápidamente por la habitación. La zombi apoyó las plantas de los pies en una pared y saltó hacia ti. Levantaste la cama de una patada, haciendo que tu enemiga se topara de bruces con el colchón y rompiera el somier. Se recuperó rápidamente y tiró la cama a un lado con una mano, demostrando una fuerza increíble. El colchón quedó apoyado en una pared, envuelto en llamas.

De una habitación cercana llegó un grito.

-Ha sido Izumi -dijo Igna, tensa.

-Ahora no podemos hacer nada por ella -murmuró Suria-. Está con Ern, seguro que se las arreglará. No perdamos la concentración.

Neri se acercó y comenzó a lanzarte tajos con el cuchillo jamonero, tan rápidamente que apenas podrías defenderte más de unos segundos con las espadas. En cuestión de momentos atravesaría tu defensa.

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Aritriel
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Aritriel » 04 Mar 2015, 17:33

Para ser un saco de huesos y carne podrida, la muerta viviente esa se defendía bien. ¡Y tan bien! Era rapidísima y no tardó nada en obligarme a defenderme. Apenas se inmutó cuando le lancé la cama entera. ¡Qué se supone que estás hecha de huesos, no de acero! ¡Venga ya! ¡Es indignante que un zombie como tú, que ni siquiera debería moverse, me esté ganando en batalla con un cuchillo jamonero! ¡Jamonero!

-¡Alejate de mi, cosa!-le grité, mientras activaba el poder de viento para quitármela de encima y hacer que saliera volando. Aunque fuera tan fuerte, apenas tenía músculo y debería ser bastante ligera. Después me lancé a por ella para intentar cortarle los brazos. Sólo esperaba que no me atravesase a mi.

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Dark
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Dark » 04 Mar 2015, 21:08

Y al fin la sangre llegaba a mi mano. ¡Me llegaba a la mano! Nunca había estado tan contenta. Excepto cuando salí viva del casino. Y además el tio ese parecía molesto por lo que le había hecho. ¡Pero él me había chupado! Un brazo de un tio infectado no podía pagar el precio de que me chupase, no señor.

Ante la... ¿ofensiva? que parecía adaptar mi rival, me puse en una posición que le costase desequilibrarme y entonces esperé a que viniese. Si me acercaba y se... ¿soltaba?, quizá acabaría haciéndome mucho daño. Mejor resguardarse y cuando se acercase, estocada que se daría él solito debido a la velocidad que pudiese llevar, clavándose él mismo a Valeria. Y sino, pues le suelto un tajo. O algo.

Menudo bicho más raro que no hace más que cosas raras.

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Crow
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Crow » 04 Mar 2015, 21:48

-Desde luego tienes razón, esta misión parece un mal viaje de antiacidos... -me fijé en que desde aquella perspectiva se veían las cosas muy distintas, pero antes de investigar nada apareció un indígena, que además de malo, me dejó con el marrón de encargarme de un elefante volador- Ahora si que empiezo a creer que nos han drogado en el avión. ¡No hay elefantes en Australia! Y no poder encargarme de esos esqueletos va a ser un problema... ¡Hay que terminar esto deprisa!

Corrí hacia el borde del edificio, mientras intentaba esquivar flechas y cubrirme de ellas con Kalina Ann. Pretendía saltar hacia una de las patas delanteras del paquidermo y clavarme a ella con la bayoneta, y desde ahí colgarme de uno de sus colmillos con las piernas y dispararle en la boca al animal.
-Es en estos momentos cuando echo de menos mi otra mano.
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LightHelco
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por LightHelco » 05 Mar 2015, 13:47

—E-e-es-to-to-o n-o-o ti-ti-e-ne-e bu-u-en-a pi-in-ta-a-a —intenté hablar sintiendo como todo mi brazo vibraba.

Mirando si tenía la cuchilla arrancada a mano, la usaría para atravesar con ella su brazo y obligarle a detener el ataque. Si no, llevaría mi mano directamente hasta su cara para arrancarle los dientes y si podía alguna de las gemas, además, me pondría a empujar con las piernas y hacer uso de mi fuerza para ir apartando la pierna del monstruo y poder salir de debajo suyo.

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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Malfuin » 08 Mar 2015, 14:56

LA MANSIÓN DE LOS RECUERDOS

Utilizaste un vendaval para levantar al enemigo del suelo y lanzarlo por los aires. Antes de que llegara a caer, ya estabas comenzando tu contraataque. La zombi se defendió de tus tajos con el cuchillo, pero el arma oxidada terminó por partirse y Neli quedó indefensa, sin posibilidad de huir. Un tajo en cruz te bastó para, no solo cortarle los brazos, sino también atravesarle el pecho y dejarla fuera de combate.

Su carne pareció sisear y convertirse en mil gusanos antes de desvanecerse, y sobre el suelo frente a ti flotó un enorme huevo de Kishin, rojo, tan brillante que iluminaba toda la habitación.

-¡Vaya! -Igna se transformó en humana y se acercó al alma-. Esto no es un huevo normal y corriente, ¿verdad?

-No -Suria también se transformó y se acercó con cautela-. Estamos ante un alma excepcional. Equivale a cinco huevos de Kishin normales. En serio, hemos tenido mucha suerte de que la oponente tuviera un arma de baja calidad. Podría habernos hecho pedazos.

-Izumi gritó antes -recordó Igna. Las hermanas se miraron y se transformaron inmediatamente, después de que Suria se comiera el alma-. Sería mejor que les encontráramos.

No parecía quedar nada de interés en la habitación. Al salir al pasillo, visteis unas escaleras de bajada y una pared con otras dos puertas, una pequeña y otra grande.

-¿Dónde pueden estar? -preguntó Suria.

EL FANTASMA DE LA ÓPERA

El Fantasma se soltó y salió disparado hacia ti, levantando polvo con los pies. Aceleró tanto que durante un instante desapareció completamente de tu vista... y lo siguiente que notaste fue que todo estaba oscuro y sentías un dolor horrible tanto en la nariz como en la nuca. Te diste cuenta de que estabas tendida de espaldas y de que habías soltado a Valeria.

No podías verlo, pero a juzgar por los indicios, el enemigo estaba de pie sobre tu cara.

-¡RITA! -gritó Valeria-. ¡Voy a ayudarte! -a juzgar por el sonido, tu compañera estaba empezando a transformarse...

ALMAS MORIBUNDAS

Saltaste de forma bastante espectacular hacia el olifante, con la punta de la bayoneta por delante, y la clavaste profundamente en una de las patas. Oíste un berrido horrible mientras comenzabas a resbalar hacia el vacío y oías un grito de Rada inusualmente agudo... Aunque por suerte frenasteis antes de caer a la calle. Miraste hacia arriba: habías dejado un tajo enorme que cruzaba a lo largo la pata entera de la criatura.

-Lo siento -se disculpó Rada-. Parece que tenía demasiado filo.

Los esqueletos no podían dispararte desde arriba estando allí. Muchos de ellos adoptaron la extraña estrategia de saltar al vacío y dispararte mientras caían, pero su precisión en caída libre era horrible, y sólo un par de flechas llegaron a clavarse en la pata del olifante, lejos de vosotros. Los esqueletos no morían con la caída, simplemente se desvanecían al salir de la zona de niebla morada.

Trepaste trabajosamente y saltaste a uno de los colmillos inferiores, quedando bocaabajo. De repente, la trompa de la criatura comenzó a enrollarse a tu alrededor y amenazó con estrujarte hasta la muerte, pero fuiste más rápido y disparaste al animal en la boca.

La explosión fue inmensa. Viste trozos de castillo y esqueletos volar en todas direcciones mientras caías a la calle... para ir a dar de espaldas contra el techo de un coche, destrozándolo. Por suerte, el edificio tampoco había sido muy alto. Mientras estabas aturdido, tendido boca arriba, viste un huevo de Kishin flotar lentamente hacia ti y quedarse flotando sobre el coche destrozado.

-¿Qué se suele decir? -preguntó una voz-. ¿Ese sólo cuenta como uno?

Era el indígena. Visto de cerca, resultaba que no tenía tatuajes, sino hilos negros cosidos en franjas horizontales por toda la cara. Se relamía y el alma que acababas de conseguir se reflejaba en sus ojos. Sin embargo, Rada se transformó y se la comió antes, para luego quedarse mirándole con expresión malhumorada.

DEVORADORA DE ALMAS



Atravesaste el brazo del enemigo con la cuchilla, pero no pareció notarlo, así que agarraste las protecciones con la cara y las arrancaste de cuajo. Además, conseguiste salir de debajo enganchando tus piernas en la suya y empujando, con lo que conseguiste hacer una especie de llave.

Una vez que cayó hacia atrás, el enemigo pareció quedar aturdido durante unos momentos, así que pudiste arrancarle sin problemas las gemas de la cara. En cuanto lo hiciste, el enemigo perdió su forma y quedaste hundido hasta las rodillas sobre un montón enorme de barro.

Yu se transformó, caminando de puntillas alrededor del montón, se fue comiendo las almas una a una mientras se reía de ti.

-Tienes barro hasta en las orejas -se burló, yendo con cuidado de no marcharse el la ropa. Cuando hubo recolectado las almas, ambos mirasteis hacia arriba, al imponente risco sobre el que se alzaba el castillo, y que proyectaba su sombra sobre vosotros-. Bueno... ¿vamos? ¿Seguimos el camino o tratamos de trepar? Hay bastantes árboles en la ladera, así que sería fácil... Y podemos usar el gancho en las partes difíciles. O podrías usar tus alas... -añadió, pensativo.

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Crow
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Re: Soul Eater: Black Priest

Mensaje por Crow » 10 Mar 2015, 14:38

-Igual debería haberla clavado horizontalmente...
Primero casi me caí y luego un poco más y me convierto en un cacahuete, pero conseguí reventar al bicho aquel (tras escalar su pata de una forma no muy digna). Con lo que no contaba era con que fuera a explotar de aquella manera.
-Au... mi espalda... -me quejé mientras me levantaba y me ponía de pie delante de Rada- No te expongas tanto delante de él. ¡Y tú! ¿No tenias nada que explicarnos? Porque igual decido que yo quiero contar dos.
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